Fearless (dangerous Temptation) Justin Bieber 

Capítulo Cuarenta y cinco.

- Porque él a mi me NECESITA, yo soy la única que le puede dar ese placer.
- No. No te mientas Lucia. Si, tu le das placer, pero eres la única estúpida que le da el placer cuando a él se le de la gana.
- Tú no sabes nada de él. 
- Si claro. – bufé.
- Ayer fue a follar conmigo ¿Lo sabías?.
- Difícil, porque estuvimos toda la tarde nosotros dos en la cama.
- HIJA DE PUTA. –gruñó.
- uhmm.. -Dije tomando un sorbo de mi bebida -
- Tómame atención cuando te hablo.
- No me interesa lo que digas Lucia. Habla, pero lo que digas no cambiará la relación que tenemos con Justin.
- Te las verás conmigo. Si te metes con Justin la pagarás caro.
- ¿Crees que te tengo miedo?
- Deberías.
La furia contenida me sobrepaso.
- Mira pequeña puta - Dije parándome de mi asiento y acercándome a ella. - No me amenaces nunca más ¿Lo tienes? Y no te vuelvas a acercar a mí. Lo que digas a mi me entra por un oído y me sale por el otro. Aléjate de mí y olvídate de Justin, porque ya me tiene a mí y a ti no te necesita. Para él tu eres la persona que ocupa mientras busca a alguien que le dé placer de verdad.

Lucia se paró de su asiento decidida a decirme algo pero se quedo como una estatua mirando a mis espaldas.
Me gire y vi la cara de culo de Justin.
Camino hasta delante de mí y miro a lucia de tal manera que hasta yo tuve miedo.

- ¿Que mierda haces aquí? ¿Qué mierda haces molestando a mi novia? ¿Qué mierda quieres de mi Lucia? -Dijo entre dientes.
La gente se había dado cuenta de la tensión que había y empezó a cuchichiar, mientras yo brincaba en mi interior. Me había llamado su novia.

- Justin, yo estaba aquí y ella llego a molestar, es una pesad... 

Y Justin dio un puñetazo contra la mesa. La gente salto y enseguida fuimos el centro de atención.

- Lo diré por última vez. -Dijo Justin entre dientes. - Te vuelves a acercar a ____ y te juro que no me importaras que seas mujer.
- ¿Y qué? ¿Me vas a pegar? -Lo reto Lucia. Entonces salí al ataque como una fiera.
- Si él no puede hacerlo te aseguro que iré a donde estés lucia, y barreré la ciudad contigo.

Entonces antes que pudiera decir algo mas Justin me tomo de la mano y nos alejamos del sitio. Llegamos al estacionamiento sin decir nada de lo ocurrido. Justin subió al auto y yo igual.

- ¿Como me encontraste? -Dije rompiendo el incomodo silencio.
- Te iba a llamar cuando de pronto vi que una chica salto de una silla y vi que eras tú.
- Entonces ¿Tenias rato mirando?
- No tanto.
- uhm...

Pasó un tiempo en el que ninguno de los dos dijo nada. Cada uno estaba sumergido en sus pensamientos. Justin rompió el silencio esta vez.

- ¿Que te dijo?
- Que la necesitabas.
- ¿Yo? ¿Necesitarla a ella?. –rió.
- Si. Que por eso cada vez que dejabas a una, volvías con ella. Ella te da el placer que necesitas.
- Esa tipa está loca - gruñó Justin. - Ella es la más fácil. Por eso cuando necesito sexo y no tengo a nadie la busco.
- Le dije eso, pero ella piensa otra cosa.
- Hablaré con ella. No quiero que se vuelva a acercar a ti.
- ¿Por qué?
- Porque se lo que es capaz de hacer. - Dijo sin despegar la mirada de la carretera.
- Ósea que es verdad.
- ¿Qué? - Preguntó Justin curioso.
- Que es capaz de hacerme algo. 
- Se puede decir que si... ¿Por qué?
- Porque me amenazó.