17 - Hamada Asahi

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¿Qué es lo mas difícil que has hecho en la vida?

¿Cuál fue aquella experiencia de vida que te marcó para siempre?

Dos preguntas con una misma respuesta atormentaban la mente de Asahi mientras hacía su rutina mañanera. En los últimos dos días la misma idea estaba rondando su atareada cabecita.

Con Imagine Dragons sonando en sus auriculares a todo volumen, sus pies aplastaban el césped mientras dejaba salir todas sus preocupaciones y el estrés. Quizás él no veía como algo justo, que precisamente, su mundo entero se viera afectado por alguien del pasado que prefería olvidar.

Aunque cabía la posibilidad de que el solito se estuviese ahogando en un vaso de agua.

Sí, Takata Mashiho había sido el amor de su vida. No iba a mentir diciendo que, no se había enamorado del niño como pendejo, y que había sufrido como condenado cuando se fue sin despedirse.

Pero ahora formaba parte de su pasado, y estaba decidido mantenerlo ahí.

Sin embargo, se preguntaba si habría cambiado en algo o habría crecido. O si tan siquiera lo recordaba, cosa que dudaba sucediera. Tenía que dejar de pensar en cosas que no venían al caso y concentrarte en algo nuevo.

Dio una última vuelta e hizo su camino de vuelta a la mansión. No sé detuvo su paso hasta llegar a su habitación y meterse directo a la ducha.

El agua caliente relajó sus músculos y despejó sus pensamientos. Necesitaba encontrar otra cosa en que pensar. Algo que no fuera precisamente él. 

Él solamente había llegado a Seúl, no significaba que debía encontrárselo en cualquier parte. Solamente segaría con su vida como si su llegada no le hubiese afectado en lo mas mínimo.

Salió con una toalla enroscada en su cintura, colocándose su conjunto de jeans negros, camiseta cuello V blanca con una sudadera azul y las botas militar. Su reflejo en el espejo, era admirable y se veía increíble. Cartera y celular en los bolsillos, y cuando estaba a punto de abrir la puerta, Hyunsuk hizo acto de presencia.

- Tenemos problemas – justo esas palabras salieran de su boca y estuvo a punto de darse un disparo. Se preguntó si en algún momento no habrían problemas.

- ¿Qué pasó ahora? – se cruzó de brazos y miró a Hyunsuk- ¿Qué tan grave es?

- Me acaba de llegar un mensaje – sacó su celular releyéndolo nuevamente – Parece que un bocazas vio a Kim Doyoung salir del Diamond

- Y, ¿ Por qué eso es un problema?

- Porque deducen que trabaja ahí, y si de casualidad alguien más se entera de esto...

- Ya, no sigas

- No quiero ir solo, Yoshi está trabajando hasta mañana en la investigación y pues...

- Estamos perdiendo el tiempo, es mejor salir terminar esto rápidamente.

Ambos chicos salieron con una sola dirección: el Diamond Edge

Para ambos, era sencillo trabajar juntos, y quizás pedirse consejos. Sin embargo, algo dentro de Asahi se removió, cuando nuevamente sin su consentimiento una imagen del jovenzuelo travieso se coló en su mente.

- Hey – un chasquido de dedos en su cara le hizo prestar nuevamente atención – ¿Dónde andabas?

- En un lugar al que no quiero volver – suspiró suavemente notando como Hyunsuk movía su pie hacia arriba y abajo – Suéltalo

- Tiene que ver con...?- la pregunta quedó colgada en el aire, mientras el semáforo cambiaba a rojo y la expresión de Hyunsuk cambiaba por una más triste - Porque desde que supiste que había vuelto a la ciudad, te has encerrado en ti mismo y no has dicho ni una palabra al respecto.

Asahi solamente guardó silencio, señalando al aparato que ya les permitía continuar.

- Asahi, sé que debe ser muy difícil para ti asumir que ya volvió, lo de ustedes fue algo realmente especial y me atrevo a decir que algo intenso pero..- Hyunsuk detuvo el auto en el estacionamiento - ¿Crees realmente que a él también no le dolió irse dejándote solamente con una rosa marchita y una nota?

- Es jodidamente difícil, Ángel - no quería hablar de ello

- Lo sé, hermano, lo sé

Como era habitual, el Diamond Edge estaba hasta el tope de clientes. Localizaron a Yedam en la barra a punto de beber un trago, mientras, Doyoung limpiaba un vaso y Sehun caminaba acompañado de, nada más y nada menos que So Junghwan.

Doyoung alzó la vista, y al ver a Hyunsuk, el vaso se deslizó de sus manos. El sonido de vidrio roto llamó la atención de Junghwan, cuya mirada chocó con la de Asahi. La sorpresa invadió la mirada de uno y la rabia del otro.

Asahi estaba viendo rojo, y si no hubiese sido porque no traía su arma y fue empujado por Hyunsuk hacia el lado contrario, juraría que el imbécil detrás de la partida de la familia entera del chico que amaba, estaría con una bala directo al corazón, y porque no, en la frente también.

Caminó hasta la oficina de Sehun al lado de Hyunsuk, no escuchando realmente lo que su amigo decía. Pensaría en el resto después, pero ahora debía enfocarse en su misión.

Hablar con Doyoung y explicarle su nueva situación había sido relativamente fácil. Al parecer, entendió la gravedad del asunto y se quedó más que estupefacto y callado al saber que alguien podría querer matarle o secuestrarle.

El chico temblaba al ver directamente a Hyunsuk, y Asahi quería partirse de risa.

A veces, se temían a las personas correctas; pero habían otras, en las que terminabas metiéndote con la persona equivocada.


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Aquí pondré que Mashiho es menor que Asahi

CLOSERTahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon