¡𝐇𝐄𝐘, 𝐏𝐀𝐑𝐊 𝐉𝐈𝐌𝐈𝐍! ꒰ ᴊɪᴍsᴜ ◍ ᴛᴇʀᴍɪɴᴀᴅᴀ ꒱ #pgp2023

𝐓𝐫𝐞𝐬

—Amor, ¿te molesta si voy con Hoseok hast—no lo dejó acabar de expresarse.

—No me molesta, tranquilo Jim—negó con la cabeza, esbozando una sonrisa sutilmente forzada.

Habían salido a caminar aprovechando que Park tenía el día libre y que a el no le ganó la pereza; llevaban casi una hora paseando de la mano por un parque, hablando de cualquier cosa, jugueteando como toda parejita enamorada.

Hasta el momento en que Hoseok apareció en el campo visual de Min y todo lo romántico de la tarde se esfumó en milésimas de segundos.

—Prometo que voy a cuidar bien de tu novio, no te preocupes—comentó en tono juguetón pasando un brazo por los hombros de Park.

El pelinegro asintío, sonriendo -que más que sonrisa, era una mueca-, sin mostrar los dientes. Por dentro sentía la furia crecer poco a poco, pero podía controlarse.

—No hay problema, nos vemos más tarde—dichas esas palabras, se dió media vuelta y a pasos disimuladamente rápidos, regresó a la comodidad de su hogar. El parque no estaba tan alejado de su casa, solo bastaban diez minutos y listo.

—¡Maldito estúpido!—gritó al cerrar la puerta con un golpe. Pateó el desgastado sofá sin importarle que seguramente lo estaba rompiendo más de lo que el pobre ya estaba, y se dirigió a la cocina.

Necesitaba distraerse, olvidar la estúpida sonrisa en el rostro de Jung, lo feliz que se mostraba Jimin, y los brazos de ese otro tocando a su novio.

Necesitaba tomar algo, y no cualquier cosa.

Rebuscó en las alacenas, en el bajo mesada, y en la heladera. Dejando todo desordenado a su paso, pareciendo un maldito desesperado, y tal vez eso era. A su madre no le gustaba que su pequeño hijo bebiera, por lo que cada vez cambiaba la botella de escondite.

» —¡¿Dónde demonios lo pusiste, mamá?!—le dió un golpe a una botella plástica vacía con el pie derecho—. Piensa YoonGi, ¡piensa! ¿Dónde lo guardarías tu?

Se detuvo un par de minutos para pensar; la última vez había visto como su madre la sacaba de la alacena pero allí no estaba ahora. El por su parte hubiera sido más cuidadoso y la habría escondido en los cajones del mueble que sostiene la televisión.

Un momento.

YoonGi corrió hacia la otra sala, es decir el living, para revisar cada recoveco del mueble que soportaba el peso de la televisión.

Sonrió al hallar la pequeña botella de vidrio en el fondo del último cajón, y corrió a encerrarse en su habitación.

•.•.Tres doritos después •.•.

—No puede ser—se quejó en un suspiro al abrir la puerta, viendo todo el desastre de papeles, bolsas, utensilios de cocina y demás.

Sabía que todo eso era su culpa y que lo que YoonGi había estado buscando era una botella de ginebra que su querida suegra escondía de ambos, por lo que luego de quitarse los zapatos y se dispuso a ordenar cada cosa en su respectivo lugar.

Una vez Jimin dejó todo como debía de estar, subió a la habitación del menor. El chico dormía con las extremidades abiertas mientras estaba boca abajo sobre la cama, parecía una estrella de mar aunque roncaba demasiado fuerte.

Rió, negando con la cabeza. Se acercó a él y teniendo cuidado en no despertarlo  le cambió la ropa que tenía por su pijama negro con un dibujo de ese Kumamon que tanto le gusta.

Una sonrisa boba se había instalado en su rostro cuando al quitarle la playera había quedado a la vista su lechosa piel y sus lindos lunares, aunque para evitar que le diera frío se apresuró en ponerle la otra ropa.

El reloj dio las nueve de la noche, por lo que decidió dejar de estar de flojo apreciando a su bonito novio dormido bajo las mantas, y bajar para cocinar algo de comer. No solo para si mismo, si no que para YoonGi también pues debía comer algo o podía enfermar luego.

Revisó toda la cocina en busca de ingredientes con que preparar algo, y únicamente halló huevos, carne magra, atún enlatado, arroz, aderezos y cebollas en vinagre. Algo sabroso, o al menos nutritivo, tenía que salir de todas esas cosas sin dudas.

Casi una hora más tarde Park volvió a entrar en la habitación de su novio, encontrandolo sentado sobre la cama con las mejillas sonrojadas y el cabello alborotado, mirando un punto fijo en la pared con un puchero en los labios.

—Yoonie—habló bajito, acercándose hasta estar junto a el—, preparé la cena.

—No me importa—respondió, ahora mirándolo. Lo cierto es que estaba hambriento y se le partía la cabeza de dolor—, así que te puedes largar de aquí y dejarme solo como haces siempre.

El pecho del mayor dolió. Sin tan solo pudiera contarle lo que está ocurriendo no actuaría de esa forma. Pero no podía contarle aún.

—Amor, me llamaron del trabajo porque Hyunsik se sentía enfermo y tuve que ir porque soy el único que puede reemplazarlo.

El menor pestañeó varias veces.

—¿Eso quiere decir que no pasaste tanto tiempo con...?—no podía pronunciar su nombre sin que sintiera la ira subirle por todo el cuerpo, pero Jimin entendía de quien se trataba.

Jimin soltó una risita y se tiró sobre él para abrazarlo, Min quedando recostado en la cama y el otro chico sobre su cuerpo.

—Después de que saliste corriendo sonó mi celular, preferí no decirte nada porque supuse que me ibas a mandar al demonio de todas maneras—susurró a centímetros de sus labios, los gatunos ojos de YoonGi se encontraban cerrados—. ¿Tienes hambre YoonYoon?

Una sonrisa inocente se formó en el menor, mientras rodeaba la cintura de su novio con sus propias piernas.

—A-ahora ya antojaste Mimi.

Tal vez podían comerse primero y luego bajar a comer.

947 palabras ohmygood JAJAJAJA

No encontré forma para que la pregunta de Jim y la respuesta de Yoon al final no parecieran con doble sentido 😫 pero bueno, lo pueden tomar como quieran xd

Espero les guste uwu♡