-Ven Louis, hay que hacernos una foto.-Decía Harry. -Disculpa, ¿podrías hacernos una foto?- le pidió a una chica que iba pasando por ahí.
-Por supuesto.-accedió la chica.
Los dos se pusieron juntos, se abrazaron y sonrieron con los dientes expuestos.
La chica hizo la foto.-Ya está. Salís muy bien-dijo la chica devolviéndoles la cámara.
-Vamos, vamos. ¡Por fin hemos llegado!-dijo Harry emocionado como un niño al entrar en el hotel.
-Vaya, es muy lujoso este hotel. Está precioso-dijo Louis.
-A que si. Y ya estoy deseando ver nuestra habitación.-dijo Harry con alegría.
El botones llevo las maletas hasta su habitación, pero cuando llegaron se dieron cuenta que no era una simple habitación. El hombre les había llevado con un mini coche a una gran casa que había cerca del mar.
-Está es una de las zonas más tranquilas, apenas hay gente alrededor. Todo fue de acuerdo a como ordeno en la reservación. Si necesitan alguna cosa sólo deben de llamar al teléfono que encontraran dentro. Aquí les traeremos la comida hecha cada día para que puedan comer y cenar contemplando la maravillosa vista del mar.-Les dijo el botones
descargando las maletas.
-Disfruten de su estancia.-dijo mientras se subía de nuevo al cochecito y desaparecio por el camino en el que llegaron. Dejando solos a Harry y Louis en aquella casa. Rodeados del inmenso y precioso mar.
-Eso si que supera mis expectativas. -dijo Louis.
-Jamás imaginé estar en un lugar así, es espectacular.-dijo Harry, acercándose a dar un beso a Louis y luego entrando dentro de la casa.
-Estoy realmente agotado.-expresó Harry mientras se quitaba los zapatos y se sentaba en el suelo.
Louis lo miro y se dirigió en dirección a él.
-¿Sabes qué es lo que mas me gusta?- dijo poniéndose delante de Harry, agachándose justo quedando frente a él.
-¿Qué?-dijo levantando las dos cejas y sonriendo.
-El que estamos solos. Te voy a poder hacer gritar todo lo que yo quiera, y nadie va a escucharte.-dijo Louis mientras se acercaba lentamente a Harry y lo besó.
-¿Ah si?, ¿Qué tienes en mente hacerme?- dijo Harry devolviéndole el beso.
-Pues de todo, una y otra y otra vez.-gruño Louis contra sus labios.
-No sé que estás esperando-dijo Harry y a la vez comenzó a quitarle le camisa a Louis para poder acariciar su pecho. Louis hizo lo mismo, quitándole la camiseta a Harry y tirándose
inmediatamente encima de él. Besándolo como si nunca hubiera probado sus labios antes.
Se besaban con pasión y desespero. Louis se frotaba incontroladamente contra Harry, que sólo busca la forma de bajarle los pantalones para poner las manos en el culo de su marido.
-Tus labios tienen un sabor exquisito. Jamás me canso de besarlos.-decia Louis buscando quitarle los pantalones a Harry.
-Pues parece que ya lo has despertado.- dijo Harry mirando hacia abajo en dirección a su miembro.-Quiero que me digas cosas sucias, como sabes que me gustan.-dijo y sé mordió el labio.
-¿Qué quieres que te diga?, ¿Que deseo que mis manos te arranquen la ropa, hacerte preso de mi lujuria, mis sucios y oscuros deseos? ¿que quiero cada rincón de tu cuerpo, que me des lo que deseo? Hacerte el amor hasta que tengas que pedir que pare porque no puedes más. Que te voy a comer toda la polla como si fuera una paleta.-dijo Louis con una voz ronca.
