Capítulo 13

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Atsuko estuvo preocupada durante cinco días seguidos. La chica de la ventana no había estado en su habitación durante todos esos días. No la había visto ni una vez, y Atsuko dudaba que la estuviese ignorando, aunque conociendo a Diana Cavendish y su extraña personalidad, esto no la extrañaría.

Fue entonces cuando lo supo.

Estaba desayunando con su familia, ya preparada para ir a su escuela, cuándo Harumi y Fuji comenzaron a entablar conversación.

Harumi: ¿Sabías que la hija de los Cavendish está en el hospital?

Atsuko abrió bien los ojos. No podían estar refiriéndose a ella...

Fuji: ¿Los Cavendish?

Harumi: Sí, nuestro vecinos. Los padres no son muy sociables, pero hable con sus hijos ayer mientras estaba en el supermercado.

Fuji: Creo haberlos visto un par de veces, pero nada importante... ¿Cuál de sus hijos está en el hospital?

Harumi: La mayor, creo. La de los ojos azules...

"No, por favor, no" Suplicaba mentalmente a quien sea que la estuviese escuchando.

Fuji: ¿Qué le sucedió?

Harumi: Su corazón. Al parecer tuvo una falla cardiaca o algo así...

Fuji: Pobre chica...

A Atsuko le ardían los ojos, repletos de lágrimas que deseaban salir. "No es Diana, Atsuko. Tranquila" Intentaba convencerse, pero sabía que solo se estaba mintiendo.

Mai: Yo la conozco -Susurro Mai, sonriendo, no entendiendo bien que era lo que sucedía con Diana-. Cuándo mi tía me trae a casa ella siempre está saliendo del auto de sus papas. A veces tienen que llevarla cargada hasta la casa -Comento- Una vez se le cayó un libro repleto de... crucigramas, creo que se llaman... y fui a devolvérselo. Solo dijo gracias y entro a su casa -Contó, moviendo sus manos exageradamente, como si este movimiento permitiera salir las palabras de su boca más fácilmente-. Creo que es algo gruñona -Murmuro riendo.

No lo es! ¡Solo debes conocerla!" Grito mentalmente, enojada. Pero Mai no tenía la culpa... ella era solo una niña. Ella no podía comprender todos los problemas con los que Diana tenía que lidiar en su vida.

Harumi: Al parecer los doctores piensan que lo mejor es un trasplante de corazón, pero no pudieron hacerlo a causa de sus problemas renales...

Fuji: ¿Problemas renales?

Harumi: Es una chica llena de problemas...

Atsuko: No lo es -Susurro, mirando su plato medio lleno, asqueada. Lo único que quería hacer era llorar y gritar. La comida ya no le interesaba, y esto era extraño siendo ella Atsuko Kagari-. Podría estar drogándose, fumando y bebiendo, y eso sería un problema porque ella lo habría elegido. Pero ella no eligió tener todos los problemas que tiene... Es como cuándo te da un resfrió. Tu no elegiste el resfrió, el te eligió a ti.

Fuji: Tu mamá no quiso decir eso, Atsuko...

Atsuko: Lo sé, papá... Fuji, quise decir -Aun después de tantos años viviendo con él, no se sentía cómoda llamándolo de aquella forma-. Pero se refirieron a ella como una chica llena de problemas como si fuese una drogadicta o algo así...

Harumi coloco una mano sobre la de Atsuko y la apretó fuertemente con entendimiento.

Harumi: Lo siento ¿Está bien?

Atsuko simplemente asintió, dudando en poder responder gracias a las lágrimas que querían salir en ese momento por sus ojos.

Fuji: ¿Y cómo se llama ella?

La Chica de la Ventana (Diakko Adaptación)Where stories live. Discover now