All over again | Capítulo diecinueve

48.3K 1.7K 65
                                    

Seguí conversando con Pattie, y ayudándola con la cena. Hasta que todo estuvo listo, y me acomodé en el mueble, apoyándome en éste, para estar más cómoda, obviamente.

-_______, ________, querida, aterriza. -bromeó Pattie al verme babeando por Justin, que se encontraba totalmente guapo el desgraciado. ¿Cómo lo hacía? Ni idea, pero sus tatuajes lo ayudaban bastante para darle el aspecto de chico malo y su actitud... ni hablar. Incluso, hasta su voz era como la de un dios griego.

-L-lo siento. -susurré, con mis mejillas ardiendo bajo la ardiente mirada de Justin. -Hola, Biebs.

-Hola, ________. No sabía que habías llegado.

-Llegué hace bastante rato. -reí levemente. Justin terminó de bajar las escaleras y besó la frente de su madre.

-o-

Una vez que todos nos encontrábamos en la mesa. Desde Jeremy -sí, había llegado hace un rato, ya que tuvo que ir a terminar unos negocios- hasta el pequeño Jaxon. Justin se encontraba situado al frente mío, ansioso por la cena, se veía que hablarían de un tema personal, el cual a Justin le preocupaba. Era raro verlo preocupado, casi siempre era firme y valiente. ¡Ja!

-Y bien... -Jeremy terminó de mordisquear la carne, para luego tragársela. -Lo que quería hablar contigo Justin Bieber -sonó severo, pero con diversión en sus ojos. Haciendo que Justin se atragantara con la comida-... es que nos iremos de vacaciones con tu madre y los niños. Pero... siempre hay un pero. Tus calificaciones nos han decepcionado, jovencito, por lo cual quedas excluido del viaje.

-¡Pero!

-Nada de peros, Justin. -lo interrumpió Jazzy, recordando las palabras de su madre.

-En fin, ¿cuándo se van? -preguntó, rodando los ojos.

-El sábado. A San Francisco. Por una semana. -respondió Pattie, levantando sus cejas repetidas veces, con un gesto ''coqueto''. Jeremy la miró extrañado y luego entendió.

-Querida, no. Nada de fiestas. Quiero la casa impecable cuando volvamos. Compórtate, tienes 18 años. Sé responsable, o... luego verás las consecuencias.

Justin rodó los ojos y asintió.

Luego de eso todos seguimos conversando cosas sin importancia, pero la mirada de Justin sobre mí me incomodaba. ¡Quería decirle que dejara de mirarme! Pero a la vez me gustaba... oh mí Dios, qué complicada soy. Charlie tenía razón.

La hora pasó y junto con eso, la cena llegó a su fin. Haciendo que los niños se fueran a dormir, y Pattie junto a Jeremy subieran a su habitación.

-¿Quieres ver una película? -preguntó Justin, dando palmadas a su lado en el sillón para que me sentara.

-Claro, porqué no. -respondí y me senté a su lado. -¿Cuál quieres ver?

-Me han recomendado "El conjuro" ¿Quieres verla?

-Amo las películas de terror, ¡tenemos que verla! -chillé con emoción.

Justin asintió y colocó la película, dejando que ésta se empezara a reproducir.

A medida que la película avanzaba, más me aburría. Y al parecer, Justin también. Por lo cual decidimos apagarla y simplemente conversar.

Justin me hablaba acerca de sus próximos partidos con el equipo. Y yo le hablaba acerca de libros, ya que no tenía nada interesante para contar. Me sentía nerviosa a su lado, y aveces balbuceaba, estar enamorada era raro. Contorneaba sus tatuajes mientras lo escuchaba hablar. Pero de un momento a otro todo se quedó en silencio, con su intensa mirada en mí, y la mía en él. Era raro, y siempre que miraba a otra persona a los ojos, ella podía notar mi dolor en mi mirada. Pero ahora me sentía confiada bajo la mirada de un perfecto ojimiel.

-¿Por qué lo haces? -finalmente habló Justin.

-¿Hacer qué? -pregunté nerviosa.

-Autolastimarte...

-Justin, no me gusta hablar de ese tema. -susurré cabizbaja.

-Pero soy tu mejor amigo, habla conmigo.

-Lo dejaste de hacer hace mucho tiempo...

-Lo sé, pero lo estamos intentando, ¿no es así? -preguntó y asentí, sonriendo a medias. -Por favor, cuéntame. Yo te puedo ayudar.

-No quiero hacerte sentir culpable, enserio, pero... tú insistes en saber la verdad y todo esto fue por ti. -respondí en un simple susurro. Él se quedó sin expresión alguna, mirando a la nada.

-Y-yo, lo siento... -silenció. Lo miré, y sus ojos avellanados no eran los mismos. No debí decirle, pero era ahora o nunca, era el momento de la verdad, aunque fuera apresurado, aunque apenas llevemos días intentando volver a nuestra relación, y aunque yo tenga que dar el primer paso, será así, y le diré.

-He estado enamorada de ti todo este puto tiempo, pero todas las otras chicas con las que te haz acostado son perfectas. Por ejemplo, Sophia, ella tiene todo lo que yo nunca podré tener, ¿entiendes? Ella tiene esas curvas perfectas, busto y trasero perfecto, es una diosa del sexo, como le hacen llamar. Y yo, ¿qué tengo para enamorarte? Soy insegura de mí misma, y no entiendo por qué mierda soy de la manera que soy. Quiero volver a ser la misma que fui antes, ¿sabes? Quiero ser feliz, y tener a alguien que me diga que valgo la pena. Quiero superar la anorexia, y quiero vivir una vida normal. Quiero al chico perfecto a mí lado... pero, ¿Quién podría amar a una chica suicida? ¿A la loca de la clase? ¿A la chica que todos desprecian?

-¡Me he acostado con todas ellas para olvidarte a ti! Porque joder, eres todo lo que tengo, todo lo que necesito, todo lo que quiero y mucho más de lo que alguna vez deseé.

-Justin...

-Sé que soy una horrible persona, el peor de todos. Pero te quiero, ¿sabes? Te quiero y ahora mismo, te necesito más que a nadie.

-¿En qué sentido me necesitas? -pregunté, limpiando algunas lágrimas que caían de mis ojos.

-Necesito que me perdones por ser el mayor inútil de todos, ¿está bien?

-Podrías ser el mayor inútil, pero yo te seguiré queriendo. Porque, Justin Bieber, me tienes hechizada. -soltamos una leve risa.

-Y... prométeme que no volverás a cortarte nunca más.

-Lo prometo. -confirmé, sellando nuestra promesa con un leve beso y un abrazo.

-Te quiero. -susurró.

-Yo también, Biebs.

Depression {Justin Bieber} | AdaptadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora