Capítulo 29 "Carta a Sofía"

2.3K 186 30
                                    

 Sofía:

Me gustaría decirte que desde que partiste todo está bien, que todos seguimos nuestras vidas, que seguimos sonriendo como siempre y que nuestras almas siguen intactas… pero no es así.

Todos los que te queremos y extrañamos tenemos el mal hábito de extrañarte más de lo debido, de llorarte más de lo que te gustaría y  cada día más nos preguntamos que si hay un dios, porque te llevo.

Desde que te fuiste deje de creer, deje de creer en todo. Ya nada me consuela, no hay Dios, no hay Cristo, ni religión que pueda devolverme la fe en algo… ¿Cómo puedo creer en algo, si ese algo me quito todo?

Tu hermana, quien te ama como nadie en este mundo.

Me duele que me dejaste sola, que te fuiste y sin decirme adiós, que me dejaste sin mi compañera de vida.

Planeaba una vida contigo, quería que seas tú quien me espere al lado de mi futuro marido en el altar, quería ser yo quien esté ahí, en el altar, al lado de Willy, quería que seas tú quien me ayude a criar a mis hijos, como lo fue el Tío Aldo con nosotras… ¿Recuerdas? Que hermosos momentos que pasamos. Yo me acuerdo como si fuera ayer… ¡Y amo tanto esos momentos! Tanto que me gustaría volver el tiempo atrás para volverlos a vivir.

Me gustaría volver atrás y abrasarte más, besarte más y decirte muchas veces más lo mucho que te amo… Me acuerdo cuando me hacías ese juego del “…a quien quieres más?” ¡Dios! Me volvías loca con eso! ¡Y yo vivía escapando las respuestas para no decir que te amaba más de lo que creías! ¿Porque fui tan idiota? Por qué no decirte “Si Sofí, te amo! Ok?”

Es tan feo quedarse sin decirle a alguien lo mucho que lo amas…

Eres mi mejor amiga Sofí. Y sabes que te amo más que a nadie en el mundo. Y lo hago hace mucho tiempo, desde el día que te conocí, solo que me di cuenta después y después ya fue tarde hermana.

Me ayudaste cuando más lo necesite, fuiste mi confidente, mi amiga, mi todo… Y hoy no te das una idea de lo mucho que te necesito…

Tengo mucho miedo de olvidarte Sofí, de olvidar tu voz, tu sonrisa picara, tus gestos, tus locuras…

No quiero que estés donde estés, porque me duele mucho que no estés aquí conmigo… Soy egoísta, y lo es y no me importa, porque prefiero arder en un infierno si es que existe antes de vivir sin tu presencia…

Pasamos muchos infiernos juntas, y lo superamos, juntas…pero de este ciento que no puedo salir, si no estás conmigo… no puedo ver el sol…

Ya no existe sol para mí…

¿Cómo puede existir, cuando paso por la puerta de tu habitación y espero verte en la cama?

¿Cómo puede existir, si cada vez que sueño, es contigo?

¿Cómo puede existir, si cada vez que alguien dice “hermana” yo no te tengo?

Me dejaste sola Sofí…sin ese lazo único que nosotras teníamos…

Hoy, tengo a mama, que es la mujer más maravillosa que conocí en mi vida, la cual es un ejemplo de vida para mí, tomo tu partida, mucho mejor de lo que pensé, al parecer ella solo te deja ir, me gustaría ser un poco más como ella… Pero yo soy yo… Con mis falencias y virtudes…que me hacen quizás parecida y a la vez totalmente desigual a mamá.

Es la mujer que se ganó cada latido de mi corazón… y a quien nunca voy a dejar de amar.

¿Y mañana?¿ Que pasa conmigo mañana? ¿Cuando mama no este, cuando este sola…cuando no quede más que un Yo, sobre la tierra?

¡Era ahí donde aparecías! ¡Donde tu me salvabas! ¿Porque te fuiste Sofí? Cuando yo te necesitaba tanto. Intento convencerme de que por algo no estas aquí conmigo, de que esto, me guste o no, es el destino…o algo por el estilo, pero como te dije… Ya no creo en nada…

Estoy bien hermana, como siempre te dije que iba a estar, me sigo cuidando, ya no hay personas que rompan mi corazón ni que me lastimen. Ahora que no te tengo soy yo misma quien se encarga de cuidarme. Llevo una vida, pienso en ti todos los días, y te recuerdo con la mayor alegría que puedo…pero en los momentos de debilidad, no puedo parar de llorarte…Espero que, estés donde estés con quien quieras que estés… estés bien, que me recuerdes y pienses en mi como yo en ti.

 Te amo más allá de la inmensidad del universo, de las distancias universales y de las creencias en esta vida…más de lo que te imaginas…

Te lloro Sofí… te lloro mucho, porque te extraño y no te tengo. Me duele pensar que no te tengo, que no te voy a poder escuchar más, que no voy a poder pelearte nunca más. Que no voy a poder retarte para ayudarte a crecer.

Te veo pronto hermana mía…Gracias por estar al lado mío desde tu muerte, porque te siento. Quédate conmigo, por favor. Hasta saber qué hacer con mi vida.

Por siempre, tu bicho.

 (Texto original de una hermana que perdió a su hermano. Escritora: Melina Ruiz Arbilla)

No diré "Te Amo" (Samuel De Luque)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora