El Aquelarre Del Emperador.

I Can Change

"¡¡¡Mamiiii acabo de recordar como suena tu voz!!!
¡¡¡Pude recordar tu voz de nuevo!!!
Estoy muy feliz porque cada vez me siento más cerca de ti, de saber cómo volver a ti... aunque para serte sincera me está gustando estar aquí, debe ser porque apenas pude conocer que había en este mundo, pero si hubiese una manera de volver contigo la tomaría enseguida... aunque, vería si de alguna manera pudiese escoger en que momento irme, para pasar unos buenos días con mis amigos si no pudiese volver... aunque también siento que extrañaría mucho a todos... a Amity... ella me gusta mamá... pero aún no se que ocurra después, entonces no me preocupare por ahora sobre dejarlos y voy a disfrutar todo el tiempo que esté aquí con mis amigos."

(...)

"¡Mañana será un gran día!
¡Vamos a ir a la feria "Bonesborough"!
Deseame suerte mami, porque voy a hacer que Amity y Willow tengan que convivir para que vuelvan a ser amigas."

Luz avisó a sus amigos que irían a la feria de Bonesborough por Penstagram.
Su día estaba llendo bien, en su clase de hechizos estuvo con Gus, ambos aprendían a usar el hechizo de levitación que Luz tanto ansiaba aprender algún día "Todo será más fácil ahora..." pensó, pero no le fue muy bien, pues al intentar hacer levitar su cuaderno; este apenas y pudo dar un brinquito, a Gus sin embargo, le salió casi a la perfección al hacer levitar el suyo, y esta vez; Luz recibió ayuda de su gran amigo.
La última clase, la de abominaciones, la tomó nuevamente con Amity, y aunque esta vez pudo adaptarse mejor con su profesor para prestar atención y trabajar, aún le costaba un poco de trabajo resistirse a voltear a ver a Amity.
Parecía que cada día se veía más linda que el anterior.
Y Amity, aún no encontraba el punto medio para poder concentrarse teniendo a Luz cerca de ella, ya de por sí hace algunos días sus notas empezaban a bajar tan solo unas décimas, por las cuales ya tenía problemas con su madre.

Salieron de clases y en su camino a la casa búho Willow mantenía su conversación con Gus, haciendo que Luz y Amity hablaran el resto del camino juntas. Gus y Willow le lanzaban miradas de complicidad a Luz de vez en cuando, poniéndola un poco tímida.

— ¿Una feria? —preguntó Eda con aires arrogantes— las ferias son para los tontos
— ¡Eda, hay que ir! —imploraba King con la mirada más tierna que tenía.
— Olvídalo King, ¿Qué es lo que vamos a hacer allá?, ¿Jugar? ¿Subirnos a las atracciones?
— Suena divertido...
— Tú no tienes la altura para subirte a los juegos —King tristemente agacho la cabeza.
— Podemos ayudarlo —abogó Willow por él.
— Piénsalo... —pero King insinuó con voz cantarina—, tú lo has dicho; hay tontos en las ferias, hasta podrías... no sé... hay mercancía de la semana pasada...
La cara de Eda cambió un poco.
— Está bien King... —y fingió desinterés — tú ganas... ¡Vayamos a la feria! —exclamó.

Eda se adelantó con King en su palismán, dejando a los chicos ir a pie.
Willow y Gus hacían que Luz hablara solo con Amity, pero Luz comenzó a incluir a todos en la conversación, hablando más con Gus sobre su clase, pensaba que si dejaba de hablar con Willow y Amity; ellas se verían en la "obligación" de hablar, pero eso no  sucedió, porque no se dirigieron la palabra en todo el camino.

— ¡Mira eso Luz! —señaló Gus extasiado al ver un puesto en la entrada— ¡Un negocio de cosas humanas! ¡Vayamos a verlo!
— ¡¡¿Cosas humanas?!! —Luz se preguntó que harían ese tipo de cosas ahí y siguió a Gus.
— ¡Wow, Eda! ¡¿Cómo sacaste estas cosas de mi mundo?! —dijo Luz al reconocer la basura humana que Eda vendía, quien se puso nerviosa al ver a Luz.
— Demonios ¡Lo olvidé! —susurró para si misma evadiendo su vista de Luz— Ya te lo he dicho niña —luego se dirigió a ella—, esto es basura de las babosas —dijo Eda ansiosa, pero Luz contempló con más atención su basura.
— Eda, esta basura luce mejor que solo basura de babosas... ¿Estás ocultando algo sobre tu teoría de alguna forma de ir al mundo humano?
Eda se resignó y creyó que tal vez podía hablarle un poco sobre aquello a Luz, "modificando" la verdad... solo un poco.
— Esta bien niña... —soltó un suspiro— Tú ganas, no te quería contar porque no quería darte falsas esperanzas —y Luz la miraba con un poco de desconfianza e intriga— pero tenía una manera de entrar y regresar del mundo humano...
Luz y los chicos jadearon de sorpresa, se sorprendieron tanto al oír aquella respuesta, sobre todo y principalmente Luz ¡¡¿Por qué a Eda se le ocurrió mencionarlo hasta apenas?!!...
— ¡¡¿Y porque no me lo dijiste desde un principio?!! —preguntó Luz indignada.
— ¡Oye tranquila!... Dije que no quería darte falsas esperanzas. Antes de conocerte el portal que tengo para ir y venir se rompió
— ¡¿PORTAL?! —la explicación de Eda confundía a Luz aún más.
— Escucha... el portal se rompió cuando te dije que creía tener una teoría sobre si podías volver porque tampoco sabía si confiar en ti para hablar sobre eso. Aún no sé como repararlo y sigo sin saberlo —Luz se sentía indignada, confundida y a la vez un poco esperanzada, porque ahora confirmó que existe una manera de volver, una que siempre había existido...— por eso no quería darte falsas esperanzas, te pregunté cosas sobre ti porque pensé que tal vez tú o tu emperador podrían saber algo. Ese portal lo usaba para ir y venir de tu mundo por basura humana para vender. Mandaba a Owlbert allá...
— No se que decir —Luz se quedó absorta, los chicos solo la miraban.
— Como sea, aún tengo esta basura y necesito venderla, tengo una casa demonio, y este otro demonio que alimentar —dijo señalando a King.
— Si, pero no me gusta lo que haces de comer Eda —Eda miró a King frunciendo el seño mientras lo señalaba.
— Vuelve a juzgar mi cocina y pagarás alquiler ... —advirtió.
— Bueno... —Willow quería decir algo para apoyar a Luz— Al menos ya sabemos que existe una posibilidad de hacer que regreses... —dijo con un tono de voz comprensible que quizá apaciguó un poco a Luz, pero a Amity... la hizo sentir mal momentáneamente, aunque no fue su intención.
— ¿Puedo verlo? —preguntó Luz a Eda, quien se puso aún más nerviosa, porque no era del todo cierto lo que dijo...
— No te lo puedo mostrar porque está en lugar seguro, lo escondí hasta que sepa cómo repararlo...
— Está bien —aceptó Luz fríamente —, pero necesito verlo algún día, aunque no esté reparado —Amity vió que Luz se había emocionado en vano y le dijo:
— Luz, vayamos a las atracciones... — Luz le regresó una sonrisa, aunque forzosamente—... y cuando terminemos de divertirnos podemos conversar sobre que pudo haber reparado tus memorias
— Bueno, vayamos chicos... —cuando Luz lo propuso Eda soltó un resoplido del alivio.
— ¡Luz, llévame contigo! —imploró King, y Luz lo cargó.
— ¡Vayamos a los juegos! —exclamó alegre.