Dark Rooms

𝟹|𝚂𝚑𝚊𝚗𝚔𝚜

Shanks se quedó dónde estaba, sentado en la parte delantera de su barco. Estaba rodeado por su propia tripulación, aunque, por una vez, ninguno de ellos sonrió. Su mirada era dura mientras miraba a las 8 personas frente a él, su viejo sombrero en las manos de un hombre envuelto en verde.

Estos eran su tripulación.

No necesitaba que dijeran nada.

Rompiendo el silencio, Shanks miró hacia el cielo, un gris apagado muy por encima de hablar. "Era pequeño, ya sabes. No sabía nadar, no podía atinar un golpe, no podía hacer nada más que hablar. Sin embargo, siempre me había recordado a Roger..."

Zoro apretó el sombrero con más fuerza. Honestamente, ninguno de ellos quería darle el sombrero de Luffy al Emperador. Era de Luffy, su tesoro, lo único que quedaba de él. Los piratas de Sombrero de Paja no querían entregar el sombrero de paja de su capitán

Zoro especialmente no quería ser el que lo regalara. Sin embargo, como primer oficial, era su trabajo cumplir promesa de Luffy. Como su primer oficial, y como su amigo.

Shanks no era tonto, incluso si no hubiera considerado la idea de que la tripulación de sombrero de paja estuviera apegado a su sombrero, él podía verlo claramente. Ellos no querían darle el sombrero de paja.

Y Shanks no quería tenerlo.

Así no.

Se suponía que este sería un gran momento, donde vería por sí mismo cómo ese niño inútil creció para convertirse en rey. Quería que este día fuera así, solo por un momento. Un rey por un día. Eso es todo lo que pidió.

Shanks parecía sorprendentemente tranquilo. No era alguien que compartiera su dolor con extraños. Sin embargo, mirando hacia atrás... había sido un desastre. El día que murió Luffy.

Shanks estaba allí para poner fin a una guerra. Sin embargo, a su llegada, encontró a un niño tendido en el duro y frío suelo. Shanks había sido un pirata durante muchos años, pero lo sacudió hasta la médula comparar a ese niño alegre y animado que una vez conoció, con ese hombre muerto. Se había sentido tan frío como Luffy... se sentía tan frío como un muerto.

Se había encerrado en su propia habitación oscura durante muchos días.

"Le dije que se convirtiera en un gran pirata. Lo puse en este camino, supongo que podrían culparme de mucho de esto. Sabía que había una posibilidad de que pudiera morir, pero..." Resopló una risa sin gracia "... Bueno, era Luffy. Realmente no podía imaginarme eso"

Se llevó la botella de alcohol a los labios y bebió casi la mitad de la botella. Últimamente había apestado a esas cosas. Estaba enojado y molesto.

Ese ya no era su sombrero. Ese era un sombrero de hombre muerto, y eso no era algo que quisiera llevar sobre su cabeza con el orgullo de un pirata. Eso era simplemente... triste.

"Guárdalo. Los piratas Sombrero de Paja no pueden tener un sombrero de paja en su jolly roger sin ningún significado. Además, él creció con ese sombrero. Estoy seguro de que se ha convertido en algo importante para él, ningún pirata regala su tesoro"

La voz de Zoro cortó la atmósfera, fuerte... pero hiriente. "Está muerto. Dejó su tesoro atrás, junto con su tripulación. Como de costumbre... nos dejó atrás. Por lo general, estábamos allí para alcanzarlo y sacarlo de cualquier problema en el que se haya metido..."

El rubio detrás de él lo cortó "ZOR-"

"Estoy seguro de que murió sin remordimientos". La voz de Shanks era silenciosa, pero se escuchó.

La tripulación pareció sorprendida por un momento, no lo habían considerado. Tal vez este tipo de final hubiera sido mejor para Luffy, pudo proteger a alguien que le importaba. Eso no era algo de lo que Luffy se hubiera arrepentido. En cierto modo... este pensamiento los entristeció. La idea de que podrían haber sido obstáculos para el sueño de Luffy, en lugar de seguidores, era algo que nunca quisieron considerar. Se entrenaron para volverse más fuertes. Sin embargo, ni siquiera estuvieron allí. Murió un capitán sin su tripulación.

Un reno comenzó a llorar en silencio, sus lágrimas eran extrañamente humanas.

Shanks se levantó y se acercó al espadachín, quitándole lentamente el sombrero de las manos. "Está decidido entonces. Hay una promesa que todavía tengo que cumplir. Luffy prometió que solo me devolvería este sombrero una vez que se convirtiera en el Rey de los Piratas. No se ha convertido en el Rey de los Piratas, así que no puede devolverme este sombrero. Me aseguraré de dárselo. Ese hombre debería estar con Luffy ahora, de camino a convertir a su nieto en una tumba. En lugar de flores, pondremos esto allí".

Zoro soltó el tesoro de su capitán. Zoro soltó el sombrero de Luffy.

Zoro... lo dejó ir.