59. Un corazón pa' dar amor

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-Hola, preciosas-saludó a las gatas mientras soltaba la maceta y su chaqueta sobre la encimera que dividía la cocina del salón-. ¿Os habéis portado bien?

La única respuesta que recibió fue un maullido por parte de Luisa, desde el respaldo del sofá en el que estaba tumbada junto a Queen, y a pesar del hambre que arrastraba se acercó a acariciarlas a ambas antes de hacerse algo para comer. Y también antes de eso les hizo una foto a las dos durmiendo sobre el respaldo, cabeza con cabeza, y la subió a las historias. Le habría gustado pasar la tarde tirada ahí con ellas sin hacer nada, pero era cierto lo que le había dicho a Natalia de que quería aprovechar para hacer la limpieza semanal y tuvo que conformarse con los veinte minutos que tardó en acabarse la ensalada que se había preparado. Veinte minutos que en cualquier otra persona quizás habrían sido quince, o incluso diez, pero en ella no.

Se cambió a un chándal viejo y el pelo recogido con un pañuelo y se puso manos a la obra, agradecida, como lo estaba siempre en esos momentos de limpieza a fondo, por tener un piso tan pequeño que en realidad requería mucho menos trabajo del que podría requerir una limpieza profunda. ¿Que era mucho para lo poco que le apetecía? Sí, pero al menos en apenas dos horas estuvo ya duchada, con la casa limpia y tumbada en el sofá para, ahora sí, poder descansar. Y en algún momento de ese dejarse descansar, con Queen hecha una bola sobre su barriga y Luisa jugando con la funda del sofá que colgaba hacia abajo, debió quedarse dormida sin darse siquiera cuenta. Incluso cuando las patas de la más pequeña la despertaron, paseando por su costado, tardó lo suyo en darse cuenta de que se le había caído el móvil al suelo por dormirse mientras lo usaba, igual que tardó en procesar, al desbloquearlo, que le habían dado las ocho de la tarde y que Natalia le había escrito varios mensajes desde que se había quedado dormida.

natus

albus
estás en casa?
no creo que me quede más de media hora por aquí, voy para allá o sigues de limpieza?

Se rió el leer ese primer mensaje que le había llegado, hacía ya cerca de una hora, porque llamarla Albus era la manera de la fotógrafa de picarla. Se lo llamaba por imitar el apodo de Natus que usaba la pediatra, pero claro, Albus sonaba a Albus Dumbledore y eso a un señor barbudo y arrugado que igual tenía trescientos años y vestía con túnicas, y Alba siempre se quejaba de que la llamara así. Y precisamente por eso sabía que era su manera de devolverle lo que había hecho la rubia en el metro, y tuvo que reírse al verlo porque tenía que querer a una persona cuya mayor maldad se basaba en usar un apodo tonto. Se mordió el labio y siguió leyendo el resto de mensajes, los que le habían estado llegando durante los últimos diez minutos.

natus

aaaaaaaaaalbus
albi
tierra llamando a alba!!!
qué cerda de limpieza digo yo pero si estás dormidísima fijo
las gatas en el respaldo y tú tumbada manchando el cojín de babas
como si lo estuviera viendo
vaya siesta qué envidia

JAJAJAJA huy
puede que sí que estuviera durmiendo

HOMBRE HOLA BUENOS DÍAS

JAJA buenas tardes
estás viniendo para acá?

me he tomado esa libertad
te importa?

me parece estupendo nunca te ha funcionado tan bien el cerebro como cuando has tomado esa decisión

gracias?

de nada cariño
por dónde vas??

Se salió del chat cuando vio que la fotógrafa también se había salido, suponiendo que si iba andando no le iba a escribir, y entró a instagram para esperar a que volviera. Pinchó en la foto de perfil de Natalia, la primera que le aparecía, y se le abrió una foto que había hecho en el vagón del metro, con los asientos de enfrente vacíos y ella reflejada en la ventana, y una canción cortada por una parte que decía "me quedo enamorao' cuando te siento aquí, amor, te siento aquí. Yo sé, yo sé que tú, tú no me quieres por lo que tengo, porque no tengo na'". Salió de instagram para ir a escucharla entera, conectando los auriculares al móvil mientras cambiaba de una aplicación a otra, y suponiendo que aquella era una de esas canciones que se dejaban de vez en cuando para decirse cosas.

La casa del árbolWhere stories live. Discover now