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☀Capítulo 26: Borra mi número. ☀

— Oh... Casi lo olvido — Chasquea su lengua, dándose la vuelta de nuevo y se acerca a mí — Puede que hoy venga uno de nuestros chicos y quizás te ayude con los animales — Avisa y se va. Asiento nuevamente sin prestarle mucha atención.

Sin dejar de jugar con el gatito siento como mi teléfono comienza a vibrar en mi bolsillo trasero, dejo al pequeño en el suelo y me coloco de pie para contestar la llamada. De seguro es Nam, así que contesto sin mirar el número.

— ¿Qué quieres, estúpido? — Pregunto tajante y escucho una risilla familiar al otro lado de la línea, causando que mi corazón se descontrole.

No tú, no ahora.

— Quería saber qué haces y como sigues... — Contesta mi pregunta tratando de contener las risas... Este idiota.

— Estoy bien. — Me apresuro a responder de forma cortante, tratando de no sonar nerviosa.

— ¡Me alegro! — Exclama en un tono sincero y feliz.

Escuchar su voz tan animada, causa un vuelco en mi corazón. Creo que no debería tratarlo tan mal, él es muy dulce y... ¡¿Qué demonios estoy pensando?! ¡Heesook, ubícate! Es un idiota.

— ¿Cómo tienes mi número? — Inquiero hostil.

—  Al parecer no recuerdas que yo mismo agende mi numero en tu teléfono e incluso me escribiste para que te enviara la dirección de mi casa — Responde, riendo jocoso. Tapo con una mano mis mejillas sintiendo como empiezan a arder, sin aun entender porque me sonrojo.

Mierda... Tiene razón, el idiota se agendo como "Mi dulce y sexy compañero" 

— Borra mi número. — Demando aturdida.

— No, lo hare. — Se niega divertido. ¿Acaso se está burlando de mí?

Aprieto con fuerza mi celular, aguantando las ganas de insultarlo y decirle lo imbécil que es. Heesook, mejor respira y cálmate, recuerda que eres una damita y las damitas no dicen malas palabras.

— Hazlo, sino quiere que te dé una buena paliza. — Amenazo, frunciendo mis labios molesta.

— Puedo soportarlo, si es de ti, puedo soportar lo que sea — Bromea tratando de sonar meloso y enfurecerme más. Esas palabras de mierda hacen que mi sangre hierva, esto es tan molesto, él es tan molesto, simplemente lo detesto.

¡Ash! ¿Desde cuándo tenemos tanta confianza como para que se juegue de esa forma conmigo? Oh, mierda, Heesook, dormiste no hace mucho sobre su pecho.

— Aunque... pensándolo bien, yo puedo darte mi celular para que tú misma te encargues de borrar tu numero — Dice aun con ese tono que tanto me irrita. Giro los ojos y soplo mi flequillo, el cual también ya me está molestando — Pero debes salir conmigo — Agrega luego de unos segundos de silencio.

Juro que lo voy a matar... Oh, idiota no sabes con quien te estás jugando.

— No puedo. — Espeto en un tono seco.

— ¿Por? — Cuestiona como un niño pequeño.

— Porque no. No tengo porque explicarte — Ruedo los ojos de nuevo y le explico molesta.

— Cierto, no tienes porque, ¿Entonces...? — Pregunta, insistente.

Ya me estoy alterando, mi poca paciencia se está agotando y antes de que le diga algo hiriente, de lo que me pueda arrepentir luego prefiero simplemente aceptar, además ¿Qué tanto? Solo saldré con él y borrare mi número, eso será todo.