New in town...

3. Noches de soledad.

-Oye, tranquilo viejo - le dijo el duende a Louis- ni que estuvieran basándose, sólo vinieron a charlar un rato.

Louis sólo hizo una mueca en desaprobación.

-Creo que sería mejor si me fuera-dijo Zayn- aquí sólo te hago quedar mal, _____.

-¿Qué? ¡No! -Dije tomándolo del brazo y llevándolo en otra direccion- Dejemos que los chicos jueguen con Malena un poco más.

Nos alejamos de ellos sin siquiera mirarlos, Zayn me acompañó hasta la puerta de mi casa.

-Qué bueno que te pude conocer mejor - dijo Zayn mirándome a los ojos tan profundo, que me perdí en ellos durante segundos- espero que se repita.

-¡Claro! - dije emocionada- Es decir, si a tu novia no le molesta.

- ¿Por qué habría de molestarle? Como si ella no hiciera lo mismo.

Por un segundo sentí como si él sólo saliera conmigo para desquitarse con su novia, pero de inmediato me arrepentí, no sería capaz.

-Hasta luego- dijo mientras tomaba mis hombros y besaba mi frente- recuerda que puedes confiar en mí.

-Gracias - fue lo único que pude decir.

Me invadían mil sentimientos al mismo tiempo, no podía ni respirar, quise contestarle que él también podía confiar en mi, ¿pero cómo? Mi lógica dice que no confíes en nada ni en nadie para no salir herido, teniendo en mente que ya no podrás decir que confíen en ti, lo aprendí a la mala cuando mi primer novio abusó de mi, yo pensé que era diferente, pero resultó ser todo un patán, por eso vinimos a Sherbrooke, para alejarme de ese imbécil de Joe.

Entré a mi casa y desde el balcón de mi recámara vi cómo Zayn tomaba su cabello entre los dedos y suspiraba con una gran sonrisa al ver la puerta de mi casa, yo no le dije nada de mi vida en el parque...

Como era temprano, salí de nuevo a ver si los chicos seguían en el parque, y sí, efectivamente, seguían corriendo por todo el lugar, pero Harry perseguía a una muchacha de cabello negro rizado, un poco corto, se me hizo muy familiar, pero, ¿dónde la había visto? Me acerqué a Malena para verificar que todo estuviera bien, había sido un poco grosera con ellos cuando me fui con Zayn.

Me miró y solamente me abrazó, no pudo contener las lágrimas, no quería preguntarle por qué lloraba, se vería un poco insensible de mi parte, sólo quería que supiera que estaba ahí para ella. Louis se acercó y también nos abrazó, y me susurró al oído

-Ella es la novia de Harry, Fernanda.

-Tranquila - dije sin ánimos- todo va a estar bien.

Harry se acercó a nosotros mientras le daba la mano a su novia Fernanda.

-Chicos - dijo sin quitarle los ojos a Fer- ella es mi novi... Malena, ¿estás llorando? ¿Qué paso?

- Nada, Harry - dijo Louis- ¿en dónde está Niall?

-Lo vi comprando comida - reaccionó Malena-seguro ya viene.

Fernanda no quitaba su vista de mí, como dije, no me molesta... Pero algo se me hacia demasiado familiar

-¿______? -preguntó Fernanda con cara de extrañeza- ¿eres tú?

-Si, me llamo______, y ¿tú quién eres?

-¿No me recuerdas? Soy Fernanda, Fernanda Mellark.

Mis ojos brillaron en ese instante, ya sabía de dónde la conocía, fuimos mejores amigas en la secundaria, ella fue la última persona el la que confié, pero se iba a L.A según recuerdo... Qué hacía aquí?. La abracé de alegría, sabía todo de mí y yo de ella, las 2 soltamos lágrimas de alegría.

-¿Qué haces aquí? -pregunté casi sin aliento- pensé que estabas en Los Ángeles.

-Transfirieron a mamá aquí después de unos meses, llegué y Harry fue la primera persona que conocí, y bueno, cuando lo sabes, lo sabes, ¿No?

-Yo... Yo.. No lo puedo creer.

La solté y caminamos un rato, fuimos a robarle comida al duende y todos reíamos, menos Malena, Claro está... Yo sabía que ella estaba destrozada por dentro, que moría por Harry, pero todos sus planes se fueron por el caño...

Ya era tarde, seguro mi mamà ya había regresado del trabajo y se preguntaría dónde estaba, decidí volver a casa, pero invité a Malena, quería poderle explicar todo, ella aceptó, sólo llamó a su hermana mayor para que avisara a sus padres. Nos despedimos de los chicos y de Fernanda, Malena no le tenía rencor a ella, pues sabía que no era su culpa enamorarse de un ángel como Harry.

Llegamos a mi casa, saludé a mi mamá y le presenté a Malena, subimos a mi habitación y realmente se notaba que estaba decepcionada; mientras yo sólo pensaba en Zayn, no me importaba que una de mis amigas estuviera sufriendo o que mi mejor amiga de la infancia y yo nos hubiéramos reencontrado, simplemente no podía pensar en nada que no fuera él, en esos fuertes brazos, su cabello alborotado, su sonrisa y labios perfectos, y al final, sus ojos, ver en sus ojos era como entrar a un mundo nuevo, con colores por todos lados, paisajes, ¡eran impresionantes!

Malena lloró hasta quedarse dormida en mis piernas, ¿qué le podía decir? ¿Que no me llenara de lágrimas? Claro que no, soy cruel, pero no tanto.

Después de un rato pensé en que Louis vivía sólo a unas casas, podía llamarle para que me ayudara con Malena, ya que yo no sabía como controlarla ni nada por el estilo.

*Llamada*

-Mmm... - dijo Louis intentando pronunciar alguna palabra- ¿Hola?

-¡Louis! Necesito que me ayudes.

-¿Qué ocurre?

-Tranquilo, nada malo, pero Malena está muy mal, acaba de quedarse dormida encima de mí, literal.

-¿Y me estás invitando a que vaya a ver cómo duermen juntas? Es una propuesta interesante, depende de cuánta ropa traigan puesta.

-Deja de jugar y ven a ayudarme, ¿quieres?

-Esta bien, voy para allá, ¿me recuerdas el Número?

-14.

*fin llamada*

Esperé unos 10 minutos hasta que tocaron el timbre, no pude ir a abrir porque tenía una ballena encima, bueno, no era para tanto, pero igual no me la podía quitar. Llegó Louis a mi habitación tocando la puerta.

-Está abierto- susurré- pasa.

-Gracias, ¿te ayudo a bajarla?

-Sí, gracias.

Tomó la cabeza de Malena suavemente mientras con los nudillos acariciaba mi pierna ya que sólo lleva shorts y una camiseta, no creí que lo hiciera a propósito... Sostuvo su cabeza en el aire mientras en un movimiento me zafaba de ahí, puse una almohada y la soltó encima de ella.

-Muchas gracias - dije en un suspiro, estaba cansada-

-No hay de qué.

-Creo que sería buena idea que te quedaras aquí, ya es muy tarde y hay 2 camas, yo duermo en esta con Malena y tú en la que sale de mi cama.

-Está bien, me quedo, pero con una condición.

-¿Cuál?

-Deja a Malena sola en tu cama, acompáñame a mi hoy, está haciendo frío y no tengo a nadie a quién abrazar...