Atrápame acosador [LeeGaa/GaaLee]

◉CAP6: Decisión de fe

– Cejotas de azotador, por cierto la abuela Tsunade vendrá a revisarte, ¡te aseguro que ella podrá ayudarte tattebayo!

– ¿En serio crees que pueda sanarme?

– Claro que si, el viejo pervertido dijo que ella es la mejor de los ninjas medico, igual va ayudar a Sasuke y Kakashi sensei.

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La emoción se aviva en su interior al ver la imponente figura de la mujer rubia que entra por la puerta de su cuarto, una de las mejores ninja medico de todo el mundo shinobi lo va ayudar, por fin esta odisea de sufrimiento se va acabar pronto. Su nerviosismo sale a flor de piel cuando el chequeo empieza, unas frías manos recorren su espalda mandado leves pulsos de chakra, causando un leve dolor que es capaz de aguantar. 

Luego le hace algunas preguntas sobre su combate, las medicinas que toma y sobre como ha ido su recuperación, Lee responde de la manera mas honesta y detallada que puede, esta de espaldas por lo que no puede ver las reacciones del rostros de la mujer cuando da sus respuestas, pero el tono de voz que utiliza le causa cierto malestar, es quizás pena lo que reconoce en aquel tono. 

– ¿Has pensado en dedicas en algo mas que no sea ser un ninja?. 

La amable mujer que había entrado a su cuarto de pronto soltó aquello con la voz mas fría que había escuchado en toda su vida logrando que su cuerpo temblara, acaso ¿ese era el fin de su camino?, la impotencia recorría hasta el ultimo de los rincones de su ser, se había esforzado para nada, todos aquellos días que dedico a su cuerpo fueron echados a la basura como si nada.

– No le hagas caso Lee —la voz de su sensei se escucha tan lejana, aun no asimila todo lo que le esta pasando, con aquella declaración sus ultimas esperanzas se han marchitado— ella no puede ser Lady Tsunade, seguramente es una impostora. 

– Como se atreve hablarle así a de Lady...  —la mujer detiene a su asistente, mientras ve aquella "ridícula escena", según ella.

– Escucha bien esto Lee, prometo encontrar a la verdadera Lady Tsunade y ella te ayudara, te lo juro mi adorado pupilo. 

– Gai escuchame bien, tu muchacho tiene mucha suerte de siquiera poder aun caminar, varios de sus huesos están casi hechos polvo y ni que decir del estado de su columna, deja de meterle falsas esperanzas a este chico.

Ambas mujeres salen de cuarto dejando a maestro y alumno solos, muy a pesar de la manera poco empatía que tuvo la rubia para hablar, se siente mal por aquel muchacho, pero debía dejarle las cosas claras, darle ilusiones no iba a sanarlo. 

El silencio es incomodo, Gai no sabe como animar a su pupilo, ¿que podía decirle?, cualquier cosa que salga de su boca podría ponerle peor de lo que ya esta, si tan solo hubiera intervenido antes. El crujir de la cama y el sonido de sus pies arrastrándose retumban en la habitación, Lee quiere salir de ahí y tomar un poco de aire, memorizar cada rincón de Konoha, a sus  habitantes y paisajes únicos, por que apenas se fuera de esa cárcel blanca tendrá que irse a otro lugar.

Las hojas de los arboles danzan ligeras con el suave viento, el sol aunque algo caliente se siente agradable al contacto con la piel, ¿porque ahora todo se siente como en un sueño?. Camina entre la multitud de personas que simplemente lo esquivan, así que el piensa que solo es una insignificante persona mas entre el montón, jamas tuvo algo especial, ni nada que lo ayudara a resaltar de manera positiva.  

Con forme sigue avanzando el sonido del pueblo se hace menos molesto, pronto llega a una zona mas verde y tranquila, respira profundo llenando sus pulmones en aquel aire tan natural, a comparación del del hospital, aun así continua, adentrándose en el bosque hasta la alguna zona que parece ser un claro, donde en medio se encontraba un tronco desgastado por todos los lados.