Habíamos ganados los tres partidos para pasar la final. La final era el sábado. Si era final caía siempre en un sábado. Y yo.. iba hacer la animadora. No tuve elección. Aunque no fui al ensayo de última hora. Estaba en el vestuario de las chicas cambiándome. Me miraba de arriba abajo colocandome mejor la falda. Iban a venir mucha gente. No quería que me viesen mucha cosa ahí abajo. Ya que lo harían. Estaba arreglando mi pelo. Cuando vi alguien disfrazado de lobo y una camiseta larga del equipo de nuestro baloncesto. Abrí mis ojos inesperada. Me estaba espiando. Me giré a el. Estaba saludandome con la mano. Pero tendrá cara. Fui a tirarme hacia a el pegándole. Estaba subida a espaldas suyas. Él andaba estando encima suya saliendo del vestuario. Andaba hacia las pistas gritando. Tenía sus manos hacia al aire. No me enteraba lo que decía. Yo solo le estaba diciendo pervertido. El no paraba de andar desorientado. Se iba a dar contra la barra de la canasta. Mierda. Le gritaba tocando la cabeza del disfraz para que mirase. Se iba a dar contra la barra. No tuve que hacer que bajarme. Y si. Se dio. Corrí hacia a él dándole una patada en el costado. Todos vinieron hacia la situación. -¡Charlotte!.-Daba un grito Crystal. Corría hasta ponerse al lado mía.- ¿Que ha pasado?.- -El pervertido este me estaba viendo como me cambiaba.-Le daba otra patada, me enfureció.- El que estaba en el disfraz negaba. Tenía sus manos en la cabeza por el terrible golpe. -¿Quién coño es ese? ¿El pichichi de nuestro equipo? ¿Por que esta disfrazado de lobo?.-Hablaba un jugador.- -Se supone que el lobo es feroz y rápido.-Decía Chris.- -¿A que viene los lobos? Es un pervertido.-Se agachaba Crystal al oído de aquella persona gritándole.- ¡Pervertido!.- -¿Como tiene el culo Charlotte?.-Preguntaba otro, se estaba riendo.- Negaba apartando a Crystal. Intentaba quitarle la parte de arriba del disfraz. Cuando logré quitarle la cabeza. Era Derek. Puse una mano en la boca. Pero será.. -¿Derek?.-Pregunté.- ¡Derek!.- -¡Entré cuando ya estabas vestida, lo prometo!.-Decía con su tono quejoso, no paraba de tocarse la cabeza.- -¿Quién es?.-Preguntó Crystal.- -Es un compañero de mi clase.-Suspiré extendiendo mi mano.- Levanta anda.- -Te juro que no te vi.-Agarraba mi mano, se levantaba despacio.- Lo ju..- -Te creó, te creó.-Dije, miraba su frente, la tenía roja del golpe.-Será mejor que te eches agua.- -Si, me duele.-Frucía el ceño tocando su frente, ponía cara de dolor.- -Que pervertido, el pervertido.-Decía el mismo antes.- Todos le llamaban pervertido. El estaba apurado. Estaba gritando negándolo. Negué diciéndole que no le hiciera caso. Tu ve que acompañarle para que se echará agua en la cabeza. Le dejé en el vestuario de chicos. Volví a la pista. La gente estaba llena. Vi que el entrenador estaba hablando con un hombre alto. Se giró aquel hombre alto tocando el hombro de alguien. Tyler. Disimuladamente pase por delante de ellos. Estaba con las chicas. Fingía que estiraba mientras me fijaba como aquel hombre de altura alta hablaba con Tyler. Tyler estaba muy, muy serio. Tenía una cara muy larga. Le di un pequeño codazo a Kitty sin quitar la mirada a ellos dos. -¿Quién es ese hombre tan alto?.-Pregunté.- -¿El que habla con Tyler? Su padre.- -¿Qué?.-Dije sin esperarmelo.- Vaya él es tan..- -Si, tan alto, fue jugador de baloncesto.-
-¿En serio?.- -Si, ¿Por que crees que Tyler esta en el equipo entonces?.- Gire la mirada a ella con el ceño frucido. No parecía que su padre estuviera feliz con él. No se le veía la cara de Tyler. ******* El partido comenzó. Era la oportunidad para ganar. Algo pasó en unos de los jugadores. Había caído en redondo. Ahora teníamos un jugador menos. Se reunió el equipo con el entrenador. Tenían que encontrar un jugador rápidamente. Nos acercamos Kitty y yo para ver qué harían. Pero yo tenía una persona. -¿¡Alguien sabe alguna persona que juegue, eh!?.-Gritaba el entrenador alterado.- -¡Derek!.-Alce la voz para que se me escuchará.- -¿Quien demonio es Derek?.-Preguntó Nick el entrenador.- -Es uno de mi clase, seguro que querrá jugar.- -¿No era el pervertido de antes?.-Preguntó Chris.- -No es un pervertido.- -¡Da igual! Necesito a alguien ya.-Decía Nick desesperadamente.- -Mira, ahí esta.-Señalaba Chris en la pista.- -¿Ese? No, no.-Decía Tyler, miraba a Nick.- Entrenador me niego.- -¿Tienes acaso alguno tú?.- -No pero..- -Pues callate.-Le decía bordemente, subió la mirada a Derek.- ¡Derek ven, aquí ahora!.-Gritaba fuertemente.- Derek al vernos a todos de llamarles. Venía hacia nosotros alzando sus brazos. Cuando se puso entre nosotros, cogía el entrenador el hombro de él. -Tú, ¿Sabes jugar?.-Preguntó.- -He tocado la pelota un par de veces, quería apuntarme aquí pero..-Se explicaba rápidamente, estaba hablando tan normal.- -¡No me cuentes tu vida! ¡Ve, te cambias y juegas, corre!.-Le gritaba en su cara.- -¿V-voy a jugar? ¿En el equipo?.-Preguntaba señalándose a si mismo, no se lo creía.- -¡Que te vayas a cambiarte!.-Gritaba de nuevo.- Todos los jugadores le empujaron para que se fuera al vestuario. Me reía negando al ver la reacción de Derek. Podía ser patoso. Pero era tan buen chico. Me alegraba que iba a jugar en el equipo, aunque no a otros. -Entrenador, podemos ganarles teniendo un jugador menos.-Insistía Tyler.- -Dejame dudarlo por el primer partido, pasasela a Nathan, y a Chris todo el tiempo.-Decía Nick, se fue hacia la pista.- Me quede mirándoles a los dos. Hoy había mucha tensión. Se notaba. La partida comenzó de nuevo. Estábamos yendo genial. Todos estaban emocionados. Gritando. Sin embargo yo estaba sentada en el banquillo. Pensando. Nunca me gustó ser animadora. Y ahora lo soy. Nathan no le gustaba los deportes, ahora esta dominando. ¿Por qué este cambio tan brusco en nuestras vidas?. Estuve pensando una y otra en eso. Hasta que Kitty me avisó que la primera parte estábamos ganando. La segunda estaba encanastando todas Tyler. Las chicas de esta Universidad y de la otra lo victoreaban. Oía su nombre tan repetidas veces. Me salió su nombre por mi boca. Rápidamente tapé mi boca sin que nadie se diera cuenta que lo dije. Faltaba cinco minutos para terminar. Tyler iba a encanasta cuando le dieron un pequeño empujó. Vi como se le escapó la pelota. Nathan fue corriendo a cogerla andando a la canasta. Me levanté de golpe acercandome un poco para verle mejor. Iba a encanastar el último. Vimos a Nathan como saltaba, como la bola introducía a esa canasta. Y el tiempo acabó, ganamos. Estaba aplaudiendo ilusionada. Tenía una sonrisa que me la podían ver todos. No paraba de aplaudir y dar saltos.
Toda la gente se metió en la pista celebrándolo. Fui corriendo hacia la pista para encontrar a Nathan. Pero había mucha gente. No lo encontraba. Me estaba tropezando con muchas personas. Me tropezaba con muchas chicas que estaban gritando. Estaba girando a mi alrededor. No podía encontrar a Nathan. Mejor salía de la gente. Cuando salí. Pude ver con claridad. Victoreaban a Nathan cogiéndolo en brazos. Gritaba su nombre para que me viera. Nathan cuando me oyó pidió que lo bajarán. Cuando lo hicieron. Corrí hacia a el abrazándolo tan fuertemente. Le estaba estrujando que notaba su respiración. Y su corazón tan rápido. Me aparté un poco de el para mirarle mejor. Estaba feliz. Y si Nathan lo estaba, yo también. Un fotógrafo de la escuela vino a hacer fotos. Cuando le dieron el trofeo todos se hacían fotos. Los jugadores más bien. Luego las chicas le quitabamos el trofeo para hacernos fotos con el. Me hice una foto junto a Nathan también con el trofeo. Luego se lo di a alguien que ni si quiera sabía. Le pedí al fotógrafo que me hiciera un par de fotos con Nathan. Cuando las hizo Nick pidió una foto completa, los jugadores con las animadoras. Cogí la mano a Nathan para posicionarnos. Buscaba a Kitty para que se pusiera al lado mía. Pero ya alguien lo hizo. Tyler. Giré mi mirada a él sobre saltada. No lo esperaba. Chris se puso al lado de Tyler. Y Kitty al lado de Chris. No sabía que hacer. Si felicitarle o decirle alguna tontería. A si que le sonreí, y fije mi mirada a la cámara. Cuando nos hicieron las fotos. Ya él no estaba. Nos fuimos a las gradas por que Nick quería hablar con el equipo. Las animadoras también nos metimos para cotillear. -Hemos ganado el trofeo, y gracias a la ayuda de Tyler, y Nathan, por eso..-Miraba a Nathan el entrenador.- Quiero pedirte que seas el capitán.- -¿Capitán?.-Preguntó desconcertado.- Entrenador, me gusta ahora el baloncesto, para coger un cargo más alto.-Se reía levemente.- -Nathan te mereces ser el capitán.-Insistía el entrenador.- -Gracias, lo agradezco pero.. quiero que siga siendo Tyler el capitán, es más veterano que yo.- -Como quieras compañero, ¡Esta oferta no se te ofrecerá, jamás!.- Nathan se estaba riendo negando. Le dio la mano a Tyler. En plan amigos. Tyler ni se enfadó por eso. Al contrario, parecía que lo veía justo que le dieran el puesto a Nathan. Todos estaban recogiendo. Aunque muchos se quedaron en la pista hablando. Le dije a Nathan que lo esperaba a fuera, que iba al vestuario de chicas a cambiarme. Andando al vestuario. Me fijé en la puerta del vestuario de los chicos. Estaba.. estaba aquel hombre alto. Tyler y su padre. Tenía su cabeza agachada. Sus puños cerrados. La cara colorada. La mandíbula se le tensaba. Solo se ponía a si cuando estaba nervioso. O cabreado. El padre no paraba de echarle una bronca aunque no lograba entenderle. Le estaba pegando collejas en la nuca. También le levantaba su barbilla pegándole guantazos en la cara. Pero el repetía la misma acción, agachar la cabeza. No era.. no era mi obligación hacer eso pero tampoco podía ver eso. Iba intenta parar eso. Aunque alguien agarró mi brazo metiéndome en el vestuario. Cuando entré vi que era Crystal. Estaba desconcertada mirándola. -¿Que pasa?.-Pregunté sin entender.- -¿Vas a venir a mi fiesta?.- -¿F-fiesta?.- -La que voy a celebrar por qué hemos ganado, en mi casa.- -No se si..- -Traete a Nathan, esta noche tiene que ser mío.-Alzaba sus cejas varias veces, se mordía el labio sonriendo.- De golpe todas las chicas se metieron a cambiarse. Perdí la vista a Crystal. Cuando me cambié. Salí del vestuario fijandome el de los chicos. Ya no estaban. Vaya. ¿Por qué le pegaría?. Si tendría que estar feliz. Hemos ganado. Y la mayoría de los goles ha sido gracias a él. Es todo.. un poco extraño. Fuimos en el coche de Kitty a "casa" de Crystal. Eso era una mansión. Todos estaban bebiendo. Bailando. Y cosas típicas. Estábamos Kitty, Nathan y yo. Cuando entramos le hacían la ola a Nathan todos. Pero él estaba incómodo, no quería tanta.. popularidad. Crystal lo agarró del brazo llevándoselo para ella. Bueno, que disfruté un poco. Estaba buscando junto a Kitty las bebidas. Ella también desapareció. Mierda, estaba sola. Estaba echandome una copa, notaba algo en el suelo. Estaba todo mojado de las bebidas que habían tirado. Del despiste se me cayó la mía. Me quedé sin bebida. Miraba al suelo por si había alguna botella. Por suerte encontré una en mi cara. Alguien la estaba sosteniendo. Tyler. Me reí levemente echando mi pelo atrás. -Tú.. tú..-Intentaba decirle algo, mirándole.- -¿La quieres o no?.-Preguntó.- -Un poco sí.-Respondí quitándole la botella, la abría dándole un sorbo.- -Sienta bien, animadora.-Decía él.- -Hm.-Seguía bebiendo, la aparte de mis labios poniendo una cara de asqueada.- No tanto como la victoria.- -Ya.-Suspiró, se dio la vuelta andando.- -Enhorabuena.-Dije de repente.- Hemos ganado.- -Hm.-Se giró un poco. Me miraba de reojo.- Nathan es un buen..- -Gracias a los dos.-Le corte su frase. Hablé rápidamente.- -Pensaba..-Se giró del todo, tenía una reacción de asombro.- Pensaba que me ibas a putear.- -Solo cuando es necesario, pero hoy no lo es.-Resople mirando a todos los lados, le volví a mirar.- Necesitó tomar el aire.- ***** Estábamos los dos en un balcón que había en el salón. Era muy grande. Espacioso. Nos pasábamos la botella. Mirando la gente de abajo como se divertían. O se peleaban. No era de mi incumbencia pero aún estaba pensando en lo que su padre le había hecho. -Te he visto antes, con tu padre.-Dije mirando hacia abajo, como si nada.- -Me saca un par de cabezas, ¿como sabías que era mi padre?.- -Solo lo imaginé.-Encogía mis hombros.- ¿Por qué te estaba tratando así?.- -¿Así cómo?.- -Te estaba.. te estaba pegando.-Subí la mirada a él, fijamente.- ¿Por qué?.- -Hm.-Dio un sorbo a la botella, lo apartó de su boca, giró su mirada a mi sonriendo un poco.- Al enemigo ni agua.- -¿Qué?.- -¿Por qué quieres saber mi vida personal? ¿Por qué debería contartela a ti?.- -N-no lo sé, solo pensaba que podrías..-Hablaba desconcertada.- -Por que te haya dado una botella, no implica qué seamos amigos.- -Se que no lo somos, por que nos odiamos.- -No te odio.-Decía riéndose levemente, negaba.- -Dijistes una vez que me tenías tirria.- -Me desesperaste ese día, pero no te odio, sólo me es raro que nos peleamos cada dos por tres.- -Por que ninguna ha tenido valor de decirte nada.-Cogía la botella, di un sorbo.- -¿Que te han dicho.. que te han dicho las chicas de mi?.- -Hm.-Me reía bebiendo, dejé la botella aún lado apoyandome en el balcón.- Al enemigo ni agua.-Mencionaba su misma frase, burlandome.- -Venga ya, no es lo mismo mi vida personal, a unos comentarios de unas petardas.- -Esta bien, que conste que soy más enrollada que tú.-Decía mientras le di en el hombro flojamente.- Me han dicho qué bueno, eres muy agradable y las trataba bien pero cuando te daba tus enfados, eras muy borde y chulesco, como te pones conmigo, ellas no te decían nada, por qué la mayoría estaban enamoradas de mi.- -Todos tenemos defectos.- -Algunos se sobrepasan Tyler.- -¿Me lo vas a corregir tú?.- -No, no para nada.-Negaba rápido, suspire.- Pero no me callaré si me vacilas.- -Me parece bien, incluso ya fíjate, me estoy acostumbrando.- -Entonces el Lunes, volvemos a lo mismo ¿no? A pelearnos.-Le miraba de reojo, susurrando.- -Supongo que si, algún día, lejano.-Decía riéndose mencionando la última palabra.-Seremos amigos.- -¿Tyler Halmiton ha dicho eso?.-Fingía en estar sorprendida, mientras me quedaba mirándole.- Estas muy borracho, porfavor, nunca serías amigo de una pobre.- -Para que veas que soy enrollado.-Mencionaba mi frase, riéndose burlón, negaba sonriendo.- Era para mosquearte, te mosqueas rápido.- -Entonces, ¿No sigues pensando que soy una debilita piernas, controladora y culona?.- -Eso si lo sigo pensando aún.- -Serás..-Dije dándole un toque en el hombro de nuevo.- Nos reíamos sin parar. Estaba teniendo un momento agradable con Tyler. Parece una locura. Estoy demasiada. Demasiada borracha por favor. Nathan vino corriendo. Asfixiado. Vino hacia nosotros escondiéndose entre nosotros. Nos miramos sin saber que hacía Nathan. -¿Esta Crystal por aquí?.-Preguntaba Nathan, miraba la puerta.- -No, ¿Que pasa?.-Dije.- -Ha estado todo el rato encima mia, menos mal que me la quité de el medio.- -Es que Crystal le gustas mucho.-Decía Tyler.- Tiratela, por una noche.- -Si es pesada sin hacerlo, imaginatelo haciéndolo.-Decía Nathan.- Me aguanté la risa por lo que digo. Entraron unos chicos en el balcón. Al parecer esa de la otra Universidad. Conocían a Tyler. Le saludaban uno a uno. Y le daban las felicitaciones a Nathan por ganar. Todos y cada uno de ellos se me quedaron mirando. -¿Eres Charlotte? Todos en mi Universidad piensan que eres la que éstas más buena.-Dijo uno.- -Gracias por.. por eso.-Frucía el ceño, me reía por lo que digo.- Pero eso es Crystal.- -¿La pelirroja? Nos la hemos tirado todos ya.-Decía otro riéndose a carcajadas.- -Que buena reputación tiene.-Susurré asintiendo.- -¿Es verdad que tú novio es Tyler?.-Preguntaban.- -No, no, no.-Empezaba a negar rápido.- -¿Os lo dije o no? Demasiada tía para Tyler.- -Eh, no os paseis, imbéciles.-Salto Tyler.- -Sigues siendo el favorito de nuestra Universidad por las chicas, tranquilo.-Decían, me miraban a mí.- Pues te invitamos a algo.- -No hace falta, en serio.-Me reía nerviosa negando sin parar.- -A esto.-Sacaba uno, un bolsita pequeña de marihuana.- -Joder.-Dije, me empezó a dar la risa.- No fumo de eso, pero gracias.-
-Pero si habéis ganado, por un par de caladas, ¿Que pasará?.-Decía otro.- -Hm.-Negaba de nuevo.- -Tienen razón, por un par de caladas, no te matarán.-Susurraba Nathan en mi oído.- -¡Nathan!.-Dije sorprendida, me quede mirándole, me aumentaba la risa.- ¿Desde cuando quieres drogarte?.- -Estamos en la Universidad, hemos ganado, y por unos porros.- -¿Seguro? En plan, no sé.- -¿Ni por tu jugador favorito?.- -Esta bien, vale.-Alcé la mirada a ellos.- De acuerdo, fumaremos.- -¡De puta madre!.-Gritaba uno.- Cerrad la puerta.- Cerraron la puerta del balcón cuando empezaron hacerse el porro. Estaba hablando con Nathan y con los chicos de la Universidad. Nathan empezaba a darle caladas, y se ahogaba. Me reía de él. Para nada. Por que me pasó lo mismo. Lo fumaba, y me quede un rato aguantado el humo hasta expulsarlo, me estaba dando el colocón. No paraba de reírme como una majareta. Tocaban mi brazo, aunque ni lo sentía. -Yo que tu no fumaba más, te vas a poner mala.-Decía una voz conocida, Tyler.- -Fuma.-Decía ofreciéndole, mientras sonreía sin parar.- -Ya he fumado antes, dejalo tu ahora.- -¿Te éstas preocupando por mi?.-Preguntaba sin parar de reírme, tire el porro, tocaba mi cara al no sentirla.- -Pues si, ¿vale? Deja de fumar, joder Charlotte.- Decía con una voz exigente.- -Oh.-Abría mi boca haciendome la sorprendida, dejaba mis manos en la cara.- Estas preocupado, por mi, a la chica que odias.- -Ya te he dicho que no te odio.-Bajaba mis manos bruscamente de mi cara, agarraba mis muñecas fuertemente.- No te odio para nada, es más me.. me..-Decía cortándose, abría sus ojos azules, estaba descompuesto.- -Vamos a bailar.-Agarraba mi brazo Nathan, tirandome hacia a él.- -¿Eh?.-Actué confusa al ver la reacción de Tyler. Me dejaba andar por Nathan.- Andaba por qué Nathan estaba guiandome. Estábamos abajo. En el salón. La gente estaba bailando. Parecía todo tan sueño. Estaba lasia. No podía moverme muy bien. Estaban ponía música electrónica. Me movía como podía. Me reía a carcajadas pegada en el pecho de Nathan. Rodee el cuello de Nathan. Le miraba sin parar de reírme. Tenía sus ojos rojos. Cogía su cuello inclinándolo a mí. Lo tenía besándolo a mis labios. No paraba de besarle. Cerraba mis ojos besándole. Yo ni hacia esfuerzo del ciego que llevaba. Nos besábamos. Mis manos se quitaron de su cuello dejándola tan normal. Tuvo que subir mis manos a sus caderas para sostenerme. Estaba besando a Nathan.
Hello, ¿Que tal? Espero que os éste gustando, si os gusta le dais y comentad, ¡Graciaassssss!
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El precio de la vida.
Teen FictionCharlotte Jenkins tan solo tiene 18 años. Entra en la universidad de América más cara y famosa junto a su mejor amigo Nathan. Pero no por que sean ricos, si no por su buenas notas. Es por eso que la reputación de ambos cambiarán. Aunque ella sigue p...
