Fearless (dangerous Temptation) Justin Bieber 

Capítulo Final.

Capítulo Final.

Sentí que el cuerpo se me iba. Abrí la puerta de golpe y no había nadie, salí corriendo volteando a todas partes y nada. 

Me había dejado. Sí. Me había dejado. Los fantasmas regresaron. Mi mayor miedo se ha realizado. Mi Winston me dejó. 

Entré a la casa y destrocé el papel entre mis manos. 

- ¡¡Esto te pasa por enamorarte, hijo de puta!! -grité histérico. - ¡Esto te pasa por confiar en las mujeres, pendejo! Me grité. La rabia volvía a mí. La calma al estar con ella, con ella.. Desapareció. 

"Esto es lo que me gano por ser idiota enamorado" pensé. 

- ¡¿Dónde estás?, me dijiste que me amabas! -grité buscándola de nuevo. 

Subí corriendo los largos escalones a tropezones. Corrí a donde era su habitación. 

- ¡No me dejes _____! -grité desesperado al mismo tiempo que entraba y estaba vacío aquel lugar. La estaba buscando sabiendo que no la encontraría. Su ropa estaba ahí. Tomé una pequeña blusa de ella. Su aroma. Me la llevé a la cara, la olí. Empecé a sollozar… no me puede dejar. 

- ¿Dónde estás maldita gitana? -grité de nuevo. Tiré su blusa y el desesperó me carcomió por dentro. 

- ¡Que no ves que sin ti me muero! -grité desesperado. Miré su cama, tomé entre mis manos su cobija y la tiré al suelo. 

- No me puedes hacer esto mi amor... -murmuré llorando. No podía creer que estaba llorando por ella. No me puede dejar. La amo. Me ama. Nos amamos.

Salí de su habitación encontrándome con el enorme pasillo. Frío, vacío. Sin ella. 

"¿Creíste que ella se quedaría contigo? ¿Creíste que no volvería a mi?"

Sin duda me dejó. Los ojos me ardían. Los puños y nudillos los tenía a reventar. Gruñí de coraje. De un momento a otro mi puño derecho estaba en la pared, mi puño izquierdo le seguía. Me dejó, me dejó. Miré como me sangraba la mano. El dolor no era nada comparado al dolor que yo sentía, el que realmente sentía. No ella no me puede hacer esto joder no... 

Me fui directo a la oficina y agarré mi teléfono haría que la buscaran por todo el mundo si es necesario, pero ella no se iría así como así sin dar una maldita explicación. 

Joder es MI chica, MI mujer, MI nena y no la dejaría irse tan fácilmente. 

Marqué el número de teléfono que tan bien conocía. 

- Clarck - Espeté. 

- Bieber. 

- Te necesito urgente. 

- ¿Qué pasa? 

- Necesito que veas todos los vídeos de las cámaras de seguridad alrededor de la casa. Y las de la calle. Ahora. 

- Estoy tomando un avión para volver a Las Vegas. En unas 3 horas lo tengo. 

- Joder. 

- ¿Tan urgente es? 

- Si. Apenas lo tengas me llamas. Cualquier persona mujer o hombre que se vea sospechosa o que la lleven a la fuerza lo necesito. 

– Lo tendré listo.