Shadows of the Night. Hogwarts.

Zorrillas

- No. Te vez bien. - Dijo acomodando su mochila.

- Lo sé, lo sé. Me amas.

- No te amo. Pero como te quiero romper el...

- ¡Marvolo Riddle!

- Está bien, está bien.

- Descarado.

- Ya, no te enojes. - Dijo codeandome.

- Tonto.

- Me enteré que tú cita con Diggori no salió bien. - Dijo riendo. Rodé los ojos.

- ¿Cómo sabes? Y no fue una cita.

- Weasley por aquí, Weasley por allá. Ya sabes, son periódicos humanos.

- No fue una cita. - Dije acomodando mi mochila.

- Lo que haya sido. Me enteré que golpeaste a Chang. Eso fue genial.

- Sí, Snape me "castigo" haciendo un reporte de una poción. Algo muy fácil.

- Que gracioso. Parece que le agradó.

- Lo sé. Es bueno eso. - Dije riendo.

- Lo es. Espero y Dumbledore no se entere.

- ¿Crees que lo haga? ¿Qué me puede hacer?

- Sabes que él prefiere a todas las casa y al final a Slytherin. Tal vez te castigue más severamente.

- Gracias por tus buenos deseos. - Dije sarcásticamente.

- Cállate. ¿Vas a desayunar?

- No tengo hambre.

- Nunca comes. ¿Nunca te da hambre?

- ¿Por qué mejor no te callas?

- Cálmate Lombrad. - Dijo rodando los ojos.

Seguimos caminando y después de cada frase iba un "Cállate", nos amo.

(...)

- ¿Entonces de qué hablaban? - Preguntó Theo.

- De nada, solo de lo que pasó con Cedric y su novia. - Dije tomando un sorbo de té.

- No me has contado sobre Nick.

- Oh sí. Pues no hicimos mucho, fuimos a Hogsmeade y a las Tres Escobas. No fue la gran cosa. Pero es divertido.

- ¿Divertido? - Preguntó.

- Pues sí.

- Ya veo.

- ¿Tú que hiciste?

- Nada, solo me quedé en mi habitación y luego fuí a la biblioteca, adelanté unas tareas y ya.

- ¿Estuviste con Daphne?

- No. No me habla.