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—¡Ahhg!—

—oh, salió volando— los gemelos dragón miraron al azabache que estaba haciendo una pelea unilateral. Casi la mayor parte de su estilo de pelea se basa en llaves de Judo pero, algunos gritos, garantiza huesos rotos.

—¡Kiyomasa, enfrentame perro!—

—¿con esa boquita, besa a su mamá?— al ver que no había peligro emma se acerco, tambien observando a un maestro de la pelea.—Esta la nivel de Mikey— murmuró sorprendida.

—¡¡¡ahg!!!— miraron al azabache observando que en su mano se había enterrado un cuchillo.

—¡Takemichi!— gritaron a coro observando que retrocedia adolorido.

—¡A tu izquierda!— observaron a Chifuyu saltar dándole una patada voladora a kiyomasa.—¡Mierda, ¿por qué siempre te metes en problemas cuando no te veo?!—

—¡Callate traidor!— se arrancó el cuchillo tirandolo a un lado, tomando de la camisa a Chifuyu.

—¡Putamadre, ¿Quieres pelea?!—tambien tomo de la camisa al azabache.—¡parado y sin polo!—

—el enemigo está al frente de ellos— murmuró la rubia lima, observando como ambos hermanos se retan a terminar en golpes.—¡cuidado!— Draken y Mitsuya iban a detener a kiyomasa y su golpe pero, ambos chicos de ojos claros, tomaron un brazo del pelinegro, le hicieron la misma llave de judo golpeandolo tan fuerte contra el suelo que terminó inconciente.

—¡Tu quédate en el suelo basura, esto es problema de hermanos!— se posicionaron para comenzar a atacarse hasta que el sonido de una moto se hizo presente.

—¡Mikey!— se reunieron alrededor del cenizo que acaba de llegar con una entrada brillante.

—siempre me pregunte, ¿Cómo no se rompe la pierna en ese derrape?— la lluvia estaba haciendo de la suya, dejando que la buena formar de vestir de ambos matsunos, se arruinara.

—La ley no se aplica para los pandilleros guapos—argumento peinandose el cabello para atrás.—ya pero, enserio Traidor, ¿Por qué nunca estás cuando te necesito?—indago, resignado a no pelear con su hermanito.

—¡Tenemos teléfonos Micchy!—

—¡No agarras ninguna de mis putas llamadas!—

—¡¿Cómo que no?!— tomo su teléfono cubriéndolo de la lluvia para buscar en su registro de llamadas.—ª, si me habías llamado, mi error— contó el número de llamadas perdidas notando que lo estuvo llamado desde hace un par de horas.

—¡oye takemichi!—Ambos miraron a Draken.—¡Te llevaré al hospital!—

—¡¿Por?!—

—¡¿Cómo que "por"? Tu mano!— miro su mano notando el desagradable hueco que le dejo el ser atravesado.

—Oh mierda— muro Chifuyu mirando la mano del azabache sorprendido, miro al dueño y a su mano repetidamente sin entender como no está llorando del dolor.

—oh si, la adrenalina, con razón se sentía tanto frío— se acerco hasta ellos, sus miradas estaban encima de él por un lado, sin creer que se halla arrancado el cuchillo y que ahora este de lo más tranquilo por otro, sorprendidos de saber que estaba al nivel de pelea de Mikey.

—Lleva a mi hermana a casa Kenchin, yo llevaré a Micchy al hospital— Draken lo pensó pero, al final accedió.—Ven súbete Micchy— ordenó con una sonrisa pero, se nota que no estaba bien, takemichi acato, despidiéndose de ellos antes que la moto saliera disparada en dirección al lugar de salud, más cercano.

—Chifuyu—

—¿Si?—

—¿Dónde está Baji?—

—Con shinichiro y Tora—

••••

—Mikey ¿Estas bien?—

—¿Terminaron de curarte?—Takemichi ya conoce las técnicas de evasión del cenizo, para no enfrentar problemas emocionales.—¿Que?— indago amenazante, al sentirse observando por los ojos azules bonitos.

—No es bueno callarse las cosas—

—no suenes como el idiota de shinichiro— el ojiazul sigue sin acostumbrarse a lo invasivo que era Mikey, pero, lo abrazo de vuelta, una de sus manos termino acariciando el cabello largo claro.—No me trates como un niño— gruñó. Mikey se sintió a salvó en los brazos de azabache, aunque las caricias en su cabeza solo lo hacen sentir como un niño y lo odia.

—No puedo evitarlo, me sale solo—

—Eres un año menor que yo, no suenes como un adulto—

(...)

Le hicieron puntadas, le dieron descanso médico, 3 días en casa recibiendo las quejas de Chifuyu, se quiere golpear contra la mesa.

Cómo no toco ningún nervio el uso de su mano estaba 10/10, así que se puso armar otro rompecabezas de 500 piezas, esta ves tenía la representación de algún dojo o de un Templó, no tiene ni idea.

—¡Michhy saldré con Baji-san, Me voy!—

—No me puede importar menos—coturreo molesto.—Antes me parecias cool "Baji-san" ahora es eres un pendejo "Baji-san"— un pequeño berrinche, por qué su compañero cada día más se aleja de él.

—¿Esos no son celos de hermanos?—

—¡santo dios del tiempo! Mikey— volteó a su balcón, se apresuro a tomar entre sus brazos al más bajo, para alejarlo del peligro.—Tenemos una puerta y un timbre, por si preguntas— riño.

—Era molesto, así que mejor entre por el balcón— El cenizo aprovecho para cerrar sus piernas sobre la cadera contraria afianzando su agarre de koala.—¿como está tu mano?— indago mirándolo a los ojos, recibiendo la misma atención del azabache.

—muy bien, te manda saludos— bromeo mientras se adentro, con el contrario sobre él. El gruñido que le dió el ojionix, hizo que se riera bajo.—me beneficie con 3 días sin ir a clases—Se sentó sobre su cama, que era el lugar más cómodo que tenía en su habitación.—viniste de visita ¿Dónde está Draken?— indago ya que, este debería de estar justo al lado del ojionix.

—En la puerta—

—debiste avisarme, bajaré a abrirle la puerta—

—No—

—No seas infantil, suéltame—

—Si me acompañas a las aguas termales—

—Te acompañaré, ahora solo déjame abrirle la puerta a Draken— pudo ver su expresión gatuna, no le augura nada bueno esa salida al Onsen.

Reescrito [Maitake]Where stories live. Discover now