5 años después.
La carta.
Me encuentro escribiendo esto con la felicidad más grande que puede sentir una madre primeriza. Estoy embarazada, tanto que contar que se me hace difícil escribirlo en una sola carta. Gabriel me pidió matrimonio no hace poco, sus padres están orgulloso de el tanto como los míos , mamá está más que orgullosa de mi, de mi cambio y de mi vida.
La criatura que llevo en el vientre no es más que sinónimo de paz, de alegría y bendiciones. ¿soy feliz?. Lo soy más que nadie en el mundo, mi corazón le pertenece a él tanto como el del me pertenece a mí, nuestras vidas están destinadas a estar juntas, eso quedó muy claro desde el principio. El es el hombre que nunca imaginé conocer y tenerlo en mi vida.
No malgastamos el tiempo. Siempre estamos juntos, estamos viajando e incluso vivimos solos como adultos que somos. El me quiere tanto como yo lo quiero a él. No hemos graduado juntos, tenemos cuatro cachorros en casa. Uno se llama lily, otro pick, y el más pequeño pig. Somos felices e inmaduros cuando queremos y podemos.
No escribo esta carta diciendo adiós. Solo quiere decir que nuestras vidas seguirán el rumbo, nosotros, nuestra familia, seguiremos siendo felices, seremos normales por que así somos nosotros, cometemos errores y seguiremos comentiendolos, si te preguntas por qué, la respuesta es simple: nadie es perfecto. Aprende a quererte a ti, a tu vida a tu familia.
Aprende a querer aquella persona de color negro/ blanco, por que es igual que tú. Apoya a esa persona que le gusta su mismo sexo, por que es especial, siempre habrá algo o alguien diferente . Quiere y protege a esa persona que sufre de bullyng tan sólo por su sobre peso, puede que nesecites a alguien, lo digo por experiencia. Acepta tus curvas sean como sean, eres increíble en tu interior, todos somos perfectamente imperfectos de la manera en que nos queramos.
Yo
soy
Julia Pilar
Y
Esta fue
Mi
Historia.
"curvas"
BY: emiliana Á.
आप पढ़ रहे हैं
curvas ©
लघु कहानीNo eres la talla de tu sostén ni la anchura de tu cintura. No eres el color de tu cabello, de tu piel, ni el color de tu lapiz labial. No te defines por la cantidad de atención que obtienes de los hombres, o de las mujeres. No eres la foto de perfil...
