Tropiezo con amor [GEMELIERS] *terminada*

CAPÍTULO 23

[Cristina]

Vemos a Marcos y a Maria en el agua. No nos hace mucha gracia, pero decidimos meternos e ignorarlos. Lidia, se pone apoyada en el pecho de Jesús, que este abre las piernas. Se dan piquitos y se ríen.

Marcos no deja de mirar a Dani desafiante, y este, que está al lado mío, me sonríe de vez en cuando. Maria, me hace cara de asco y yo le bajo la mirada.

-Bueno, nosotros nos vamos- dicen y se van del jacuzzi-

-Pensé que no se iban a ir nunca- dice Dani dándome la mano- que bien se está

Me pongo boca abajo, para que el agua coque contra mi vientre. Dani, se tumba encima para abrazarme. Es incomodo, pero agradable a la vez.

Sin querer, me desliza para arriba y el chorro a presión va directo a mí…

-Dani- gimo- ay

Él, que me abraza muy fuerte, parece no entender nada, hasta que pone la mano entre el chorro y mi cuerpo. Entonces se empieza a reír, pero no se mueve ni un dedo. Jesús y Lidia, veo que están a lo suyo y no hay nadie más en el jacuzzi. Está todo oscuro.

Dani me pega más contra el chorro, y no puedo evitar, soltar sonidos, que al parecer, Jesús y Lida, no percatan.

El chorro, me sigue presionando, hasta que hay un punto, que pierdo el control. Dani, me tapa la boca con la mano y le muerdo el dedo.

Un escalofrío recorre todo mi cuerpo y sin querer doy un último grito. Ha sido… increíble. Una sensación muy agradable. Tengo mucho calor, aunque estoy tan cansada, que me pesa todo. Me duelen las piernas de tensarlas.

Me estiro encima de Dani, imitando a Jesús y a Lidia, que no estoy muy segura si se han enterado de lo que acaba de pasar.

Dani, me da pequeños besitos en la cabeza  y sonríe mucho. Jesús y Lidia, se empiezan a besar apasionadamente y Dani, decide que vayamos a la sauna.

Nos levantamos y entramos. A mí me gusta mucho el calor, y aguanto mucho en la sauna. Cerramos y vemos que hay un pestillo.

La sauna es amplia y hay una botella de agua, con dos vasitos rojos en la mesa del centro. Me siento en el banco, con la toalla en el culo y Dani, se sienta a mi lado. Nadie cruza una palabra, la verdad es que me da vergüenza. Lo de hace un rato, ha sido genial, pero exactamente no sé qué ha sido.

-Dani- digo avergonzada- siento haber, bueno, lo que haya pasado…

-Tener tu primer orgasmo- dice tranquilo- no pasa nada, ha sido muy… excitante… Al principio estaba desorientado, pero luego lo he pillado todo…

-Me da mucha vergüenza- le digo- pero me he sentido tan bien… Ha sido una sensación genial y muy… excitante

-¿Nunca te habías…?- dice asombrado- bueno ya sabes… ¿masturbado?

-No, claro que no- pongo los ojos como platos- no, ¿tú?

-Ehem…- se pone todo rojo- bueno… es igual…

-No pasa nada- le digo y le acaricio la cara, para tranquilizarlo- con lo agradable que es…

Eso último se me escapa y hace que Dani, se parta de risa. Yo sigo roja, no sé si por el calor de la sauna, de lo ocurrido, de estar con Dani o de la vergüenza.

Veo que Dani, está un poco desorientado. Así, que me acerco a él. Él se estira y yo me estiro encima. Le sonrío y nos damos un beso esquimal.

-¿sabes una cosa?- digo contenta- te quiero

La primera vez, la primera vez que le digo te quiero. Me ha salido sin pensar. En este momento lo siento, y no tendría por qué callarlo. Él parece muy contento. Acerca su boca a la mía y nos besamos dulcemente.

Me vuelve a besar, pero esta vez, es como la noche en el banco. La temperatura de la sauna aumenta. Dani, suelta suspiros de su boca. Le cojo la cara y se la giro. Le empiezo a besar sensualmente el cuello. No lo he hecho nunca, pero me sale por instinto. Dani, suspira sin parar. Le dejo la marca en el cuello sin querer. Le beso el pecho, y vuelvo al cuello.

-Cris- dice muy agitado- ¿vamos a la piscina?

-¿Qué?- digo extrañada- ¿no quieres estar conmigo?

-No es eso- dice muy jadeante- es que si sigues así, no creo que aguante mucho…

Se sienta y yo me vuelvo a sentar en sus piernas. Su bulto, choca con mis partes y eso, me hace soltar un gemido, que saca de si a Dani.

Lo empiezo a besar y sin querer o queriendo, nos empezamos a restregar. Mi bikini, choca, con su bañador, que es muy fino. Empezamos a hacerlo más fuerte, mientras gemimos en nuestras bocas. De repente, vuelvo a notar el punto ese en que pierdo el control y le cojo del pelo y me muevo más rápido.

-Cris- gime y para mis oídos es música- me voy

Dani suelta un grito, y yo al minuto. Me siento a su lado y volvemos a respirar normal.