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MADISONBEER

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madisonbeer siempre estaré eternamente agradecida de estar a tu lado, te amo.
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CAPÍTULO SESENTA Y OCHO.

Bog y yo nos encontrábamos aun recostados mirando hacia la preciosa vista de aquella montaña en la cual nos encontrábamos.

— Madison, ¿Sabes que te amo, verdad?. — Asentí con la mirada, y el sonrío para después acercarse hacia mi y dejar un beso sobre mi frente.

De verdad no hacían falta las palabras, ambos estábamos demasiado felices, y el silencio no era para nada incomodo, y para ser sincera desearía que este momento durara para toda la vida.

Ring, ring.

Un teléfono comenzó a vibrar varias veces, así que ambos sacamos los nuestros para al final darnos cuenta de que ambos teléfonos estaban sonando en un grupo de mensajes que al parecer había creado Emilio.

Mad ¿Qué sucede Emilio?
Bog Tío, estamos en nuestra cita.
Emilio Chicos, yo se que es su día especial pero necesito ayuda urgentemente, no sé como decírselos porque me da un poco de pena.

— Estoy demasiado segura de que dirá algo de Jimena, verás. — Miré a Bog y ambos reímos para después dirigir nuestras miradas a nuestros teléfonos.

Mad Vale, sácalo, nadie te dirá nada ni se burlara de ti.
Emilio Bueno, no se lo habíamos querido decir a nadie porque nos daba un poco de vergüenza como les decía, aparte no queríamos arruinar el momento de nadie y sinceramente con todo lo de Andrea también se nos hacia todo un poco pronto por Iván, pero Jimena y yo llevamos saliendo desde hace tiempo y quiero decirles que a ustedes dos siempre los envidiaba... siempre pensé y soñé en tener una pareja igual de perfecta como lo son ustedes dos pero jamás creí que la conseguiría, siempre pensé que todas las chicas me querían por mi fama, y, discúlpame Madison, pero me daba miedo de que sucediera lo mismo qué pasó con Andrea, por eso decidí ocultar un poco más mis sentimientos, pero sinceramente todo esto que estaba evitando, lo encontré con Jimena, con ella me siento yo mismo, quizás suene muy romántico o muy ridículo pero me estoy enamorando muchísimo de ella, y me emociona.. quiero que las cosas resulten, y me gustaría pedirle que sea mi novia.
Les escribía para pedirles de su ayuda, no tengo ni idea de como hacerlo y tengo un poco de miedo de que me diga que no.

Bog y yo estábamos boquiabiertos ante las palabras de Emilio, los gemelos no eran unas personas que demostraran mucho sus sentimientos y en general nunca lo han sido, por eso en el tiempo que Iván estaba saliendo con Andrea todos estábamos muy sorprendidos ante las reacciones que tenían ambos, pero bueno creo que quizá comprendo mucho la situación de Emilio y del porque tiene miedo.

— Era muy obvio que los dos se atraían, pero si te soy sincera nunca pensé que la cosa fuera tan seria o que ambos se quisieran enserio. — Desvié mi mirada hacia mi novio, el cual se encontraba prácticamente de la misma manera que yo.

El negó. — Yo tampoco pensé que ellos serian algo serio, ahorita antes de que mandara el mensaje que dijiste lo de Jimena pensé que era una broma, no pensé que fuera a ser muy enserio. — Ambos reímos.

Decidimos iniciar una llamada para no tener que estar escribiendo tanto, así que nos pasamos unos cuantos minutos conversando sobre cómo había sido que Emilio había comenzado a tener sentimientos por Jimena, y viceversa, y ambos no podíamos con toda la ternura que estábamos sintiendo por ellos.

Terminamos aquella llamada, y habíamos acordado de que por fin hoy sería el día en donde se harían novios oficialmente, o bueno eso si Jimena aceptaba, lo cual todos esperábamos que hiciera.

— Bueno, creo que es momento de volver a casa. — Hablé y mi novio me observo mientras hacía un leve puchero.

Yo reí. — Maldito Emilio, ¿No pudo elegir otro día?. — Negué, y el bufo.

— Amor, recuerda que los sentimientos que ellos se tienen son muy fuertes, y si Emilio decidió que hoy quiere que sea el día donde se unan como pareja, dejémoslos, porque si no, ¿Cuando volverá a tener el coraje de hacerlo?. — Bog asintió ante todas mis palabras, así que al final ambos nos pusimos de pie y comenzamos a recoger todas nuestras cosas, para así subirnos de regreso al auto y comenzar a conducir de regreso a casa.

Todo el camino fue perfecto, ambos cantamos, reímos, e incluso planeamos algunas cuantas ideas para la propuesta de Emilio hacia Jimena, y para ser honestos, llegamos con una infinidad de ideas que ambos creíamos que a Emilio le encantarían, pero sobre todo, estuvimos planeando también muchas maneras sobre cómo podríamos calmarle los nervios a Emilio, ya que ambos temíamos que a la mera hora se arrepintiera únicamente por el hecho de estar nervioso.

Llegamos a casa después de unos minutos, y ambos nos bajamos, caminando en dirección a la puerta, donde por fuera comenzamos a escuchar muchos gritos, así que entramos, y la primera escena que vimos nos causó mucha gracia, lo que ocasionó que Bog y yo estalláramos en risas.

— Ayuda. — Iván habló, sosteniendo una infinidad de globos y peluches sobre sus brazos apunto de caerse, mientras que Emilio le ordenaba en donde acomodar todo.

Aún riéndonos, nos acercamos hacia Ivan para ayudarlo con todas las cosas que había comprado, para así decorar un poco el jardín con unos cuantos arreglos de globos, los peluches, y un camino lindo de pétalos de rosas rojas, como habíamos planeado.

— Vale hermano, ya tienes todo acomodado, ahora solo falta que practiques las palabras que quieres decirle y ya, créeme que todo saldrá bien. — Iván miraba fijamente a Emilio, y el asentía intentando procesar todas las palabras que le decíamos.

Pasó una hora, y escuchamos el timbre de la casa sonar, e instantáneamente supimos que se trataba de Jimena así que Ivan, Bog y yo corrimos hacia la habitación de Bog, la cual tenía una ventana que daba directo hacia el jardín, para escondernos y así observar lo que sucedía.

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𝐒𝐞𝐜𝐫𝐞𝐭 𝐋𝐨𝐯𝐞. - 𝐉𝐮𝐬𝐭𝐛𝐨𝐠𝐠𝐢Where stories live. Discover now