El Sistema de redención del Villano Escoria

14. Verdad

Liu Qingge lo miraba como si le hubiera dicho que extraterrestres habían aterrizado frente del café y habían ordenado un matcha té latte y un sándwich de atún para llevar mientras secuestraban una vaca y varios pollos para repoblar su planeta.

Bueno... le acababa de decir que Shen Jiu le había dicho que venía de otra dimensión y que tenían planeado ir a ese lugar para la celebración de los 100 días de su sobrino... bebé que según él no tenía más de dos meses para esos momentos y que había conocido solo hace una semana cuando Shen Yuan y Luo Binghe llegaron de visita.

- ¿Has pensado en llevarlo con un psiquiatra? - preguntó de repente.

- Ya lo hace... no ha dejado su medicina y tampoco ha dejado su terapia - suspiro. Ciertamente había comprobado que su novio tomara sus medicamentos adecuadamente en los últimos días... aunque no estaba tan seguro si las alucinaciones se relacionaban con el TPSD, quizás debía preguntar después - no tiene nada que ver con eso.

- Quizás deberías hablar con su... doctor.

- O quizás solo... está nervioso y quiere saber que confió en él aun si me dice una locura como esa.

- Insisto que deberías llamar a su doctor.

Yue Qi giró los ojos y soltó un suspiro. Se recostó de la banca en la que se encontraba mientras terminaba su café. El fin de semana se acercaba y con eso el viaje para conocer tanto al Qi-ge de su novio como para volver a ver a Luo Jin... realmente le parecía muy tierno que su novio estuviera tan encariñado con el hijo de su amigo, Luo Jin era un bebé muy tierno y se había ganado el cariño de Shen Jiu en tiempo record... y también el de Yue Qi.

- Por cierto... ¿qué debería de darle a un bebé de 3 meses? - preguntó volviendo a ver a su amigo.

- Yo que sé... ¿pañales? ¿baberos?

- Quizás puedas acompañarme a buscar algo después de clases - rió un poco - ya que pareces un experto en bebés.

Liu giró los ojos. Por mucho que hubiera cuidado de su hermana cuando ella tenía solo 2 años mientras sus padres trabajaban eso no significaba que supiera algo de bebés... más de una vez confundió la sal con el azúcar mientras preparaba la cena para ambos.Se sorprendía que MingYan no hubiera sido envenenada antes.

- ¿Por qué no vas con Shen Jiu? - preguntó cruzado de brazos.

- Porque fue él quien me delegó el trabajo de escoger un regalo para nuestro sobrino.

- ¿"nuestro"? - se burlo mientras arrojaba la lata de su bebida al basurero más cercano, Yue lo imitó tirando la basura - gracias por no invitarme a la boda.

- Es un niño adorable. Lo secuestraria si Luo Binghe no diera un poco de miedo.

- ¿No es raro que la pareja del amigo de Shen Jiu se llame igual al protagonista de esa tonta novela de mangas cortadas? - Yue miró a su amigo confundido por aquel dato... es decir... él también había leído El Camino del Orgulloso Demonio Inmortal por MingYan pero... - MingYan insistió que viera el live action con ella - respondió la pregunta no hecha.

- Que suerte - se burló.

- Cállate, es tu culpa - bufó - si no te hubieras mudado serías tu quien sufre con sus gritos cada vez que una escena no es exactamente como la imaginó... o como la escribieron en esa tonta novela.

Aunque... ahora que lo recordaba, Yue Qi y Liu MingYan eran el tipo de persona que gritaban a una pantalla en mitad de la película o la serie cuando hay demasiados cambios... Aún tenía cierto trauma con algunas películas que habían visto en el cine y casi los sacan a los tres y de todas formas terminaba siendo arrastrado a aquellas maratones que ambos tenían... quizás era mejor que se hubiera mudado después de todo. Al menos para la salud mental de Qingge había sido lo mejor.