Arranged Marriage - Supercorp AU

Capítulo 16

*Kara Pov.*

Ya era tarde en la noche y todos estaban en la cama. Nos habían dejado una habitación lista para ambas y luego de lavarme los dientes, me metí en la cama para recibir un abrazo de Lena con la luz tenue de la mesa de noche.

—¿Cómo te sentiste hoy? —Me preguntó y sonreí arrimándola a mis brazos.

—La verdad que increíble, me siento libre aquí. No tengo de qué preocuparme.

—Sí, estuviste como dos horas con Linda en ese balcón. ¿Pudieron hablar?

—Sí, nos pusimos al día de todo.

Me sentía muy bien sabiendo que mi hermana estaba a un par de habitaciones de mí y que podía ir y hablarle cuando quisiera, no solo escribirle mails o hacer video llamada.

—Pues... yo quiero ponerme al día contigo...

Dijo Lena en un tono seductor para luego arrastrar su mano de mi vientre, donde la tenía apoyada, hasta mi entrepierna. No había considerado el tener relaciones esta noche ya que mi mente había estado en otra cosa pero al sentir su mano mis ojos se encontraron con los suyos. Su mirada estaba cargada de deseo y me permití apoyar las piernas en el colchón para disfrutar cómodamente de su tacto. No precisó mucho para animar a mi miembro, solo con manosearme unos segundos hizo que me encendiera. La vi morder su labio y variar su mirada de mis ojos a mi entrepierna. Cuando la dureza comenzó a hacerse presente y notarse bajo mi pijama, Lena se movió y se trasladó a mis piernas, sentándose sobre mi cadera y frotándose contra mi miembro a la vez que se acercó para besarme. Mientras sus labios saboreaban los míos, mis manos fueron a su cintura y comenzaron a subir el pijama en forma de vestido que se había puesto. Sus manos estaban sobre mis senos y los agarraban con ganas, pero lo que me hizo gruñir fue notar que no tenía sostén puesto. La sentí presionarse contra mi cadera y no pude evitar elevar la mía, buscando contacto contra ella. Sus manos elevaron mi remera para dejar mis senos libres. Jamás dormía con sostén puesto porque lo encontraba molesto y en esta ocasión encontré maravillosa mi costumbre ya que eso le dio facilidad a Lena para que tomara mis senos en su boca. Apreté los labios y cerré los ojos con fuerza, buscando en lo más profundo de mí el control para no gemir sonoramente y que nadie nos escuchara. Esta no era nuestra casa y debíamos ser prudentes, pero no podía calmar mi deseo por Lena, jamás podría. La lengua de Lena era muy traviesa y molestaba mi pezón, jugando con él a su antojo y haciendo que mi miembro quedara erecto, tanto que dolía contra mi pantalón. Cuando se lo hice sentir gimió en mi otro seno y se alejó para ayudarme a quitar la remera. Elevé los brazos y dejé que lo quitara, dejándolo caer en el suelo e hice lo mismo con ella, dejándola solamente en ropa interior inferior. Levantó sus caderas y aproveché el momento para bajar el pijama y ropa interior, revelando mi erecto miembro ante sus ojos. Cuando volví a apoyar mi cuerpo en la cama, Lena se sentó nuevamente sobre mi cadera y noté su ropa interior ya mojada. Me senté en la cama y la tomé de la cintura para tener mejor posición para acercar su pecho a mi rostro. Llevé su pezón izquierdo a mi boca y tomé su seno con la mano, sintiendo sus gemidos silenciosos. Mi otra mano fue a su trasero y comenzó a mover su ropa interior a un costado. Dándose cuenta de mi intención, se apoyó con las rodillas en la cama para elevarse y mientras con una mano hacía a un costado su ropa para dejar su entrada libre, mi otra mano tomó mi miembro y lo asomó a su entrada. La punta se mojó con sus fluidos y sentir su zona caliente, húmeda y resbalosa, hizo que me deslizara fácil en su interior, provocando un gemido silencioso que solo ella pudo escuchar. Su interior estaba apretado y se sentía riquísimo. Tomó mi rostro con sus manos y me hizo sentir la fuerza de sus dedos mientras su rostro estaba impregnado de lujuria. Solo logré deslizarme dentro un par de veces que la sentí salirse y lo siguiente fue que la vi quitarse la ropa que le restaba por lo que hice lo mismo. No me dejó moverme, se sentó en mi cadera y me recostó en la cama. Tomó mi miembro con su mano y lo deslizó en ella, encargándose de determinar el ritmo ella. No solo se movía de arriba abajo, sino que su cadera iba de adelante hacia atrás con lentitud, disfrutando y enloqueciéndome. Sus manos fueron a mis senos y los tomaron mientras mis manos estaban en sus caderas solo para sentir el ritmo de sus músculos bajo mi piel. Agradecí que la cama fuera lo suficiente fuerte como para no hacer mucho ruido, ya que los movimientos de Lena eran cada vez más constantes. Observé su vientre un momento, notando que había un montecito formándose que antes no había notado. Llevé mis manos ahí, dándole una caricia donde sabía estaba mi hijo y la vi sonreír mientras seguía cabalgando, por así decirlo. Llevé mis manos a su trasero y sentí sus nalgas moverse con esmero contra mí.