Guardianes de la felicidad

Capítulo 90

Capítulo 90:

Mar y Thiago reaccionaron al instante, corriendo hacia el altillo. Su corazón palpitaba mucho más rápido de lo normal. Allí, se encontraron con Justina en la puerta

Mar: Dejanos entrar!

Tina: Dejen de gritar, por favor!

Thiago: Le pasó algo?

Mar: Tina, dejame entrar

Dicho ésto, entró a la habitación. Mora estaba en la cama de Cielo y Nico. Despierta

Mar: Mi amor?

Ella estaba acostada, pero tenía los ojos ligeramente abiertos.

Mora: Mami?

Mar no pudo aguantar, y la abrazó. Ella no entendía nada. Thiago entró detrás, y se unió a ellas. Unas lágrimas corrieron por las mejillas de Mar. Mora estaba en el medio de ese abrazo, sin entender absolutamente nada

Mora: por qué llorás mami?

Mar: por nada, mi amor

Thiago: Estás bien?

Mora: Sí. Cómo llegamos acá?

Mar: No te preocupes por nada, Morita. No pasa nada

Mora: Me duele la cabeza

Tacho: yo voy a entrar!

La puerta se abrió de un golpe, y el resto de los chicos entraron en el cuarto. Tacho se acercó a Mora

Tacho: Cómo estás, princesa?

Mora: Bien, padrino

Tacho también la abrazó. Minutos después, entró Paz con un médico

Paz: Salgan todos, vamos a revisarla

Mora: Revisarme?

Paz: Tranquila mi amor, no es nada. Es para asegurarnos de que estés bien

Mora: Tengo miedo

-No lo tengas, Mora. Es solo un control

Mora: Mami, quedate conmigo

Después de que el médico les asegurara unas cien veces que Mora estaba en perfecto estado, pudieron relajarse. No querían asustar más a la nena

Mora: Por qué estamos acá?

Thiago: Volvimos a casa, chiquita

Mora: pero cuándo nos vamos a nuestra casa?

Mar: en un ratito. El médico dijo que ya te podés ir

Jaz: Permiso… encontré a algunos que querían visitar a su hermana

Jaz entró con Bruno, y ambos bebés. Mar y Thiago tomaron a los más pequeños en brazos, y Bruno se sentó al lado de Mora

Bruno: Estás bién Mora?

Mora: Sí. Y ellos?

Mar: Te querían ver, mi amor. Te extrañaban

Mora: No creo, estan dormidos

Thiago: Chicos, nos pueden explicar qué pasó en el sótano?

Bruno: Estábamos jugando a explorar cuando se empezaron a escuchar ruidos. Nos asustamos, y nos fuimos a esconder. Mora me dijo que sabía dónde ir. Cuando estábamos yendo al sótano, escuchamos unos llantos muy fuertes. Buscamos, y los encontramos a ellos

Mora: Estaban llorando mucho

Bruno: Así que los llevamos con nosotros, al sótano

Mar: ustedes los pudieron llevar?

Bruno: Sí. Yo llevé a Juampi y Mora a Mariana. Entonces nos escondimos en el sótano. Estaba oscuro, y la luz no andaba. Teníamos miedo

Mora: Sí, pero Bruno me dijo que me tenía que calmar, que ya nos iban a buscar. Y que lo tenía que ayudar a calmar a los mellis, porque ahora yo era una hermana mayor, y los tenía que cuidar

Mar miró a Bruno con los ojos iluminados. No podía entender cómo su hijo de 7 años se hizo cargo de una situación como esa

Thiago: Hicieron muy bien

Mar: Sí, chicos. Salvaron a sus hermanitos

Thiago: En especial vos, enano

Thiago despeinó un poco a Bruno, lo que lo hizo reír. Se abrazaron, los seis, aunque los mellizos no se enteraron. Tuvieron tanto miedo, pero, como siempre, el amor es más fuerte