Tears are Falling | Terminada

24. Confesión.

"Tal vez, pienses que soy un loco, pero no importa. Me gustas, Zon. Te quiero."

Una bofetada. Una bofetada fue la que recibí la noche que rechacé los sentimientos de Valerie. En ése momento, no me importó, porque estaba feliz. Sólo asentí y volví a la habitación donde me cercioré de que Zon descansara en su lugar de la litera.

Dos días después, entré en pánico. Tenía miedo sincerarme con Zon. Ahí, sentí empatía. Me imaginé a Zon confesándome y ella rechazándome. Negué ante aquella posibilidad. Era cierto que pasaba la mayoría del tiempo con Thomas y que siempre estaba feliz a su lado, pero eso no quería decir que le gustara, ¿Verdad?

Ahora tendría que averiguar la manera de confesarme sin decirle que sé su verdadera identidad, pero que no luzca como un loco homosexual.

Sí ella se enterase que sé que es chica, huiría de la universidad y jamás volveria a saber de ella. Eso me asustaba.

...

Thomas presionaba la pantalla de su tableta tratando de ganar la partida del juego. Era muy bueno con ello, pero ésta vez lucía desconcentrado.

Sintió un peso a su lado. Bloqueó la tableta y volteó para observar al individuo a su lado.

ㅡHey ㅡdijo Thomas sin importancia.

ㅡQuita esa cara y escucha ㅡgritó emocionado Josh, su fastidioso hermano y compañero de cuarto.

ㅡ¿Qué quieres Josh? Estoy tratando de ganar una partida muy importante.

ㅡOh, calla, Tommy.

Thomas gruñó. Realmente odiaba que su hermano lo llamara Tommy.

ㅡNo me llames así ㅡcruzó los brazos intentando lucir molesto.

Josh golpeó levemente su hombro. ㅡNo estarás molesto cuando te cuente el nuevo rumor que corre por el campus ㅡcubrió su boca ocultando una risita.

ㅡ¿Rumor? ¿De qué hablas, Joshua?

ㅡDicen que una chica disfrazada de chico se esconde en nuestros dormitorios ㅡmurmuró.

ㅡEso es imposible, es un rumor estúpido.

ㅡYo sólo repito lo que me dicen.

ㅡ¿Quién te lo ha dicho?

ㅡValerie, la mejor amiga de nuestro hermano.

ㅡ¿Qué?

ㅡSí, Valerie ㅡse levantóㅡ ahora, si me permites, tengo algo que hacer. Te dejo para que continues con tu importante juego ㅡdijo sarcástico.

Josh se alejó dejando a un Thomas desconcertante. El rumor no sólo le parecía estúpido e infántil, también imposible. Jamás, un rumor de esa magnitud, había sido esparcido por todo el campus y menos por Valerie.

...

Entré a la habitación y lo primero que vi fue un Hunter mordiendo la goma de su lápiz mientras pizaba constantemente el piso. Era notorio que estaba nervioso. La pregunta era, ¿Por qué?

No le tomé importancia y llegué hasta el escritorio dejándome caer en la silla.

ㅡ¿Qué tal tu día hoy? ㅡpreguntó dejando el lápiz sobre la mesa, pero siguiendo moviendo el pie.

ㅡDeja de hacer eso.

ㅡ¿Hacer qué?

ㅡMover tu pie, me pone nervioso.

De pronto el pie se quedó quieto.

ㅡGracias ㅡdije poniéndome de pie directo a la mesita frente al sofá rojoㅡ este lugar es un desastre. No me molesta si de vez en cuando limpias un poco.