Susurros Al Oído [+18] En Pausa

16.

Jared

Dos cosas que destacar del almuerzo de negocios, Helen vomito el almuerzo y ensució mis zapatos, y Alaska me ignoró todo el tiempo.

¿Decepcionado? Sí, pero me dije que olvidaría todo y yo actúe como si nada sucedió.

¿Lamento lo de mis zapatos? Sí, porque son mis zapatos favoritos y ahora están llenos de vómito, cortesía de Helen y sus síntomas de embarazo.

Sin embargo también puedo destacar dos cosas que sucedieron después del almuerzo.

Recibí una llamada se una furiosa América, reclamándome por algo que le hice a su hermana. ¿Cuál fue mi reacción? Enojarme yo también y decirle que no le hice nada a Alaska y que no tenía porque gritarme.

Colgué la llamada y luego ignore los números mensajes que me llegaron de su parte, aún estoy enojado. Yo no le hice nada a su hermana y sobre todas la cosas, lo que haya pasado entre ella y yo no es de su incumbencia. Eso, si en realidad sucedió algo.

Y por último pero no menos importante, porque es muy importante, encontrar a mi madre besuqueandose con un hombre en la puerta de su apartamento, no es algo lindo. Mucho menos si fue un beso muy pasional y no apto para todo público.

Pero ahora estoy aquí sentido frente a mi madre y quien supongo es Mark, su futuro esposo.

-No esperaba verte.

-Y yo no esperaba encontrarte en eso mamá.

La mirada que me lanza me debería hacer temer, pero está vez es todo lo contrario. Ahorita lo único que quiero es conocer este hombre.

-¿Mark, cierto? -me recuesto en el sillón y me cruzo de brazos.

-Sí y tú eres Jared, tu madre me ha hablado mucho de ti. Me alegra conocerte.

-Pues a mí no.

De acuerdo, tal vez estoy siendo algo grosero pero no me interesa. No lo conozco y no sé si es alguien que sea digno de mi madre.

-¡Jared!

Mamá se exalta por mi grosería; sin embargo, la ignoro.

Estoy por decir algo, pero me veo interrumpido cuando la puerta se abre.

Salvado por la campana, Mark.

Ayelén se adentra y frunce el ceño al vernos, pero su rostro se relaja al ver a Mark y salta muy feliz a abrazar a ese hombre.

¡Lo abraza! ¡Delante de mí!

Estoy seguro que parezco loco con mis ojos abiertos de par en par, pero es que estoy indignado.

Mamá me mira de reojo algo incómoda y con su mirada me suplica que sea amable. Pero no me puede pedir eso cundo fui el último en enterarme.

Por la forma en que mi hermana y Mark conversan, me hace saber que ya se conocían. Eso me enoja y lastima porque fui el último en enterarse, como cuando mamá descubrió que Lexi es nuestra hermana.

Me siento ahogado aquí, por lo que me levanto y tomo mis cosas para marcharme. Quiero venir a ver a mi madre para que me acosejara con respecto a Alaska, pero no me siento cómodo.

Llámenme exagerado, pero siempre hemos Sido nosotros tres contra el mundo, por lo menos hasta que Alexia llegó y es estuvo bien. Pero ahora el hecho de que mamá se vaya a casar con un desconocido para mí y que haya sido el último en enterarme me agobia.

Últimamente no tengo control sobre mi vida y es me molesta, siempre tuve control sobre cada aspecto de mi vida y desde que realicé esa llamada todo cambió. Y no para bien.