capítulo. 7

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                     Noviembre, 1962.

Acababa de tomar una decisión que lo llevarían a una oscuridad eterna, pero a una felicidad garantizada, con un chico de hebras rubias, como el oro, unos ojos que brillan como el sol, con piernas delgadas y largas, con la sonrisa más peculiar que haya visto; porque si, podría ser una simple sonrisa con textura, pero esa simple sonrisa provenía de Kim Taehyung.

Las gotas cristalinas caían desde la parte superior de su frente, comenzando a bajar por todo su rostro. Se respiración inestable, sus pupilas dilatadas y su corazón golpeando su pecho sin control, el hombre de cabellos negros permanecía quieto, con los ojos cerrados y sus largas pestañas se hacían notar.

Sus respiraciónes se estabilizaban de poco a poco, cada minuto parecía una eternidad, pero era más tiempo estar juntos.

El general lo sostenía de las piernas, quien las tenía enredadas en su cintura con fuerza.

"General..." le llamo, y este sólo le hecho un sonido, haciéndole saber que lo escuchaba "¿Qué... estamos haciendo...?" Pregunto sin aliento aun.

"No lo se..." claro que sabía, pero tenía la mente bloqueada por las recientes acciones que hizo -hicieron- "todo estará bien" aclaró, y abrió los ojos, haciendo contacto con el menor.

"E-En estos momentos... te ves más..." se quedó pasmado con lo que iba a expresar, cuando miro al chico este estaba sonrojado y cohibido, pequeño. "..bonito" terminó.

Taehyung por el contrario estaba sorprendido, y sintió como el calor subió a sus mejillas y orejas, era un tomate, pero uno más grande.

"Que di-ices" desvío la mirada. "Eres un... tonto" lo último lo dijo tan bajo, que aun así fue audible para el mayor, quien sonrió ante ello.

"¿Soy tonto por decir lo bonito que eres?"

"Si. Eres... un gran tonto por decir e-eso" lo miro, y se sintió tan diminuto ante la mirada del hombre "¿Por qué m-me miras... así?"

"Te quejas mucho de mis acciones" le reclamó "debiste reclamarme cuando te bese"

El menor fruncio el ceño y abrió la boca para protestar, pero fue interrumpido cuando sintió los labios rosados del mayor en los suyos, impidiendo que hablará o se quejará.

"Debes... de dejar de h-hacer eso..." expresó entre el beso.

"No puedo" y no podía, puesto que los labios del chico eran lo más cercano al cielo.

"Ju-ungkook... no puedes estar besandome..."

Reaccionó muy tarde de eso, ya lo había besado, y dos veces, ya lo había tocado, ya lo había marcado en las clavículas y en el pecho, ya lo llamo como suyo, ya le dijo que se le hacia bonito, ya le había hecho dudar de muchas cosas en 2 semanas. ¿Y ahora le dice que no lo puede besar cuando el mismo chico se lo pidió? ¿Acaso no se acuerda?

Jungkook se despegó, y lo miro confundido. "¿Qué has dicho?" Estaba un poco molesto "¿Qué no te bese...? Dios, ¿Qué te sucede?" Y lo dejo caer, escuchando como los zapatos golpeaban el piso.

Taehyung no dijo nada, se quedó quieto en la esquina de la cocina, con las mejillas sonrojadas y la mirada perdida en algún punto de la cocina. No quería mirar al hombre y menos si este estaba molesto.

"No te e-enojes, ¿Si?" Le dijo suave. "L-Lo siento... si quiero que me... beses, sólo que, estamos en la ca-afeteria" le aclaró, aun en la esquina de la habitación.

El general estaba molesto, sólo un poco, igual no podía olvidarse de lo que el chico le había dicho minutos atrás.

"¿Te importa que nos vean?" Espetó, aun sin mirarlo "a mi eso no me importa... porque te estaré besando" volteo a mirarlo, con los ojos brillando y tragando en seco, no sabía lo que decía, ¿Era algo importante? Si, pero, al final se trataba de su felicidad.

 CUANDO ESTAS SONRIENDO  // kookvDonde viven las historias. Descúbrelo ahora