El Aquelarre Del Emperador.

Yesterday.

Los chicos se levantaron de la mesa, y  subieron al cuarto de Amity.

— Lo siento Luz —dijo Edric apenado— mamá se pone un poco pesada a veces — Luz estaba seria y caminó hacia a la ventana.
— Nosotros ya nos acostumbramos —dijo su melliza— pero hoy estuvo más extraña, discúlpanos Luz nosotros...
— Emira —interrumpió Amity tranquila, mientras Luz miraba el exterior— creo que Luz no quiere hablar de eso ahora... 
— ¿Hay algo que podamos hacer por ti? —le preguntó Edric empático, ella se volteó.
— Gracias chicos —decía sonriendo— pero estoy bien, vendrán por mi en media hora creo
— Si necesitan algo estaremos en frente, en nuestras habitaciones —dijo Emira, y ambos hermanos salieron dejando a una Luz pensativa y a una Amity preocupada, a solas.

— Luz...—Amity toco el hombro de Luz para que volteara y la viera— ¿Todo bien?
—Si Amity todo bien... —decía quitándole su mano de su hombro, Amity se molestó por aquel gesto.
— No Luz... —hablo con firmeza y el ceño fruncido—, no puedes seguir fingiendo que estás bien, no me gusta cuando sonríes así porque sé que no estas bien —dijo un poco exasperada
— Bueno y entonces si sabes que no estoy bien ¿Qué piensas hacer? —preguntó elevando su tono de voz—, si cuando tu mamá me habló así tú no dijiste nada, ni siquiera me miraste, ni la mirabas a ella
— Luz... lo siento, yo tampoco sabia que decir es... difícil de explicar cuando se comporta así, creo que no lo entenderías
— No supe si tu mamá trataba de burlarse o que trataba de decir, ¿Eso que dijo al último que fué?, ¿Qué significa?... "deben escoger a alguien digno desde temprana edad"—dijo haciendo comillas en el aire—, quiso decir que acaso ¿No soy "digna" para estar contigo? o ¿Algo así? 
— Ya te dije que no sabia que decir —respondió seriamente—, no dijo que no eras "digna", exactamente, o... no lo sé —luego se confundió al tratar de recordar lo que había dicho—, yo estaba igual de confundida que tú, y además, ¿Cómo voy a saber si te sientes mal cuando no me lo dices?, ni siquiera quieres contarme que es lo que ocurre en tu vida, como tu problema con Belos y la dama búho...
—Lo mío es complicado, tú tampoco lo entenderías
— ¿Lo ves?, yo quiero saber que tienes, te lo estoy preguntando y ahora lo estás evadiendo, estás haciendo lo mismo que en la biblioteca... —Luz frunció el ceño.
— ¿Cuál lo mismo que en biblioteca? —preguntó confusa.
—Parece que cuando me besas o estás conmigo lo haces para olvidarte de esos problemas, en vez de que me expliques y pueda ayudarte en algo —Luz se asombró por lo que Amity creía y se calmó un poco.
—No Amity, no estoy contigo para ignorar lo que estoy pasando, para mi estar contigo es como un respiro...
— ¿Un respiro? —pero Amity seguía malinterpretando— ¿Por eso estás conmigo? ¿Por qué soy como un descanso para ti?
—¡No! ¡No quise decir eso! —gritó asustada—No eres un "descanso", es solo que no quiero hablar contigo de eso. Además; ¿Cómo piensas ayudarme si ni siquiera dijiste algo hace un momento? ¿Cómo puedo contarte que esta ocurriendo? O ¿Cómo puedes ayudarme en algo?, si desde hace un momento te quedaste callada, yo me sentí como encerrada y confundida con lo que me preguntaba o decía tu mamá —Luz al recordarlo se puso triste—, y no le dijiste nada para que dejara de hacerlo... 
— No dije nada porque también tenía miedo de decir algo equivocado y que tal si se enojaba después conmigo, no la conoces así, o que tal si ambas mal interpretamos lo que dijo
— Pues me hizo sentir un poco mal lo que dijo... no creo que yo lo haya malinterpretado 
— No creas que no se lo que sentiste, es muy confuso cuando habla o se comporta así, no sé que intentaba hacer o a donde quería llegar con sus raras preguntas, si así te sentiste tú hace unos minutos, imagínate como me siento yo o mis hermanos que vivimos bajo el mismo techo, a veces nos confunde, hemos peleado incluso los tres por eso. No sé que era lo que trataba de hacer...
—Tu mamá solo se preocupó por ti, y con quien sales, eso era todo lo que trataba de hacer porque tú si tienes quien se preocupe por ti —Luz sentía un poco de envidia por Amity que tiene a su madre y Amity se indignó por lo último que dijo.
—¡Yo me preocupo por ti Luz! —exclamó— y apuesto que Willow, Gus o Steve también lo hacen...
—Pues si lo hacen, pero si dices que te preocupas por mi no entiendo porque tú no dijiste nada
—¡No me estas escuchando! Hace rato dijiste que te gustaba escucharme pero no estas prestando atención a lo que digo. No es fácil y no pienso continuar hablando, mas bien —corrigió—, discutiendo sobre esto, ¿A donde quieres llegar tú?
—Creo que si no pudiste decirle algo ahora, entonces ¿Qué nos espera?; ¿Va a ser así siempre? ¿Cuándo venga contigo o tus padres nos vean juntas?
— No lo sé —dijo rápidamente— pero creo que a mi papá le caíste bien —habló como convenciendo a Luz de que las cosas podrían estar bien.
— Tu papá fue amable conmigo, pero aun así creo que ambos no quieren que este contigo porque soy una humana... —pero Luz sonaba para Amity como si estuviera hablando con pretextos.
— No Luz —interrumpió—, eso no tiene que ver, a mi no me importa si eres una humana... —Amity hacía lo contrario, poniéndo lo que parecían "pretextos" a un lado.
— Pero a tus padres sí, además, al inicio de conocernos a ti te molestaba que yo fuera humana y me lo recordabas cada vez que podías...
— Pues perdóname —interrumpió al momento— Estaba equivocada contigo, te juzgué mal porque en verdad no tiene nada de malo que seas humana —los "peros" de Luz alarmaban a Amity.
— Yo te perdono Amity, pero no puedo tolerar que tu mamá haya sido así y tampoco voy a hacerlo si lo hace en un futuro
— ¿A que te refieres? —y la duda en ella comenzaba a florecer— Estás hablando como si no quisieras estar conmigo
— Yo si quiero estar contigo
— Lo que dices hace parecer lo contrario —dijo secamente.
— ¡¿Porqué lo dices?! Ahora yo me siento confundida, estas comenzando a hablar tú de esa forma
— Estas poniendo peros para estar conmigo —Amity se sintió insegura.
— Pues busquemos una solución
— ¡¿A qué?! No hay nada que solucionar, ella es así, no se puede discutir con ella —gritó.
— Pues... pues no sé, creo que tus padres no aprueban que esté contigo
— Sigues sonando como si no quisieras estar conmigo... —y no quería verse como la débil— y si no quieres estar conmigo entonces ya vete.