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"Claro, con mucho gusto" dijo la cajera con una sonrisa. Los clientes se despiden con una sonrisa.
"Hija, vamos" dijo el padre de la niña. Quien estaba mirando confundida a nuestra protagonista, escondida detrás de unas plantas del restaurante.
"¿Por qué te escondes?" dice la menor.
"Me escondo de alguien" dijo "Así que haz silencio".
"¿De quien te escondes?" pregunta.
"De una persona" dijo ya irritada.
"¿Quien es esa persona?" la joven mira a la menor con fastidio.
"Haces muchas preguntas, eh" dijo mirándola "Mejor ve con tú padre" dijo para desviar la mirada.
"Mi mami me dio esto" dice mostrando un peluche.
"A mí que me impo..." alarga un poco la palabra, pero su voz iba desvaneciendo. El peluche, era como el de que su madre le regaló a ella. La joven no apartaba la mirada del peluche.
"Hija, vamos" dice su madre, la joven eleva su mirada, mirando a la mujer. Está sonreía con la mano extendida hacia su hija. "Quiero volver a ve su sonrisa" se dijo así misma. La niña voltea a mirar a su madre.
"Si mami" dijo con una sonrisa. Agarra la mano de su madre. El padre agarra la otra mano de la menor mientras reían.
____ los miraba irse muy felices.
"Oye" dijo la cajera que estaba a su lado "¿Estas bien?" pregunta. Ella solo asiente.
"Supongo que si" dijo. Y entonces reacciona "Oye... ¿Los de la mesa 5 ya se fueron?" pregunta.
"No, aún no" _____ maldice en sus adentros "¿Por qué?".
"Por nada" dijo para salir de su escondite.
"Oye, te quedarás para cerrar el restaurante" dijo la madrastra de _____. Está ya estaba lista para irse.
"¿Quien, yo?" dicen las dos al mismo tiempo mientras se señalaban a ellas mismas.
"No, tú no" dijo "Ella" señala a su hijastra "Te quedarás" y sin más que decir, se fue.
"Maldita perra..." ____ empieza a maldecirla un buen rato... "Jodese" dijo al final.
"Vaya, hasta el padre nuestro le dijiste" dijo su compañera cerrando la caja.
"¿También quieres que te rece el padre nuestro?. ¿Eso quieres no?" dijo con el ceño fruncido.
La joven solo la miraba.
"Buenas noches, ¿Cuanto sería todo?" dijo el hombre que estaba en la mesa 5.
"Mierda" pensó y se volvió a esconder detrás de aquellas plantas.
El hombre ya la había visto y con la ceja arqueada ríe.
