Pepero Day ¬ NaKook

¬ 04

Al día siguiente~

Caminando como si intentara ocultarse de alguien, NaYeon pasaba por el montón de alumnos con la cabeza gacha, esperando no encontrarse con Jeon, y revivir la vergüenza que pasó.

Esta mañana su cabello amaneció esponjado, debido a que olvidó secarlo cuando se fue a dormir, por lo que hoy era un perfecto martes para llevar gorro al colegio.

— Buenos días, mi amor — Oyó detrás suyo.

Volteó, y a sus espaldas, yacía su mejor, y tal vez, única amiga.

— ¿Qué onda el gorro? — Preguntó juguetona.

— No hablemos de eso, por favor, Jeong, no tienes una idea de las ganas que tenía por faltar hoy — Admitió, comenzando a caminar junto a la peligris.

— ¿Y por qué no lo hiciste? — Inquirió.

— No soy como tú, que falto cada vez que quiero, por cierto, ¿por qué no viniste ayer? — Acusó.

— Oh, es que estuve leyendo un libro, y cuando terminé eran las cuatro, así que decidí quedarme — Explicó tranquilamente.

— A veces te envidio — Admitió, abriendo la puerta de su casillero.

— ¿Por?

— Es que tu eres tan inteligente, y eres bonita, y tan popular, y yo... Pues ni al caso, soy tu amiga — Confesó, sacando sus libros de geografía.

— Creo que el gorro le quita el oxígeno a tu cerebro — Bromeó, dándole un leve golpe en el hombro — Solo necesitas algo de autoestima, tu eres realmente hermosa, todo está en encontrar tu propio estilo — Menciono, guiñandole un ojo.

La castaña iba a protestar, cuando sintió un peso en su espalda, el cual la hizo tambalear; y probablemente hubiese terminado en el suelo, de no ser por Jeongyeon, quien rápidamente la sujetó del brazo.

— Ten más cuidado, idiota — Bufó la peligris, mirando mal al contrario.

— Lo siento — Pronunció éste.

Im giró su cabeza, alcanzando a ver solamente la espalda de quien cayó sobre ella, pues este al salir corriendo, evitó que le vea.

— ¿Que ridículo usa el cabello rojo en estos días? — Pronunció Yoo, regresando a caminar.

— ¿Ah?

— Aquel chico, tiene el cabello de rojo, ¿acaso no sabe que el rojo ya pasó de moda? —Argumentó, entrelazando su brazo con el de su amiga.

— A mi me gusta el rojo — Contradijo la mayor.

— Bueno, si pero- olvidalo — Concluyó el tema — ¿Hoy quieres salir a caminar?

— ¿No deberías estudiar? Dentro de poco se acercan los exámenes finales — Recordó.

— Nah, con este cerebro no necesito estudiar — Presumió, riendo al final.

NaYeon rodó los ojos, y los fijo en el patio por donde pasaban, entre el montón de alumnos, distinguió la cabellera roja de la que habló su amiga, por lo que intentó verlo mejor, tal vez y conocía quien era.

Y bueno, él destino quizo que si lo hiciera.

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Nimin_36