treinta y cinco

1.6K 183 34
                                    

narrador

.

.

.

.

.

— ¿Cómo puedes caminar tanto sin cansarte? — Preguntó la peliblanca a Ban.

El zorro sonrió malicioso de medio lado y la ignoró, para seguir caminando.

Agotada, así se veía Cersei. Los tres pecados capitales tenían menos de un día de viaje, pero ella parecía querer tirarse al suelo y rendirse. La postura de la quimera estaba un poco encorvada y su cara algo roja por el esfuerzo; aun así no dejaba de sonreír ni de caminar.

— ¿Por qué te quejas tanto? ¿No eras tú la que insistió tanto en venir? — Se burló Ban.

— No creí que fuera tan cansado... — Confesó ella, para luego voltear hacia el castaño. — ¿Tienes un poco de agua? Tal vez eso me haga sentir mejor.

El ojo naranja asintió dándole una pequeña botella de la que no tardó en beber.

— No entiendo por qué no vuelas... — Susurro con duda su prometido.

Cersei arrugó la nariz y elevó una de sus blancas cejas.

"¿En serio?" Preguntó telepáticamente.

— Es cierto. — Interrumpió Ban. — Normalmente andas revoloteando detrás de uno. — Terminó de decir con una sonrisa burlesca.

Ambos pecados voltearon hacia ella realmente curiosos.

— Si sobre eso... — Empezó, mirando hacia otro lado indecisa. — La verdad es que ya no puedo hacerlo.

King parpadeo incrédulo en su lugar, seguro de que Ban había hecho lo mismo.

La quimera por su parte volvió a tomar un sorbo de agua sonriendo divertida por las expresiones de sus amigos.


— ¿Qué? — Preguntaron Ban y King.

— ¿Qué? — Preguntó ella devuelta, tan tranquila como si no hubiera perdido uno de sus poderes.

— ¡¿Cómo que ya no puedes volar?! — Gritó King acercándose en un estado alterado, agarrando sus hombros en el proceso.

Cersei sonrió nerviosa, pero paciente, como solo ella podía hacerlo.

— Me sorprende que no sepas algo tan básico. — Admitió con mofa. — Recuerda que ya no soy un hada del agua, soy una ninfa y por ende mi cuerpo y habilidades cambian.

Explicó, retirando las manos de su amante y apretándolas con cariño, transmitiendo que todo estaba bien.

King arrugó la nariz con duda, pero antes de decir algo alguien se adelantó.

— ¿Es el único poder que perderás? — Preguntó Ban rebasándolos.

— No, realmente perderé algunos más y otros evolucionarán... Es algo difícil de explicar, pero todo estará bien. — Respondió la ojiazul siguiéndolo.

El oso hizo una mueca algo molesto.

— Debiste decirme que no podías volar, pensé que querías caminar. — Reclamó empezando a caminar tras de ella.

Qᴜɪᴍᴇʀᴀ ▸ ᴋɪɴɢ «ɴᴀɴᴀᴛꜱᴜ ɴᴏ ᴛᴀɪᴢᴀɪ»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora