El día después.

2.8K 104 24
                                    

(Primera persona: Eric)

Estamos acostados, ella con su cabeza apoyada sobre mi pecho. Acaricio su pelo, mientras ella duerme plácidamente, con la mano que tengo libre, la otra está entrelazada con la de ella. Sé que cuando se despierte se dará cuenta de que ha cometido un error, y por eso quiero aprovechar el momento. Echaba tanto de menos esto... la echaba tanto de menos. Dios, la adoro. Estamos al descubierto, ella solo lleva su ropa interior y mi camiseta, siempre ha sido muy pudorosa. Yo llevo mis calzoncillos nada más. No puedo dejar de mirarla, está tan tranquila... es como si nunca hubiéramos roto. Aguanto la respiración cada vez que se mueve, con miedo de que se despierte y se acabe este momento, que no puede ser más perfecto. Nos quedamos así un rato, hasta que me acabo quedando dormido...

(Primera persona: Ruth)

Abro los ojos, y me siento extraña, no sé donde estoy. De repente voy cayendo en la cuenta de que nos quedamos encerrados en el instituto. Joder, y no solo eso. Noto mi cabeza subir y bajar, y me doy cuenta de que estoy acostada sobre el pecho desnudo de Eric. Joder, ya me acuerdo perfectamente de que ha pasado. Miro de reojo y veo que está dormido, menos mal. No sabría como reaccionar si él estuviera despierto, me da vergüenza recordar todo lo que dije ayer. Obviamente no era mentira pero... da igual, yo no soy la típica chica que se va acostando por ahí con cualquiera... Pero es que Eric no es cualquiera... Joder, soy estúpida. ¡Cómo he podido acostarme con Eric! Habíamos roto, joder. Dios, que alguien me pegue, por favor. Vuelvo a alzar la mirada y lo veo dormido, con la boca entreabierta, y me olvido de todo. Me centro en él, aunque luche por ser fuerte, el verlo así me hace débil; y mucho. Estiro mi brazo y le acaricio la cara, es perfecto dios mío. De repente aparto estes pensamientos de mi cabeza y dejo de acariciarlo, pero no me levanto, es como si estuviera en un lugar seguro, aquí, entre sus brazos. Estoy tranquila y calmada aquí, hacía mucho tiempo que no estaba así de bien. Joder. Qué difícil es esto. Pienso en como levantarme sin despertarlo y escapar, pero poco después me doy cuenta de que es una chorrada, porque el instituto está cerrado, y debemos quedarnos aquí otro día más, puesto que mañana es día festivo. No sé que voy a hacer... Me voy a morir de vergüenza... Justo cuando estoy pensando esto, Eric comienza a moverse y a despertarse, asi que cierro los ojos y me hago la dormida. Él debe creerselo porque comienza a abrazarme y darme besos en la cara para despertarme.

- Ei, despierta. - actúo como si me acabara de despertar. Decido hacer como si ayer no hubiera pasado nada. - Buenos días. - me dice sonriendo. Me voy a morir.

- Buenos días. - contesto, evitando su mirada. - Tengo un hambre tremenda.

- Comamos algo.

Nos levantamos, me doy cuenta de que estoy casi desnuda, pero estoy con Eric asique que más da. Vamos a la cafetería del instituto, y nos preparamos un delicioso y gratuito desayuno. Mientras comemos no hablamos nada, ni nos miramos, me da vergüenza verlo sin camiseta porque me gusta demasiado. Pero, como siempre, Eric rompe el silencio.

- Bueno, podrías decirme algo.

- Algo.

- ¡Qué chispa!

- Es que no sé que quieres que te diga.

- No sé, pero por lo menos podrías mirarme cuando te diriges a mi.

- No me apetece.

- Pues ayer sí que te apetecía.

Ya estamos, ha llegado el Eric capullo.

- Pero hoy no.

- ¡Joder Ruth, me desesperas! Primero no me hablas, después sí, después follamos, y ahora no me hablas de nuevo. No entiendo qué te pasa.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Oct 15, 2017 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

The Outsider. (El rebelde)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora