La rubia y la pelirroja ya se están despidiendo, hasta que Temari dice
- ¡Aika, ven a cenar a la casa Nara esta noche! No es bueno comer siempre fuera, jovencita
Responde la pelirroja avergonzada
- N-no, gracias...
Temari: No estoy preguntando, estoy ordenando - le guiña un ojo a la más joven y luego se da la vuelta - Adiós, nos vemos en la cena
Aika observa a su sensei desaparecer de su vista y luego se va hacia su humilde hogar. En el camino, varias chicas pasaron junto a ella y se rieron de que ella siempre estuviera sola. Al llegar a casa, se mira en el espejo de su dormitorio y analiza su rostro cansado y sus ojeras debido a sus noches de insomnio.
Sakata Aika estaba lejos de estar bien resuelta consigo misma, no se aceptaba bien a sí misma gracias a su pasado y la falta de una madre en su vida
*****FLASHBACK****
- Kiyomi-chan, ¿me puedes contar un poco sobre mi madre?
La uchiha que siempre se negó a hablar de Jin, gracias a Takeshi que le dijo a Kiyomi que no hablara sobre la Uzumaki, se deja llevar por la mirada pura e infantil de la niña de 6 años frente a ella.
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Kiyomi: B-bueno, su color favorito era el rojo porque le recordaba al cabello de su madre - se pone en cuclillas hacia la pequeña.
El largo cabello de la uchiha se extiende por el suelo, llamando la atención de la pelirroja.
Aika: Eso es muy lindo, ¿no crees? - sonríe - ¡Quiero ser fuerte como tú y mamá!
Ese par de ojos azules conmovió a la morena que apretó con fuerza sus mejillas. La felicidad desaparece cuando Takeshi llega a casa
El moreno tenía el cabello más desordenado de lo habitual, sus ojos azules estaban vacíos, su ropa estaba sucia y desde la distancia se podía oler a alcohol. Fue triste para Kiyomi dejar a su ahijada sola con un borracho y adicto al juego que siempre llegaba a casa sin dinero ni comida porque lo gastaba todo en juegos de azar.
Takeshi: ¿Te escuché hablar sobre Jin? ¿Qué dije sobre cavilar sobre el pasado? Por cierto, ¿qué haces aquí?
La uchiha se levanta del suelo y se enfrenta al hombre que, incluso borracho y completamente desordenado, seguía siendo guapo.
Kiyomi: Takeshi-san, ¿qué crees que estás haciendo? ¿Vas a seguir dejando a Aika aquí sola? ¿Qué clase de padre eres?
El moreno se estresó y abofeteó a la morena con fuerza, dejando una marca roja en su rostro y pudiendo hacerla caer. Aika lo miró asustada, sus ojos estaban llenos de lágrimas y trató de esconderse detrás de unas cajas viejas.
Takeshi: ¿Crees que eres quién para enseñarme cómo ser un buen padre? No tenías padres, todo el mundo te odiaba y ni siquiera tenías hijos - se ríe mientras se arroja en el sofá
