Capítulo 6

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Hande comenzó a despertarse poco a poco al notar como la luz entraba por la ventana, sonrío al recordar el tacto de las manos de su gato alrededor de su cintura pero al no notarlas ahora, se giró extrañada. Él no estaba a su lado, la cama estaba fría y apenas se podía percibir su aroma. Comenzó a buscarlo con la mirada pero no obtuvo resultado, sus ojos se posaron en un papel que había sobre la almohada y lo tomó entre sus manos para comenzar a leerlo. Mientras lo hacía, sus ojos se llenaban de lágrimas sin poder evitarlo. Sentía que su corazón se rompía en mil pedazos con cada palabra escrita. Kerem, su gato, su persona especial, se había ido. Había dejado esta ciudad y ella no pudo hacer nada.

Con las manos temblorosas, dejó la carta en la cama que estaba manchada por algunas lágrimas que había caído sobre ella. Su cabeza estaba tratando de procesar toda la información y su alma dolía con fuerza, sentía que una parte de ella le faltaba. Salió de la cama aún con los miles de pensamientos que abrumanban su mente y se vistió con lo primero que vio en su armario. No podía dejar de llorar y estar en esa habitación aún le hacía sentirse peor. Tomó la carta de nuevo y la guardó en el cajón de su mesita, lugar donde ella guardaba todas las cosas especiales e importantes de su vida. Sin más, salió de casa con el pecho oprimido y dejó que sus pies la llevaran sin rumbo fijo.

Después de caminar tantas horas seguidas, llegó a parar a la playa, lugar que amaba desde que era pequeña. Había algo allí que hacía que sintiera paz pero estaba vez era diferente, tenía tanto miedo de perderlo, de no volver a verlo, que no podía dejar su mente en blanco por un segundo. De nuevo sus pies comenzaron a moverse solos sin que ella pudiera controlarlos llegando a meterse en el mar poco a poco. En la playa había una bandera que indicaba a los bañistas que no debían bañarse con ese oleaje pero no le prestó atención al igual que la marea que estaba bastante agitada. Miles de momentos importantes pasaban frente a sus ojos mientras ella seguía adentrándose al mar. Estaba en trance y no había nada que la pudiera sacar de eso.

Flashback

Eran las tres de la mañana y aún seguían pegados a la tele mientras los demás dormían, llevaban varias horas viendo las películas de la saga "los juegos del hambre" ya que era la favorita de Hande. El sonido de la tele era lo único que se escuchaba en el salón excepto en varias ocasiones que Kerem hacía algún que otro comentario gracioso.

-Oye Kerem.—rompió el silencio.

-¿Si?—respondió.

-¿A que Peeta es muy guapo?—lo miró mientras sonreía.

-¿Qué dices?—frunció el ceño.—Para mi que la chica es mucho más guapa.—la contradijo.

-Aparte de eso, él tiene unos sentimientos muy hermosos.—volvió a mirar la película.

-¿Te gusta?—la miró fijamente.

-No.—respondió.—Los rubios no son mi tipo.—dejó entender.

-¿Y cuáles son tu tipo? Si se puede saber, señoría Erçel?—la miró con una sonrisa ladeada.

-No te lo voy a decir, es secreto.—respondió.

-¡Venga ya Hande! Siempre me dejas con la intriga.—se hizo el ofendido.—Nunca me cuentas nada, ya no reconozco a mi mejor amiga.—se cruzó de brazos.

-¿De verdad quieres saberlo?—volvió a mirarlo.

-Obvio.—respondió impaciente.

-Me gustan los morenos.—mintió.

-Que bueno.—intentó parecer que no le molestó.—Pues a mi me gustan las rubias.—comentó para tantearla.

Lucharé por ti 》HankerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora