Usted ya sabe como es esto señor Tomlinson. No es la primera vez que viene. Preparese que en 5 minutos vendrán a por usted.-dijo el doctor.
Como siempre Louis se quitó todo lo que llevaba encima y se puso aquella horrible bata verde que tan malos recuerdos le traían. Enseguida notó que Harry estaba triste.
-Sabes que no quería que vinieras justo por esto, siempre te pones triste.-dijo Louis acariciando la mejilla Harry.
-Es que cuando venimos aquí, me recuerda lo mal que la pasamos las dos veces que casi te perdía.-susurró Harry.
-Pero esto es distinto, ahora sólo es una revisión, siempre han ido bien. Ya no tengo nada, sólo piensa que esta es la última. Cada 6 meses, a partir de ahora será sólo una vez
al año, así que tranquilo.-decía Harry.-Ya hay que ver, tendría que ser yo quien te diera ánimos a ti y en cambio tu me animas a mi.-decía Harry.
-Sabes que no me gusta verte triste. Me gusta irme viendo tu increíble sonrisa.-dijo Louis, besando los labios de Harry. Enseguida Harry le devolvió el beso. Cuando se separó Harry no tuvo más remedio que sonreír.
-Y bueno, como siempre, ten esto y guárdamelos.-dijo Louis entregando a Harry sus dos anillos. El de prometidos y el de casados.
-Los guardaré muy bien-dijo Harry sonriendo mientras ya se llevaban a Louis.
-Justo esa sonrisa, es todo lo que necesitaba. dijo Louis saliendo en la camilla por la puerta.
Ahora sólo hay que esperar unas 6 horas.-pensó Harry, soltando un suspiro.
Esta vez había sido precavido y se llevó el ordenador al hospital. Allí se conectó y pudo trabajar, así la espera no era tan larga.
Habían pasado ya 6 horas y Harry empezaba a impacientarse. Ya no se podía concentrar trabajando, ahora sólo escuchaba música.
Escuchó el sonido de una cama acercarse. Por fin, traían de vuelta a Louis.
En cuanto lo vio se le cayó el alma al suelo. Louis venía blanco, con sus labios morados, grandes ojeras en sus ojos, estaba pasándolo realmente mal.
-Lou, mi vida.-dijo Harry acariciándole la cara. Pasó sus manos por su frente y reposó la palma al sentir la temperatura alta.-¡Estas ardiendo!
-Ya, me dijeron que es normal. La última prueba fue un poco más agresiva y le ha dado temperatura. Enseguida le hará efecto el antibiótico que le hemos puesto en la vía.-Avisó el enfermero.
-V-vale.-Dijo Harry con el ceño fruncido. Luego se concentró en Louis.-¿Puedes escucharme Louis? Soy yo, Harry.-dijo muy cerca del odio de este.
-Hola, rizos.-logro decir Louis apenas en un susurro.
-Lou.-sonrío Harry.
En ese momento Louis se incorporó devolviendo encima de la toalla que tenía a su lado.
Harry enseguida le retiró el cabello de la cara y le secó la boca con otra toalla limpia.
-Yo, no quiero que me veas así.-decía muy despacio Louis.
-En la salud y en la enfermedad, ¿recuerdas?-dijo Harry sin hacer caso a Louis, que se rindió enseguida sabiendo que no conseguiría convencer a Harry.
-Ahora descansa, voy a pedir un recipiente por si necesitas a devolver de nuevo.-dijo Harry levantándose y saliendo por la puerta. En cuestión de minutos estaba de nuevo junto a Louis.
-Ya esta Lou , ahora intenta descansar. Aquí voy a estar por si necesitas cualquier cosa. Voy a ponerte un poco de música relajante, ¿vale?-dijo Harry poniendo una suave música de piano, violín y sonidos de naturaleza juntos.
Poco a poco Louis se relajó, aún que de vez en cuando se volvía a incorporar para devolver, el estómago ya le dolía del esfuerzo.
-Ya está, tranquilo-Le decía Harry. Louis cerró los ojos concentrándose en la música, sus labios se movieron creando una pequeña sonrisa.
-Me acuerdo de esta canción, a ti te encantaba que yo la tocara en el piano y tu siempre te quedabas dormido en mi hombro.-decía Louis débilmente recordando nítidamente aquel momento.
-Me encantaba tocarla porque sabía que tarde o temprano acabarías durmiéndote sobre mi. Podía sentir tu aliento cerca de mi cuello.-Dijo Louis sonriendo.
-Yo también lo recuerdo cariño, luego me cogias en brazos y me llevabas a nuestra cama, donde te dormías abrazado a mi.-Ahora Harry también sonreía, mientras acariciaba la frente de Louis empapada de sudor debido a la temperatura. Finalmente, después de un rato, Louis se quedó dormido.