𝑠𝑖𝑥𝑡𝑒𝑒𝑛

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16   Para nuestra historia no hay segunda parte...



ESTELA;


Me pasé todo el día sin salir de mi habitación metida en mis redes sociales, espiando las cuentas y vidas de otros.

-Estela, necesito que te vistas formal hoy-Mi padre entra a mi habitación

Me ha parecido raro.

—¿Para qué?—Digo girando mi cabeza hacia él

—No hagas preguntas, vístete ya, te quiero abajo en veinte minutos

Asiento con la cabeza y sale de la habitación.

Me levanto rápido de la cama dirigiéndome a mi armario.

Escogí un vestido rojo muy bonito que me llegaba por la mitad del muslo, ajustado al cuerpo dejando ver mi figura. No es mi estilo pero mi padre me obligaba ponerme cosas así para una reunión formal o algo parecido. Me maquillo lo más natural que pude, me dejo el pelo liso y me pongo unos tacones altos negros.

No creo que dure tanto tiempo con esto puesto en los pies.

Bajo las escaleras, mi padre estaba esperándome ya listo en la puerta de la entrada.

—Estás hermosa—Me sonríe de lado

—Gracias—Asiento con la cabeza, sonriéndole


Me bajo del coche de mi padre, al igual que él después de aparcar.

Nos dirigimos hacia el restaurante.

—¿La mesa veinticuatro?—Le pregunta mi padre a una camarera

La chica señala hacia la mesa.

Giro mi vista hacia aquella mesa.

¿Que hace Tomás y su madre aquí?

Nos acercamos a la mesa, yo iba detrás de mi padre.
No quería que me viese, aunque lo iba a hacer.

—Buenas noches—Dice mi padre cuando se asienta junto a la madre de Tomás, Teresa.

—Buenas noches—Murmuro yo sentándome al lado de Tomi, no tenía de otra

Me aparté un poco, mirándolo de reojo, pero me cogió de la cintura acercándome más a él.

Joder.

Lo miro extrañada. Le doy un manotazo a su mano para que se quítese de mi cintura pero fue imposible, apretó más el agarre.

Me cruzo de brazos y miro hacia otro lado.

—Que bueno verte, Alethse, hace tiempo no te veía, has cambiado mucho—Teresa parecía sorprendida al verme

—Gracias, Tere, un gusto verte de nuevo—Me rio amablemente

—¿Has visto que bonita pareja hacen estos dos?—Le pregunta Teresa a mi padre

Me puse pálida.
¿Pero de que va?

Miro a Tomás que miraba a su madre con una sonrisa divertida. Dirigió su mirada a mí y mordió su labio. Ruedo los ojos y noto su aliento en mi cuello.

—No hagas eso—Plantó un beso ahí

Lo aparto bruscamente de mí y me alejo de él otra vez.

Mi padre y su madre hablaban animadamente, sin prestarnos atención a nosotros y eso me preocupaba.

Una cálida mano noto encima de mi muslo, miro hacia mi pierna encontrándome con la mano de Tomi. Da un leve apretón haciendo que me sobresalte. Sube la mano lentamente, la mete dentro del vestido haciendo que me alerte.

—Voy al baño—Aviso levantándome de aquel sofá

Abro la puerta del baño, fui a uno de los lavamanos y me miro en el espejo.

Otra vez me salía sangre.

Me lo limpio con un trozo de papel que había allí y lo tiro a la basura. Miro otra vez en el espejo y justo noto algo o alguien mejor dicho, detrás de mi.

Miro a través del espejo...

—Tomás

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¿Maratón? ¿Hay maratón?
Salee

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LÁGRIMAS DE CODEÍNA ☆ Trap Arg.Where stories live. Discover now