Guardianes de la felicidad

Capítulo 133

Capítulo 133:

La mansión no parecía el lugar de siempre. Estaba más… apagado de lo normal. Aunque todos estaban allí.

Los meses habían pasado volando para ellos. Volver a reencontrarse con todos había sido increíble. Desde el primer momento sabían que tendrían que volver alguna vez. Solo no querían que llegue.

Cielo: Están todos preparados?

Paz: Sí, creo

Cielo: Ya saben cómo es. Cada uno va a volver a su tiempo y se van a unificar

Nico: Muchas gracias, a todos. Nos ayudaron mucho

Comenzaron a despedirse. Las despedidas no eran lo suyo, todos las odiaban

Mar: Te voy a extrañar mini-gitana

Alai: Y yo a vos, madrina

Tacho: Pendeja, prometeme que te vas a cuidar

Alai: Yo siempre me cuido teñido

Tefi: Estás bien? No te falta nada? Segura?

Paloma: Estoy bien, no te preocupes

Tefi: Acordate de la crema que te di, gorda

Paloma: Ya me lo recordaste unas diez veces, tranquila. Gracias. A los dos

Luca: Te vamos a extrañar, mucho

Hope: Basta! Ya dije que no quiero llorar

Thiago: Está bien, no llores. Te voy a extrañar pendeja

Hope: Ves!- Llorando- Me hiciste llorar!!

Malvina: Gordi, no llores mucho que se te van a hinchar los párpados

Hope: Yo también los voy a extrañar. Los amo

Rama: Bueno, creo que es la despedida

Vale: Eso parece. Tronco, yo…

Rama: Qué?

Vale: Te quiero. No te olvides nunca de eso

Rama: Imposible. Yo también te quiero

Vale: Y espero que seas feliz siempre. Nos vamos a volver a ver?

Rama: No sé. Pero hasta que eso pase, te deseo lo mejor

Vale: No te vas a poner a cantar ahora, no?

Rama: No, no me sale cantar ahora- Ambos rieron un poco- Gracias

Vale: Gracias a vos. De verdad. Te voy a extrañar

Se abrazaron, intentando no llorar

Mora: Y por qué te tenés que ir?

Rose:No sé, pero yo me quiero quedar

Mora: Decile a tus papás que se queden

Rose: Mi mamá dijo que no podemos. Tenemos que volver a nuestra casa

Mora: Pero vas a venir, no?

Rose: Y sí, tonta! Vamos a venir cuando no tenga clases

Mora: Y acordate de traer tus juguetes!

Rose: Tomá. Es un regalo para vos

Mora: Qué es?

Rose: Una pulsera. Yo tengo la misma. Es para que sepan que vos ya tenés una mejor amiga

Mora: Gracias. La voy a usar todos los días

Luz: Brunito, te puedo hablar un segundo?

Bruno: Sí, qué pasa?

Luz: Te quería decir gracias

Bruno: Gracias por qué?

Luz: Por todo. Sos muy dulce, y fuiste muy bueno conmigo

Bruno: Bueno, de nada entonces. Te sentís bien?

Luz: Sí, estoy bien. Te puedo dar un abrazo?

Bruno asintió, y Luz lo abrazó. No entendía por qué ese nene la había afectado tanto

Cielo: Chicos, ya es hora

Todos se prepararon, nerviosos y a la vez ansiosos. Querían volver a casa, pero por otro lado iban a extrañar mucho ese lugar

Cielo: Gracias otra vez, chicos. Los vamos a extrañar

Nico: Buen viaje. Y recuerden que tras las nubes el cielo es siempre azul.

Luego de decir esas palabras, una luz blanca cegadora inundó todo el lugar. Debieron apartar la vista de ellos para protegerse. Cuando paró, todo parecía volver a la normalidad. Bueno, casi todo

Cielo: Qué pasó?