"aaaaahhhh..."

"aaaahhhhhh...mmmmhhhhh..."

"Rey...."

"Reeeeyyyyy..."

"Gime princesa gime...."

Se aparta un segundo y sube a mis labios para atacarme con sus labios.

Sus dientes muerden mis labios, mi lengua, puedo saborear un sabor metálico entre los dos y no se si es la sangre en mis labios o mi sabor de mis otros labios.

Rey tal vez piense que soy una vírgen tonta que no se nada de anatomía, pero se sorprendería si le dijera que me tocaba e intentaba brindarme algo de placer mirando a escondidas pornografía dura.

Pero nunca conseguí sentir lo que ahora siento bajo sus manos.

Es tan intenso, mis pies brincan cada vez que su lengua me lame, de arriba a abajo.

Cada que su boca aprisiona mi punto dulce, mis piernas brincan inconscientemente.

Mi corazón se acelera, abro la boca y jadeo por aire, como si fuera un pez que acaban de sacar del agua.

Los sonidos que produce contra mi piel me encienden, avivan mi placer, Rey también gime, hace algo como "mmmmhhh..."

Escucho y veo como su lengua sube y baja por mi parte sensible y entonces Rey para y me sonríe diabólicamente.

Me siento afortunada de tener mi primera vez con este hombre tan guapo y atractivo.

Tan malvadamente bello, tan posesivamente sádico.

Tan perversamente delicioso que sabe dar placer el bastardo...

Sabe que esta para comérselo el cabrón.

Yo lo haría, en circunstancias normales lo habría intentado al menos.

Me había acercado sin muchas esperanzas a hablar con él, solo para pedirle la hora o tal vez preguntarle alguna tontería para poder escuchar su grave y sexy voz.

Esa voz que ahora me dice "ssshhhhh" porque siento que esta introduciendo su dedo del medio en mi, pero solo a la mitad.

"Relajate princesa, será mejor si te relajas, no sentiras dolor..."

"Si sientes dolor disfrutalo también, sin dolor no hay placer..."

Me besa en los labios lamiéndome las comisuras como si lamiera un helado que esta a punto de derretirse y eso soy, soy un helado derretido en las manos del niño mas guapo de la heladería.

Quiero ser comida, quiero que me coma...

"Pero solo lo introduciré a la mitad, porque tu sangre quiero que manche mi miembro y después degustarla."

"Es tan cálido adentro de ti, tan suave, tan apetecible."

"Me darás mucho placer princesa, mucho placer..."

Sus palabras me hacen entrar en calor, una oleada salvaje me recorre desde el cuero cabelludo hasta mis dedos de los pies.

Rey prosigue mirando mi entrepierna, suave, resbaladiza y abierta totalmente para Él.

"aaaahhhhh... aaaaayyyyyy..."

"aahhhhhh..."

"Así pequeña, más, vamos tu puedes, dame tu dulzura interna, necesito de ti, tengo sed de ti..."

Sus manos se unen y me dan placer en conjunto, su dedo entra en mi y sale despacio, luego rápido, su pulgar empuja dentro la barra en mi, su otra mano recorre con fuerza mis senos.

Dulce JuguetitoWhere stories live. Discover now