La Música.

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Midoriya tomó rápidamente a Kyoka de la mano y la metió a su habitación. La pelimorada estaba fascinada por todo lo que había en su recámara pues era idéntica a como era la suya tiempo atrás. Guitarras, bajos, un piano, un teclado, una batería, etc.

Midoriya por su parte está preocupado. La pelimorada seguía fascinada por todo lo que había hasta que, de repente, el peliverde llamo la atención de Kyoka.

- ¿Te siguió alguien? - Preguntó Midoriya nervioso.

- Todos los demás salieron. - Fue la contestación.

Midoriya respiro aliviadamente para pasar a sentarse en la cama. La pelimorada estaba extrañada por lo que pasó pero, poco después, el peliverde de dirigió a su pequeño refrigerador lata darle un refresco de uva a Kyoka. Pero, al voltear, Midoriya se dió cuenta que en su escritorio estaba la computadora encendida y Kyoka estaba viendo el ordenador con un secreto que están ocultando.

- Tú eres...

Kyoka no pudo terminar lo que quería decir. Midoriya la tenía contra la pared. El peliverde estaba serio pero, por la situación en la que estaba, Kyoka estaba totalmente roja y avergonzada sin poder ocultarlo. Para ella, le parecía eterno lo que estaba sucediendo hasta que se escuchó la puerta abrir.

- Deku, pregunta Yaoyorozu si no has visto a Jiro...

El cenizo y Momo estaban ahí viendo la escena. Midoriya hizo una seña la cual el cenizo entiendo entrando junto la azabache rápidamente.

Midoriya se quitó de la pared mientras Kyoka no volteaba por la pena que sentía aunque, rápidamente, Momo fue hacia ella. Los cuatro se sentaron a platicar de forma normal y tranquila para explicar por qué los chicos hicieron lo que hicieron.

Aunque eso era la idea en un principio pues Momo sé distrajo cuando vio el librero de Midoriya. Su atención de desvío tanto que el peliverde y el cenizo les pareció tierno ver a la vicepresidenta actuando como una niña. Kyoka solamente dejo salir una ligera sonrisa.

Después de eso, ahora sí, los cuatro se sentaron a platicar. Kyoka todavía tenía su corazón acelerado por lo hecho por Midoriya y le molestaba que el peliverde estuviera tan tranquilo después de lo cometido.

- Deku ¿Seguro quieres decirles? - Preguntó el cenizo preocupado.

- No queda de otra. Creo que podemos confiar en ellas. - Respondió Midoriya tranquilo.

- Parece que son buenos amigos. - Dijo Kyoka.

- Bueno, lo conozco desde la infancia. Creo es algo natural. - Comentó Midoriya viendo a su amigo.

- Si no mal recuerdo, tú eres Bakugo. - Dijo Momo señalando al cenizo.

- Es correcto, Yaoyorozu. - Respondió Bakugo.

- Por favor, díganme Yaomomo. Y bien ¿Que querías explicar, Midoriya?

Kyoka volteó a ver a Midoriya quien se levantó para tomar su celular del escritorio. Buscaba algo en la plataforma de videos. Las chicas estaban confundidas hasta que el peliverde encontró lo que estaba buscando.

Puso su celular en la mesa con vídeo musical, solo que la cantante era una artista VOCALOID, una voz sintética creada a partir de un programa. Eso era lo único que distraía a las chicas pero los instrumentales eran lo que le daba belleza a la música. Tal vez Yaomomo no lo entendía, pero Kyoka amaba lo que estaba escuchando. Ella sabía ya lo que Midoriya quiere decir y el peliverde estaba consciente de esto.

- Jiro ¿Cierto? Anda, puedes decirlo. - Comentó Midoriya tranquilamente.

- Tu eres Aix, un compositor que surgió hace tres años. - Dijo Kyoka emocionada.

Yaomomo aún estaba confundida así que Midoriya se tomó la libertad de contarle todo acerca de alter ego. Para ellas le pareció sorprendente que él a su edad, ya tuviera algo de reconocimiento.

- Ahora que saben esto. Tengo que pedirles que lo mantengan en secreto. - Dijo Midoriya seriamente.

- ¿Por qué? - Preguntaron ambas chicas al unísono.

- Por favor. - Fue la contestación.

- ¡No! ¿Por qué? Eres alguien famoso hasta cierto punto. Muchos querrían ser como tú. ¡¿Por qué ocultarlo!? - Exclamó Kyoka.

Bakugo y Yaomomo se quedaron viendo a Kyoka después de haber confrontado a Midoriya quien se mantenía tranquilo ante lo sucedido. Sin embargo, la pelimorada se mantenía aún de pie molesta con el peliverde.

- Bien. No sé cantar. - Dijo Midoriya.

- ¿Eso qué tiene que ver con esto? - Preguntó Kyoka un poco molesta.

- Con todo. Desde hace tres años, les he ocultado a mis compañeros quién soy por ese solo motivo. No creo que lo entiendas. Pero, a juzgar por tu cicatriz en tu brazo derecho, creo que sí me entiendes.

Kyoka se sorprendió por lo mencionado. Pensaba que su suéter ocultaba su brazo, pero no recordaba que lo tenía arremangado. Momo y Bakugo igual vieron su cicatriz y comenzó a sentirse incómoda mientras Midoriya se ponía de pie.

- Eres igual que yo, Jiro. Solo que tú perdiste la habilidad de tocar instrumentos. Así que me entiendes. Por eso les pido que mantengan esto en secreto. Siempre me frustro no poder cantar mis propias canciones.

Momo, Bakugo y Kyoka salieron de la habitación de Midoriya con la pelimorada tomando su brazo derecho mientras mantenía la mirada baja con ganas de llorar.

- Lo siento por Deku. Es solo que en verdad le frustra mucho esa parte de él. - Comentó Bakugo con vergüenza.

- Creo que lo entiendo de cierta forma. - Mencionó Momo.

- Gracias chicas. Espero que pronto pueda encontrar aquello que busca. - Dijo Bakugo suspirando.

- ¿Qué estás buscando realmente? - Preguntó Kyoka.

- Una voz que lo complemente.

Kyoka estaba recostada en su cama mientras recordaba lo que Bakugo dijo. Tenía un dilema en su cabeza pues ella perdió todo a excepción de algo. Su voz. Pero, no sabía que hacer.

Al día siguiente, Kyoka estaba frente a la habitación de Midoriya. Tocó la puerta y el se asomó por la misma dando permiso para entrar.

- Siento lo de ayer. - Dijo Midoriya apenado.

- Yo también te dije cosas feas. Lo siento. - Añadió Kyoka. - Pero, hoy vengo a mostrarte algo de mí. La razón por la cual me mantengo viva.

Midoriya se sentó en la cama a petición de Kyoka quien le estaba dando la espalda. Estaba respirando profundo mientras sostenía su brazo derecho. Es como si estuviera tomando valor de su pasado para poder realizar lo que estaba a punto de hacer. Una vuelta al pasado o, quizá, una vista al futuro.

La Chica Semitransparente.Where stories live. Discover now