Ha terminado de esperar, por lo que su pareja está a punto de descubrir que su cama es perfecta... Porque las emociones de un berserker nunca se quedan quietas, y cuando la necesidad de Taehyung sale rugiendo a la superficie, solo hay una forma de salvarla: correr. Así lo hizo. Un año después, está de regreso y su berserker está bajo control. Excepto que es demasiado tarde. Porque si Taehyung quisiera ganarse su corazón... huir es lo peor que podría haber hecho. Menos mal que un berserker nunca se rinde.