El chico estaba como la vez anterior, su rostro enterrado en sus rodillas llorando profusamente, mientras el olor de su alfa se hacía bastante agrio.

—¿Puedo ayudarle en algo?

El alfa Kim dio un respingo al escuchar la suave voz que lo llamaba, se levantó con los ojos llorosos y la cara llena de mocos, daba la visión de un niño pequeño, perdido, a los ojos de Jungkook.

Se secó rápidamente la cara con la manga de su saco, esta vez de un azul cielo— Ay perdóneme, mi intención no es incomodarlo, pero es que si lloro adentro mi cachorrito se despierta y se la pasa mal humorado toda la tarde si no duerme bien— en este momento Kook caía en cuenta que lo había escuchado llorar a la misma hora de hace tres días.

—No se preocupe por eso... solo me inquieta un poco escucharle llorar de forma tan angustiante ¿tiene algún problema? — y la pregunta a los ojos de Jungkook era tonta, pero no podía evitar hacerla, sin saber si podía ayudarle o no, simplemente estaba siguiendo el instinto de su omega: Consolar y cuidar.

Una sonrisa torcida se dibujó en el rostro del alfa que decidió contestarle al suelo—Ojalá tuviera solo un problema, pero bueno, no hay que ser dramáticos, creo que me terminaré acostumbrando de alguna forma... por el momento esta situación se me está haciendo un poco compleja de llevar... trabajar, estudiar y cuidar de mi cachorrito al tiempo se me está haciendo agobiante.

—No podría decir que lo entiendo porque yo solo estoy estudiando— reflexionó Jungkook comprensivamente—¿quiere un té? estaba preparando uno, a mí me ayuda a relajarme.

El alfa sonrió, y esa sonrisa era preciosa. —Se lo agradezco.

Al ver que el alfa no se levantaba del sitio Jungkook agregó— déjeme, ya se lo traigo— y se adentró en su departamento.

Cuando salió con el pocillito en la mano se percató de que la puerta de su vecino se encontraba abierta y Taehyung ya no estaba a la vista, apretó un poco el recipiente en sus manos, lo tomó como una invitación y se armó de valor para entrar, en otras circunstancias jamás se hubiera adentrado en el departamento de un alfa desconocido, pero ahora ninguna circunstancia era "Normal" toda su vida como la había conocido hasta ahora cambió—¡Con permiso! — anunció mientras se descalzaba en la entrada del sitio. El fuerte aroma a cachorro, leche y galletas le golpeó directamente el rostro.

—¡Oh! señor Jeon, discúlpeme, es que mi bebé se despertó y se asusta mucho si no me ve— un pequeño niño de alrededor de 3 años se refugiaba detrás de la pierna de su padre— vamos vida, saluda al señor Jeon— el chiquito se encogió más detrás de la pierna de Tae— discúlpelo, es muy tímido y sobre todo con los extraños.

—Tranquilo, miré aquí le traje el té— Jungkook extendió el pocillo al alfa, que lo tomó en un gesto amable.

—"Manchanilla"— dijo el niño cuando Taehyung tomó la humeante taza entre sus manos.

—Oh gracias vida ¿quieres un poco? — ofreció Taehyung soplando fuertemente el líquido caliente. El niño negó, Taehyung le brindó una sonrisa y comenzó a tomar el té a sorbitos.

Jungkook se hubiera sentido incómodo de estar ahí parado como un idiota de no ser porque se encontraba concentrado detallando todo el caótico ambiente que veía en ese departamento, ropa y juguetes por cada rincón, hojas por aquí y por allá, no olía mal, se veía que estaba aseado, el piso limpio y lustroso, era más bien el caos de cosas que se encontraban fuera de su lugar, quizá producto de la prisa que no dejaba concluir ninguna tarea, lo único que había sucio era una mediana pila de trastos que había en la cocina y efectivamente tampoco encontró rastros del olor de un omega por el sitio.

Amortentia [Vkook] Omegaverse [COMPLETA]Where stories live. Discover now