Salió de sus pensamientos cuando vio que su compañero recostó su cabeza sobre su hombro provocándole un sonrojo bastante evidente pero que el chico no podía notar por su perspectiva, pero que disminuyo al escuchar el sonoro bostezo del héroe gatuno que la trajo de vuelta a ese momento.

-¿Cansado gatito?- pregunto con un tono burlón.

-Y mucho my lady fue un día bastante largo- dijo acurrucándose un poco.

Hay estaba, esas dos palabras y un gesto tan simple eran los momentos que la chica a hora atesoraba y aceleraban de golpe su corazón poniendo su cara completamente roja.

-Pero creo que ya debo irme- dijo poniéndose de pie antes de que el sueño lo venciera y bajando de golpe el animo de su compañera.

-¿No te quedas para un helado?- dijo señalando a André con su carrito que se veía a la distancia.

-No lo creo bogaboo, mañana debo reunirme temprano con mi mejor amiga para organizar una salida con el resto de nuestros amigos- dijo estirándose un poco.

Ese comentario enojo un poco a ala heroína, Chat noir llevaba mucho tiempo comentando sobre su "mijir imigi" siempre que tenían una conversación era mencionada de alguna u otra manera, parecía que el héroe realmente admiraba y quería a esa chica, era algo obvio que la amaba pero la de rojo nunca lo admitiría por miedo a perder al chico, su ego le prohibía perder en este punto.

-Hasta pronto my lady te debo ese helado- se despidió haciendo una reverencia y alejándose.

Ella solo lo vio alejarse, normalmente se quedaría a maldecir el aire y reclamarle a la nada que Chat noir le preste mas atención a su supuesta mejor amiga que a ella, pero había quedado temprano con Adrien para verificar la comida y que todo estuviera listo para un picnic que tendrían con sus compañeros en un par de días.

Así que resignada tomo el yoyo de su cintura y esperando relajarse en el camino se fue con dirección a su hogar.

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La azabache despertó al día siguiente mas temprano de lo habitual, soñó una vida feliz junto a cualquier persona que estuviera bajo la mascara de su gatito y eso la hizo dormir muy bien.

Sonrió al ver la hora en su celular y darse cuenta que tenia bastante tiempo para prepararse para la escuela, se puso de pie dispuesta a organizar tranquilamente su mañana cuando alguien toco a su puerta.

-Marinette, Adrien llego para que planeen la comida del picnic de mañana- dijo su madre asustando a la oji azul.

¡Se había olvidado completamente de Adrien!

Bajo corriendo hasta la sala aun en pijama esperando que fuera una broma de su madre y no ver a su mejor amigo ahí, pero la vida la odiaba y su amigo rubio estaba ahí esperándola.

-Hola Marin-eeeette- alargo Adrien sonrojándose al ver a la chica en pijama.

-Hola Adrien, perdón por recibirte así me acabo de levantar dame unos minutos- dijo algo avergonzada regresando a su cuarto.

Adrien seguía sonrojado y un poco en shock viendo por donde se iba su crush, los días compartiendo tiempo con la azabache confirmaron cualquier sospecha de estar enamorado de ella, nunca lo noto antes por estar cegado por Ladybug, pero Marinette era una persona maravillosa, valiente, amable, noble y que siempre ayuda a los demás sin importar que, también podía ser divertida y compartían muchos gustos en común, era su chica ideal y ahora  ya no tenia dudas.

Invirtiendo el cuadradoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora