【 1.2 】

743 62 4
                                    

─────── ۪۫ ཻུ۪۪͎.' ───────

Or that's what they thought

─────── ۪۫ ཻུ۪۪͎.' ───────

—BUENOS DÍAS, QUERIDA —la luz de la mañana cegó momentáneamente a Colette, quien tuvo que poner una mano enfrente de sus ojos para evitar el dolor

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.



—BUENOS DÍAS, QUERIDA —la luz de la mañana cegó momentáneamente a Colette, quien tuvo que poner una mano enfrente de sus ojos para evitar el dolor.

Valentine entró cerrando la puerta detrás de él con una sonrisa en el rostro, Colette rodó los ojos.

Desde la noche anterior en la que el brujo había sido enviado a curarla se sentía con muchas más fuerzas, aún no recuperaba el control completo, pero al menos no sentía que estaba a punto de morir.

Valentine tiró una botella de agua a los pies de la muchacha, y aunque Colette quisiera, literalmente, lanzarse y cogerla como si fuera lo más preciado en el mundo, simplemente la miró, y usando toda su fuerza de voluntad, no la cogió. No quería darle la satisfacción a Valentine de ver cuan mal estaba, no lo haría. Una vez que el hombre se fuera bebería del agua, mientras tanto, pretendería no necesitarla.

—Valentine, ¿a qué debo esta visita? ¿Vas a moverme de mi suit a las habitaciones compartidas? Ya sabes, esas en donde están todos los subterraneos con los que estas experimentando —habló con la voz ronca.

Estaba afónica, como si hubiera estado gritando todo el día.

A pesar del dolor que hablar le producía, encontró la manera de sonreír sin mucha gracia, o más bien, de darle una mueca cínica al hombre enfrente suyo.

Valentine rio, como si el que Colette hubiera descubierto sus retorcidos pasatiempos le divirtiera, como si ya se lo hubiera esperado.

—No te tardo mucho tiempo juntar los cables.

—El brujo que trajiste ayer fue lo único que necesite para hacerlo —levantó los hombros pretendiendo modestia, como si estuviera hablando con uno de sus antiguos profesores de Idris y acabara de responder una pregunta que nadie sabia a excepción de ella—. Tampoco he visto a Jace desde ayer, ¿dónde lo tienes? ¿En otra suit privada? ¿Experimentando con él como lo hiciste conmigo?

Valentine dejo de sonreír por un momento y en vez miró confundida a la pecosa, preguntándose cómo sabía ella lo que él le había hecho. Pero después de unos segundos, volvió a sonreír bastante curioso.

—¿Cómo...?

—¿Cómo sé lo que me hiciste? Solo hace falta una memoriae para enterarse de muchas cosas, ¿sabías que con esa pequeñita piedra puedes saber qué te dijeron tus padres cuando estabas apenas en el vientre? La sensación es genial, pero claro esta también el riesgo de que puede matarte —cada palabra era como una puñalada a su garganta, pero se resistió a contraer su rostro en dolor y simplemente seguir hablando como si nada.

𝓜𝓮𝓶𝓸𝓻𝓲𝓮𝓼 ↬ a. lightwoodWhere stories live. Discover now