El Sistema de redención del Villano Escoria

4. Formas de sobrevivir en el mundo moderno

¡Por fin llegaba al final el viaje a través del Abismo sin fin! 

Habían pasado más de 3 meses para que Avión terminara ese arco que simplemente parecía infinito, cada capítulo con una nueva batalla, nuevos monstruos y más introspección por parte de Luo Binghe, pensando únicamente en lo que debía estar haciendo su Shizun, lo que debía estar comiendo, si estaba comiendo adecuadamente, como se encontraba, preguntando por la mirada que había visto en su rostro antes de empujarlo. Por favor... ¡en verdad todos esos pensamientos eran desesperantes! Además que no se había vuelto a tratar el viaje de Shen QingQiu y Shang QingHua (que ahora se sabía que era un traidor aliado del demonio que había atacado la conferencia de la Alianza Inmortal). 

Ahora, el muy idiota de Luo Binghe en lugar de dirigirse a Cang Qiong y exigir respuestas al impostor decidió que era buena idea ir al Palacio Hua Huan donde fue recibido con los brazos abiertos por parte del maestro del palacio (ese hombre siempre le pareció un viejo verde si se lo preguntaban), había algo en ese recibimiento que no le agradaba absolutamente nada. No era que se preocupara por la bestia, en lo absoluto, simplemente ese hombre nunca le había agradado, tenía la misma mirada de aquellos hombres a los que veía comprar niñas para que calentaran sus camas. Simplemente grotesco. 

Leía el último capítulo que había descargado mientras bebía un mocca en la cafetería y escuchaba música con sus audífonos. Se había comenzado a acostumbrar a la música de ese mundo... incluso había algunos grupos que comenzaban a gustarle. Algo que en las listas de reproducción llamaban como Rock clásico le era bastante agradable igual la que denominaban jazz, claro, seguía sin acostumbrarse a los gustos del antiguo dueño con el Black metal  o el Metal industrial, eran cosas que no comprendía del todo. También había tomado esa costumbre, la cafetería era un buen ambiente para leer de vez en cuando, era bastante tranquila. 

-  No creía que el rock clásico fuera algo que le gustara al señor Shen - escucho la voz de Yue Qi a su lado mientras dejaba un trozo de pastel de queso que había ordenado antes mientras leía. - mi madre casi me enseñó a hablar inglés con esa música, Sweet child o'Mine fue una de mis favoritas en ese entonces.

Ni siquiera había notado que su pantalla estaba encendida. Miró al barista que estaba a su lado dejando el pastel, no habían muchos clientes ese día y él se había convertido en un cliente frecuente. Yue Qi había adoptado la mala costumbre de Yue QingYuan de acercarse a tratar de mantener una conversación con él de vez en cuando. Debía recordarse frecuentemente que él no era el Yue QingYuan de su mundo

- ¿Por qué en pasado? - pregunto mirando a Yue Qi. Normalmente no solía hacerle preguntas o responderle en general, pero realmente sintió curiosidad por aquello. Casi se arrepintió al ver la sonrisa de Yue Qi. 

- No sé, simplemente cambio de favorita cada cierto tiempo - admitió encogiendose de hombros, sonríendo - pero AC/DC es mi favorito definitivo. ¿Shen tiene alguna favorita? 

- mmm... Hotel California... 

O eso pensaba. Era la primera que había escuchado por error mientras revisaba el teléfono del dueño, se había comenzado a reproducir y la dejo sonar porque le pareció agradable, después fueron otras que no eran tan desagradables. Paso poco para que admitiera que... de hecho le gustaba.

- Eagles - nombró Yue Qi - buena elección.

- Supongo... - respondió volviendo a prestar atención a su computadora, había llegado un nuevo correo que lo hizo suspirar.

- ¿Algún problema? - pregunto Yue Qi, aparentemente curioso.

- Nada que te interese - murmuro - trato de abrir un negocio pero... los papeles que se suponía estaban en orden... ahora parece no ser suficiente - gruño.