¿Que hubiera sido? ~Diego&Roberta~

40. Un susto de muerte

Gandía y Gastón aparecieron para frenar el espectáculo que las chicas habian conseguido montar.
Intentaron explicarle a Gandía lo que estaba sucediendo, pero este hacía oidos sordos.
Todo el mundo empezó a irse, poniendo mas nerviosas a las chavas, que rezaban para que los chavos hubiesen podido coger todas las pruebas.

Bajó las escaleras obligada por Gastón quien como castigo había organizado una sentada.

No habia terminado de bajar el último escalón cuando sintió como alguien le agarraba fuertemente del brazo.

-Escuchame bien estupida, no sé que andais tramando. Pero no os ha servido de nada. La logia está más viva que nunca. Quizás más que tus amiguitos y tu noviecito -Se alejó de allí dejandole con el pecho encogido. Recorrio el lugar con la mirada. Algo pasaba. Teo y Nico habían desaparecido.

Escuchaba como Madariaga discutía con Gandía y Gastón mientras Mia la miraba con la interrogación en los ojos. El dolor de pecho se incrementó y supo lo que estaba pasando.

Sin mediar palabra se levanto y salió corriendo sabiendo que tanto sus amigas como el director, Gastón y Madariaga correrían tras ella.

Paró en seco cuando lo vio en el jardín, justo en la puerta de la antigua bodega. Había sangre por todos lados, Nico intentaba despertarle mientras gritaba desesperado que alguien le ayudase.

Inmediatamente tanto Madariaga como Gastón fueron a socorrerles mientras Gandía pedía calma.

Abrio los ojos y comenzo a toser.

-Los chavos, están dentro, los chavos...

-Donde están Tomas?

-La bodega. La logia.

Se dió la vuelta y empujó al que era su director.

-Ya vio lo que le hicieron a Tomas? Le juro Gandía que como les pase algo a los chavos voy a hundir la reputación del colegio y la suya. Y no va a saber donde meterse el resto de su vida.

Teo apareció frente a sus ojos con un aparente ataque de ansiedad.

-No puedo abrir, no puedo sacarles. Se van a quemar y no puedo ayudarles.

Había humo por todas partes y podía ver como las llamas iban acercándose cada vez más.
Todo había sucedido demasiado rápido. Un ruido les habia avisado de que habian sido descubiertos y de un momento a otro se encontraron con la bodega rociada de gasolina y a uno de los miembros de la logia lanzando un mechero.

Habían intentado salir resultando imposible. Habian gritado hasta quedarse sin fuerzas. Podía escuchar la tos de Miguel y ver a Giovanni desmayado mientras él sentía que su garganta se cerraba y no podía moverse.

Pero a lo lejos la escucho. Una voz. Justo esa voz llamándole. Queria llamarla, gritar su nombre para que diese con él pero no le salía la voz. Solo podia escucharla llorar mientras le llamaba.

Tambien escuchaba a su mejor amiga llamarle a él y a Miguel y al que parecia Gandía rogando que no entrasen al fuego y esperasen a los bomberos.

Pudo ver como una silueta que no pudo reconocer levantaba a Giovanni y le sacaba del lugar. Acto seguido escucho de nuevo su voz acercándose pero sintió sus ojos cerrarse y dejar de escuchar nada.

Sintió el mundo desvanecerse cuando se dieron cuenta de que los chicos estaban atrapados en la bodega que en esos momentos estaba siendo arrasada por las llamas.

Él estaba dentro. Su muñequito estaba entre las llamas.

Corrió junto a Gandía, Mía, Lupita, Nico y Gastón mientras Madariaga llamaba a una ambulancia y a los bomberos y cuidaba a Tomás.
La puerta habia sido cerrada con llave, pero por suerte no tardaron en derribarla.

No veian nada. Solo pudo distinguir al que pensaba que era Miguel tirado en el suelo.

Inmediatamente escucho como Mia empezó a gritar el nombre de su amigo mientras luchaba con Gastón por que la dejase entrar.

-No entren! No entren! Los bomberos están de camino, no se pongan más en peligro!

Consiguió escapar de los brazos de Gandía y se adentró en el fuego. Miró hacia atras y pudo ver como Mia tambien  se zafaba de Gastón y se echaba sobre el cuerpo de Miguel e intentaba levantarlo.

Empezó a llamar a Diego suplicando que le contestase. Pero cuánto más le llamaba peor era su agonía. Divisó a Giovanni y aviso a Gastón para que le sacase de allí.

-Sal de aquí ya Pardo

-No me voy a ir sin Diego

Y de repente lo vio. Corrio hacia él y comenzó a darle en la cara para despertarle.

-Mi amor por favor, reacciona Diego por favor.-Intento levantarle pero estaba muy pesado para ella. El segundo intento era arrastrarle, pero sin ayuda no podia ni tan solo arrastrarle un metro- Muñequito despiertate.

-Pardo!

-Aqui! Está aquí! Saquenlo por favor

Con ayuda de Gandia y Nico consiguieron sacarle de la bodega.

Cuando salieron todo era un caos. Los bomberos y las ambulancias habían llegado para atenderles.
Tomas fue trasladado al hospital en compañia de Madariaga.

Veia como todos sus amigos eran atendidos y les ponian mascarillas de oxígeno. Mia acariciaba la mejilla de Miguel y lloraba sobre él bajo la atenta y furiosa mirada de Gastón.

Como habían llegado a esto? Por qué nadie les creyo?

Una mano entrelazandose con la suya la saco de sus pensamientos. Volteó y le miró para después sonreir e inclinarse para estar a la altura de la camilla en la que él estaba tumbado.

-Me diste un susto de muerte muñequito