𝐃𝐎𝐋𝐋𝐀𝐑 𝐌𝐀𝐍 ━ MICHAEL GRAY

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ᴛᴏ ɴᴏ sᴜʀᴘʀɪsᴇ, ᴠᴀʟᴇɴᴛɪɴᴇ's ᴘᴜʀᴘᴏsᴇ ᴀᴛ ᴛʜᴇ ʜᴏʀsᴇ ᴘᴜʀᴄʜᴀsɪɴɢ ʜᴀᴅ ʙᴇᴇɴ sᴍᴀʟʟᴇʀ ᴛʜᴀɴ sʜᴇ ᴡᴀɴᴛᴇᴅ ɪᴛ ᴛᴏ ʙᴇ.

Tan pronto como entró en el ajetreado edificio, supo por qué su padre la quería allí. Llevaba un bonito vestido como le había pedido su padre, aunque lo consideraba demasiado extravagante para un simple evento como tal, dado que las habitaciones olían a estiércol y heno. Sin embargo, fue sorprendente, cuando salió al balcón principal detrás de su hermano, vio a muchos vestidos como ella, de manera elegante y ostentosa. Era su padre y su compañía los que estaban muy mal vestidos y con poco personal.

No fue hasta que vislumbró a Thomas Shelby desde el otro lado de la habitación, que entendió completamente por qué incluso su padre había ido a tal evento. Él era inútil con los caballos, su hermano también y tampoco tenían motivos para querer, no con Sabini y Solomons corriendo por las pistas.

Parecía que el día estaba lleno de sorpresas, ya que detrás de Tommy, Michael estaba de pie, con las manos hundidas en los bolsillos de un elegante traje que lo hacía parecer mucho mayor que sus diecisiete años. Por otra parte, estaba segura de que ella también parecía mucho mayor que su edad. Valentine no esperaba verlo, considerando que se había enterado de que él solo había estado en Birmingham durante la mayor parte de tres meses, la mayoría de los cuales lo conocía muy íntimamente. Valentine se había quedado de pie junto a Lucas, pegados a la barandilla que daba al ruedo en el que mostraban los caballos. Su padre había desaparecido junto con sus cómplices.

Tommy miraba fijamente a un caballo blanco que cruzaba suavemente las puertas y entraba en la plaza. Sabía lo que quería.

—No entiendo por qué papá está aquí.

Valentine le dijo a su hermano, sus ojos siguiendo al grupo de enfrente.

—Odia los caballos.

—Ya sabes cómo es. Hace cualquier maldita cosa para mostrar a sus enemigos que no está envejeciendo.

Valentine podía ver una pizca de amargura en su mandíbula apretada y sus ojos brillantes, pero se había desvanecido en segundos.

Sin embargo, Lucas tenía razón.

Se hizo la primera apuesta y Valentine sonrió para sí misma y le dio un codazo a su hermano para que prestara atención.

Una mujer mayor a lo largo de la barandilla apostó a continuación, con los ojos fijos en los chicos de Shelby también. La acción fue de un lado a otro, con Valentine aumentando sus propias apuestas a pesar de los golpes de advertencia a su lado por parte de Lucas.

Ella había llamado la atención de Michael, sonriendo con aire de suficiencia mientras sus ojos se abrían y la boca se mantenía ligeramente boquiabierta. Ella asintió sutilmente, reconociendo su mirada con una sonrisa y una ceja fina y arqueada.

—¡2500!

El hombre del caballo gritó y Thomas Shelby levantó la mano. Ninguna de las mujeres fue más lejos, Tommy Shelby recibió el grito de ganar con un suspiro mientras se inclinaba sobre la barandilla. Valentine le dedicó a Michael una última mirada mientras se volvía hacia su familia, bajaban las escaleras y salían del edificio. Se dirigió por su cuenta hacia su padre, que ahora estaba ubicado en el exterior de la plaza dónde se habían mostrado los caballos. Sus ojos se agrandaron, notando que el grupo de Peaky Boys cruzaba el mismo espacio que su padre miraba, Arthur Shelby arrogantemente liderando el camino.

Un hombre estaba sentado, el amigo de su padre, con la mano en el bolsillo. Michael se quedó atrás del grupo, agarrando un juego de llaves mientras Thomas le gritaba que condujera. La pandilla pasó caminando, deteniéndose cuando su nombre fue llamado con firmeza.

—Thomas Shelby.

No se permitió una reacción justa cuando el hombre en el medio de la plaza corrió hacia adelante, su arma ahora completamente extendida. Con horror, Valentine vio el caos estallar en gritos, estremeciéndose cuando un disparo sonó en sus oídos. Arthur había atacado al hombre, moviendo su brazo hacia atrás con fuerza, enviando la bala al techo con una punzada. Gritos de ira inundaron sus oídos mientras corría para evitar que su hermano sacara su propia pistola y entrara a la luz de la plaza, pero su padre la retiró, quien mantuvo un fuerte agarre en su brazo. Gritó cuando John Shelby sacó su arma, apuntándola a Lucas mientras gritaba agresivamente por su hermano.

La bala pareció moverse en cámara lenta mientras atravesaba el aire, pasando por su hombro mientras ella se soltaba del agarre de su padre y corría para sacar a Lucas de la mira de las armas. Otro disparo salió de la pistola de John y otra bala se clavó profundamente en otro de los hombres de confianza de su padre.

Lucas no se molestó en volver a luchar contra los Peaky Blinders y en su lugar eligió alejar a su hermana de la escena, tratando desesperadamente de bloquear su vista del violento estallido de Arthur Shelby.

Michael se apartó de la pelea en estado de shock, sus manos agarraron las llaves con fuerza mientras se volvía para ver a Valentine, quien negó con la cabeza antes de volverse.

Corrió junto a Lucas mientras él la empujaba hacia adelante, haciendo que sus tobillos se engancharan entre sí. Tropezando hacia adelante, ella solo llegó al auto que la esperaba y se subió a la parte de atrás, su hermano poco detrás de ella y su padre enfrentándose para agarrar el volante mientras conducía él mismo. Un gruñido brusco salió de sus labios, en violenta decepción por su fracaso.

Valentine se recostó con un suspiro. Le temblaron las manos por el repentino pánico en el que se había sentido en cuestión de minutos. No le habían dicho nada de eso, tal vez porque no confiaban en ella o tal vez porque no sentían que ella alguna vez necesitaría saberlo.

Ahora sabía, más que nunca, que una cosa era constante y verdadera:

Tendría que morir e ir a la siguiente vida antes de poder estar con Michael Gray.