Capitulo 38: Blanco Y Negro

234K 5.5K 767
                                    

El dia del baile estaba acostada en mi cama, no iba a ir, primero no tenia vestido y segundo, ¿para que iba a ir?

De la nada la puerta se abre y entra Marcus seguido de Jake con unas tres bolsas gigantes en sus manos, se acerco a la cama y se tiro en esta, arriba de mis pies.

- Ve a bañarte, te he comprado un vestido ¡HERMOSO! - dijo Marcus mientras tomaba la bolsa y sacaba de este un vestido blanco, seguramente llegaba un poco mas arriba de las rodillas, con mangas hasta los codos y las espalda al descubierto - ¿no es lindo? ah, sí, por cierto, seguramente las vendedoras piensan que soy un travesti, es que no podía decidirme.

- Ya me he bañado hace unas dos horas, para dormir. - dije mirando la tela que tenia en manos.

- Que dormir, ni dormir, tendrás tiempo para dormir cuando mueras, ahora te sientas alli - dijo señalando la silla del escritorio - y dejas que yo haga mi magia.

Y no le podia decir que no a Marcus. Estuvo preparandome y el se habia perdido su tiempo para arreglarse y lo mande a que se arreglara.

- No quiero aparecer con algun chico de pelo verde desordenado de mi brazo - bromeé-. Es mejor lucir bien si quieres que te vean conmigo.

El me sacó la lengua. -Ve a ponerte ese vestido. ¡Quiero ver esos zapatos de tacón alto en tus pies también, chica!

Después de ponerme el vestido y los zapatos, me miré a mi misma en el espejo de cuerpo entero del baño. Marcus había hecho un excelente trabajo haciéndome lucir como una estrella de Hollywood. Había puesto suaves rizos en mi, de lo contrario, pelo liso y los había separado dejando que estos enmarcaran mi cara. Luego el puso un falso broche de diamante para levantarlo a un lado. El lápiz labial que usó parecía terriblemente rojo para mí, pero hacía una ilusión de glamour.

Cuando Wes salió de su habitación, me silbó.

-Bueno, si eso no llama un poco la atención de la población masculina, no sé qué lo hará.

El baile se celebraba en el campo de fútbol. Habían traído una pista de baile hecha de grandes baldosas blancas y negras. El escenario de la banda estaba iluminado con luces azules y la pared detrás del quiosco de música negro, con blancas notas musicales flotantes e instrumentos musicales. Había unas cuantas mesas esparcidas allí.

-No lo veo -le dije a Marcus, incapaz de ocultar mi decepción. Mientras Wes y Jake iban a buscar a sus parejas.

-Bueno, él se lo pierde. Obviamente tengo la cita más caliente aquí.

- ¿De qué estás hablando?

El miró alrededor de la pista de baile y susurró-: ¿Qué chico no está mirándote en estos momentos?

Cuando volví la mirada a la multitud, vi lo que estaba diciendo. Lo que parecía como la mayoría de los chicos, ya fueran con cita o no, estaban mirándome de arriba abajo. Era inquietante. No me sentía cómoda con toda la atención.

Y entonces sucedió.

Estaba de pie junto a Marcus y Wes cuando lo vi hacer su entrada al baile. Estaba vestido con un esmoquin negro con una camisa blanca y corbata de lazo negro. Pensé que me iba a derretir de tan hermoso que se veía. Todas las chicas en el baile lo estaban mirando. Sentía como si ya lo hubiese vivido, como el sueño que tuve.

-Tienes que estar bromeando -oí decir a Marcus a mi lado-. ¿Quién es esa chica?

Me había centrado tanto en Caleb que no había visto que una chica, creo que se llamaba Leah, de la clase de historia estaba de pie a su lado en un vestido que me dejó sin habla. Era un vestido negro, ajustado con corte en lugares que parecían inapropiados y una abertura en el lado que dejaba poco a la imaginación.
Todas las chicas estaban mirando a Caleb y todos los chicos se centraban en Leah. ¿Quién podría culparlos? Parecía que podría salirse del vestido en cualquier momento.

Living With Boys - Living With My Boys © EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora