Capítulo 17

154 23 2
                                    

Atsuko se quedo paralizada al ver la silueta de la chica de ojos azules sentada en el sofá de la sala, vestida completamente de negro, mirándola fijamente, revelando miedo en sus ojos.

Atsuko estaba consciente de el corte en su labio inferior y de su nariz sangrante, pero aun así sonrío al verla. Los golpes de Andrew y Louis se volvieron invisibles en cuánto ella apareció en su vista.

Así que de allí conocía Amanda a Diana...

Atsuko: Diana Cavendish -Susurro, pensando que ella no la escucharía. Pero lo hizo, y la chica de ojos azules hizo algo que Atsuko jamás habría esperado de ella.

Corrió hacía ella y le sujeto los brazos, mirando cada parte de su rostro con nerviosismo.

Diana: Atsu... ¿Qué te...? ¿Qué les...? ¿Fue Andrew? Por favor dime que... Mierda, mira tu labio... Tienes que limpiar eso y... -Susurraba angustiada.

Amanda: Mi nombre es Amanda...

Diana: ¿Te duele mucho?... Sera mejor que... ¿Por qué estas sudando...? ¡¿Dónde esta tu auto?!

Amanda: Soy amiga de Akko...

Atsuko: Diana, ya, tranquila -Susurro, sujetando sus manos, pues había comenzado a chasquear sus dedos.

Amanda: Y es un placer conocerte...

Diana: Está bien -Suspiro, asintiendo lentamente- Estoy bien -Murmuro, como intentando convencerse de esto.

Amanda: Perdón, pero... -Interrumpió- Estoy acá. Amanda O'Neill. Diecisiete años. Amiga de Akko. ¡¿A alguien le interesa esto?!

Atsuko vio a Diana mirar confundida el rostro de Amanda mientras fruncía su entrecejo, jamás encontrándose sus ojos azules con los de su amiga. Finalmente, una de las comisuras de sus labios se elevo ligeramente. Atsuko conocía aquel gesto. Era una sonrisa, pero no completamente real.

Diana: Me llamo Diana -Susurro tímidamente, ofreciéndole su mano.

Amanda: Ya lo sé -Comento, estrechando la mano de la chica con su característica rudeza- Vienes a mi casa desde hace casi un año, obviamente se tu nombre. Yo soy Amanda, pero tú ya lo sabías.

Diana solamente asintió, Atsuko detectando confusión en ella. Sí, la personalidad de Amanda podía llegar a ser todo un enigma para la chica del Asperger.

Amanda: Akko, voy a saludar a mis hermanos y buscar algunos libros para hacer nuestra tarea. ¿Te parece? Serán solo cinco minutos, lo prometo.

Amanda sabía que ayudarla a limpiar sus heridas no era una opción. Atsuko jamás lo permitía. La pobre Amanda ya tenía bastante con tener que soportar algunos golpes que no merecía de vez en cuando.

Atsuko simplemente la miro, beso su mejilla y asintió.

En cuánto Amanda se fue los ojos de Atsuko volvieron a Diana, que ahora miraba en la dirección por la cual Amanda se había marchado con el ceño fruncido y los puños apretados.

Atsuko: ¿Qué sucede, Diana?

Diana: ¿Es tú novia? -Pregunto, aun sin mirarla.

Atsuko: ¡No! ¡Amanda no...! ¡Qué asco! ¡Es como mi hermana!

Diana: Pero la besaste...

Atsuko sonrío. Diana estaba celosa, y eso, de alguna forma, le parecía divertido. Lentamente y sin preocuparse por la sangre que corría por su rostro, Atsuko acerco sus labios a la mejilla de la chica de ojos azules y la beso tiernamente para luego sonreír. La reacción de Diana fue tensarse al instante, pero luego de unos segundos sonrío y relajo sus músculos. Atsuko se sintió sonrojar.

La Chica de la Ventana (Diakko Adaptación)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora