La Mate de Hades. [+16]

27: Esto debe comenzar.

Ella debía alejarse, sí, lo sabía.

Ónix había conocido a la mujer de Percy, había sido vista por todos ahí y no sería la segunda, no se tildaria de ramera.

Sky tenía razón, después de todo ella debía salir adelante y convertirse en lo que siempre debió ser, una alfa, una líder.

Sus ojos siguieron los movimientos de las personas que peleaban frente a ella, era un viernes por la mañana y se había despertado temprano para los entrenamientos, habían llegado nuevas personas y habían sido tan bien recibidas como ella.

La fragancia de Sky hizo que sonriera ligeramente y que su cuerpo se volteara a recibirlo. —Buenos días alas de angel —Él sonrió leve.

—Soy una hada, Ónix. —Él miró sus labios seguido de sus ojos, ¿Que tan rápido se enamoraban los hombres? O más bien, ¿Cómo es posible que les guste todo lo que se mueva?

—Como digas. —Los ojos en blanco de ella hicieron que los brazos descubiertos de él se doblaran en su pecho.

—Hoy me verás en acción.

—¿Cómo? —Preguntó dudosa. Ónix aún no entendía cosas tan simples como ella, y era sorprendente, porque estaba frente a personas peleando y no lograba entender la directa.

—Pelearé. —La declaración hizo que ella sonriera.

—Vaya, ¿Contra quién? —Sonrió eufórica, por fin podría ver el elemento de Sky, que para ella seguía siendo una incógnita.

—Percy. —La sonrisa se esfumó de sus labios rápidamente —¡Hey! No es como si me fuesen a dar una golpiza.

—No, no es eso, es solo que... —Ella pasó su mano nerviosa por su pelo.
—¿Un hada y un hombre lobo? Eso es un tanto injusto.

—¿Para él o para mí, Ónix? —La pregunta tenía doble intensión.

—No pongas filtros a tus preguntas, Sky. Dilas claras.

—¿Te estás preocupando por él o por mi? Aparte, ¿Crees que soy suficientemente débil para que él me destruya o crees que me vengare en la arena por él tener toda tu atención?

El corazón de la Omega latió con fuerza, aquellas incógnitas estaban en su cabeza, pero no tenía respuesta.

—No lo sé Sky, solo...

—Si pensaste en la segunda, no te equivocas.

Las alas de Ky se desplegaron, a pesar de que era un corto camino hacia el centro le gustaba presumir de sus alas.

—No pierdes el tiempo, Ónix. —La voz de Rea hizo que volteara y que su cuerpo se pusiera en defensiva.

—Buenos días para ti también, Rea.

—Gracias, pero en serio no deseaba que los tuyos fueran buenos ¿Sabes? Eres una perra.

—No cariño, no trates de confundirme con tu descendencia. —Los ojos de Ónix fueron una vez más dónde estaba Sky, vió llegar a Percy, todos empezaron aplaudir eufóricos por el enfrentamiento.

—Un día las que estaremos ahí seremos tú y yo, para ese entonces seguirás siendo una simple Omega.

En sus palabras había repudio, odio y rencor. Las había escupido como si fuesen la peor maldición.

El cuerpo de Ónix le dió el frente, sus ojos vieron hacía arriba.

—No importa cuán grande te veas, un día tú estarás de rodillas ante mi, suplicando por tu vida, como la perra arrastrada que eres.

—Cuidado con lo que dices. —El cuerpo de Rea dió un paso adelante dispuesto a dañar a Ónix, pero el sonido fuerte de un arma hizo que su atención fuese a la arena.

Ellos iban a pelear.

El primero en atacar fue Sky, sus alas se desplegaron con fuerza haciendo que la vista de Percy se nublara causado por la arena.

Los ojos de Sky se colorearon por un fuerte verde en ellos, pero solo quien estaba frente a él lo veía.

—¿Usarás tu poder tan rápido? —Se burló Percy —¿Tan desesperado estás por su atención? ¿Porque piense que eres mejor que yo? Vamos Sky, no seas así...

La mano derecha de Sky lanzó con furia un ventisca de aire hacia Percy, la cuál hizo que su cuerpo dejara su estabilidad y fuera hacia atrás cayendo al suelo.

—¿Qué? ¿Quieres que te haga daño para que ella vaya a curar tus heridas? ¿O para que tu mujer Atenea lo haga? —Las personas solo veían un enfrentamiento de dos personas, pero había mucho más de por medio.

—Oh... Me pregunto, ¿Te besa tan bien como lo hace conmigo?

—Pregunto lo mismo o después de tanto tiempo, ¿Olvidaste la sensación húmeda que dejan sus labios?

El cuerpo de Percy se transformó en un gran lobo marrón, los ojos de Ónix se abrieron al ver cómo una flama violeta adornó su cuerpo lobuno.

—Que carajos...  —Nadie tenía permitido usar su capacidad auditiva, pero el líder de seguro que sí, y por dentro sonrió al ver que ella se había sorprendido, sí, quería la atención de Ónix, a como diera lugar.

—¿No lo sabías? —Habló Rea. —El hombre que te coges es un híbrido de hombre lobo con brujo.

La mirada sorprendida de ella fue hasta Rea.

—Lo va matar —Dijo sorprendida.

—Vaya, ¿Te llamo colón? Has descubierto algo por fin. —El cuerpo de Ónix se movió por si solo.

Estaba loca, si hace lo que creo que hará. Aquellos fueron los pensamientos de Rea, la chica cerró sus ojos fuertemente, ¿Por qué aquella chica era tan impulsiva?

Las personas que evitaban la entrada hasta la arena la tomaron de la cintura, pudo ver cómo Percy era envuelto en ramas, pero él fue escurridizo, a pesar de estar en su forma lobuna su cuerpo era ágil, Sky se elevó a lo más alto al ver con la velocidad que Percy corría hacia él.

Sky se elevó a los cielos, pero el lobo había saltado junto con él haciéndolo caer al suelo, una de sus alas fue agarrada fuertemente entre la boca de aquel lobo haciéndolo enojar. El cuerpo de Sky estalló en una radiante luz blanca, los cielos se nublaron y rayos del cielo fueron directo al lobo.

Ónix se escabulló entre los guardias corriendo con rapidez, el cuerpo de ella fue escudo para Percy, recibiendo en su lugar los rayos y con ello poder.