! Esta historia contiene temas de drogas, el abuso de ellas, violencia familiar y lenguaje homofóbico.
n/a: hola gente!! si leen esto quiero agradecerles por leer esta historia, antes me hacía feliz escribirla y ahora me esfuerzo mucho más por hacerlo al ver que les gusta! amo a todos los que leen esta fic, así que disfruten este capítulo :)
side note: happy pride month!!!
!!!!!!otra side note: LES RECUERDO QUE todo lo que esté así ES LO QUE EL OMEGA O ALFA DE H&L DICEN.
Bueno, enjoy!
—&—
Harry sintió la mirada de sus compañeros sobre él y de repente se sintió cómo el primer día. Con la excepción de que ahora todos pensaban que Louis estaba intentando meterse en sus pantalones.
Pasó todo el primer período con el ceño fruncido y refunfuñando. Irradió energía de "qué mierda ves" todo el día y poca gente se le acercó. Todo se empeoró cuando el señor Wilson les recordó que el proyecto semestral se entregaba el 1 de diciembre (y Harry se puso algo gruñón cuando se dio cuenta que ni si quiera tenía una idea de lo que iba a hacer para llenar el estúpido portafolio).
Salió del salón de clases y se sentó en unas escaleras en donde casi nadie podía verlo. Sacó un sándwich de su mochila y comenzó a masticarlo con fuerza.
—¿Qué te hizo el pobre emparedado?—Niall se sentó a su lado y al ver que Harry no decía nada continuó hablando— ¿Qué te pasa hoy? Estás más malhumorado que de costumbre ¿tu novio no te ha visitado en un par de días?—se burló
—Cállate, no es mi novio, ni si quiera estoy seguro de que seamos amigos.—después añadió:— Solo es un mal día, mis supresores se terminaron hace dos días y no hemos podido conseguir.
—Oh, eso lo explica.
—¿El qué?
—Casi pude olerte desde antes de entrar al edificio... ¿qué piensa Louis al respecto? Parece que le gusta mucho tu esencia—alzó las cejas esperando una reacción del omega.
—¿Qué mierda te traes tu con Tomlinson? Hemos hablado un par de veces y ya quieres casarnos. Ridículo—dijo murmurando aquello último.
—Le gustas, Harry. No sé si sea bueno o malo, pero lo conozco desde que estábamos pequeños y...—hizo una mueca, reconsiderando lo que estaba a punto de decir
Harry frunció el ceño. Niall rara vez se ponía serio.
—Su familia es... extraña. Sus padres se casaron por un contrato y los Tomlinson se apoderaron de "Deakin's". Mark Tomlinson es dueño de casi media ciudad, Harry, tienes que tener cuidado con Louis—pausó—. Lo conozco desde hace un tiempo porque nuestros padres fueron a la misma Universidad y eran amigos. Algo pasó entre los papás de Louis y los míos y... no volvieron a hablarse.
—¿Sabes qué pasó?—preguntó inclinándose hacia adelante
—Mi hermano mayor estaba un día jugando videojuegos en casa de los Tomlinson—comenzó a narrar bajo la atenta mirada de Harry.— Tenían 14 años, yo nunca conviví demasiado con Louis porque él era una generación arriba, pero Greg y él solían pasar mucho tiempo juntos—negó con la cabeza para sí mismo.— Mi hermano fue al baño y Mark entró a la habitación, estaba hecho una furia y comenzó a golpearlo porque había encontrado marihuana en una mochila. Mi hermano por fin salió cuando escuchó todo el alboroto y vio el momento exacto en el que Mark le rompía la nariz a su hijo.
Harry abrió los ojos como platos y se tapó la boca con una mano. En su mente, los recuerdos de los golpes en el rostro de Louis y la espalda "raspada" (que el rizado nunca vió), volaron con rapidez y se presentaron como un flash. La información era abrumadora y el omega casi sentía ganas de vomitar.
—Creí que-creí que, tú, de todas las personas, deberías de saberlo.
—¿Por qué yo?—cuestionó confundido
—Porque a ti también te gusta.
[...]
Louis sonrió con malicia cuando vio la ropa de Matt en las bancas. Codeó a su compañero para que viera el tesoro y a ambos se les iluminó el rostro con una gran idea.
Louis dejó un par de calcetines y tomó la pila de prendas de su Fullback. Salió de los vestidores y se dirigió al Starbucks, con la carga bajo el brazo y la cara brillando de travesura. Al llegar abrió las puertas transparentes y se deleitó al no ver una fila y ver a su cajero favorito del otro lado del mostrador.
—Buenas tardes, cerise.
—Hola ¿qué vas a querer el día de hoy? El menú del día cuenta con café americano alto y una dona de chocolate—tomó un plumón y por fin levantó la vista— ¿Y qué mierda dijiste al final?—sus ojos se movieron a los objetos en los brazos de Louis— ¿De quién es?
—Un panini español, por favor—sacó su billetera.— Son de Matt, me las robé de los vestidores—soltó una risita.
—Muy maduro, Louis, muy maduro. Son 5.47 ¿efectivo o tarjeta?—Louis le extendió dos billetes a modo de respuesta— ¿Por eso vienes tan contento?
—No, no lo sé, me sentí diferente desde que entré- oh, lo siento, no me di cuenta que estaba retrasando la fila—se disculpó con una Beta y se movió a la otra punta del mostrador en donde se recibían los alimentos.— Harry ¿cuándo terminas tu turno?
—En 10 minutos, pero no quiero que me esperes.
—Woah, woah, woah- gracias—tomó el plato blanco con el logo verde que le extendieron de las manos de una barista— ¿Quién dijo que iba a esperarte? Eres un omega egocéntrico, ya veo.
Harry odio el hecho de que no pudo controlar el rubor que le subió desde el cuello hasta las mejillas y odio más cuando Louis soltó una carcajada. Dios, estaban como a tres metros de distancia, seguro el castaño podía oler su vergüenza. Si el ojiazul notó algo, no dijo ni una palabra, aunque Harry no pasó por alto el conocido brillo en los ojos del Alfa cuando reconocía la esencia del omega (por alguna razón eso se le fue directo al ego y su animal interno se regodeó en esa información).
—Claro que vine por ti, Harry, odio el café. Te espero afuera, cerise.
Salió sin decir nada más y dejó al chico ofuscado ¿qué mierda hacía Louis en una cafetería si...?
Viene a vernos.
No, seguro son los panqués (que nunca ha comprado) pero es lo más probable. Porque a pesar de que Louis a expresado muy claramente su interés en Harry, es muy diferente demostrarlo tan... directo. Atendió a dos personas más y por fin se quitó el horrible mandil verde y la gorra negra del uniforme; se fue hacia la parte de atrás para tomar su mochila y se despidió con la mano del otro chico que estaba ahí. Cruzó la cafetería hasta salir por la puerta transparente y tuvo que reprimir una sonrisa cuando vio a Louis con un cigarro en los labios, lentes de sol puestos y siguiéndolo con la mirada.
—Te ves lindo con tu uniforme—sonrió burlón.
Harry echó un vistazo a su ropa y resopló. La polo negra era la prenda más odiosa y asquerosa que había visto, además las mangas le picaban y el cuello era extremadamente incómodo.
—Cállate.
El rizado comenzó a caminar con Louis por un lado y notó que este había terminado su cigarro. Escuchó el celular de Alfa sonar y pretendió como que no escuchó la conversación entera.
—¿Hola?—frunció el ceño— No, Lottie, yo no fui. Zayn fue ayer así que seguramente el se terminó la hierba que quedaba— bien, no era sorpresa que se drogaba pero decirlo tan abiertamente en frente de él, lo sorprendió un poco.— Compraré más, deja de quejarte, Dios mío. Sí, sí, la de Marcus es la bueno, lo sé; bye, yo también te quiero cachorra.
Cachorra.
El nombre removió algo en el pecho de Harry, que logró sacarle una sonrisa. Louis debió de sentir algo cambiar en el ambiente porque lo volteó a ver con una rapidez impresionante y un gesto confundido.
¡Es tan guapo!
De nuevo el humor de Harry decayó y le gruñó mentalmente a su omega.
—¿Pasó algo?—preguntó el otro chico, guardando su celular en el bolsillo del pantalón
—No.
—Harry ¿qué tienes?—Harry supo que Louis lo estaba intentando manipular soltando un poco de su esencia y eso lo molestó más
Porque está funcionando.
—Nada, Tomlinson. Estoy cansado—divisó a Niall a lo lejos, recargado en su auto gris y apresuró el paso con Louis detrás.
—Pero hace rato estabas bien y... bueno, ahora parece que me odias.
—¿En algún momento expresé lo contrario?—se giró hacía él y casi chocó con el ojiazul pero no dijo nada y mantuvo su posición firme. a pesar de que la cercanía hacia imposible ignorar el olor a bosque y café (¿por qué mierda olía a café si lo odiaba?).
Harry sintió a su omega retorcerse de emoción dentro de él pero empujó muy lejos el deseo de acortar la distancia.
—¿Qué?—Louis tomó una respiración profunda y el rizado no supo si fue para calmarse o llenarse del olor a vainilla y canela que emanaba.
—No confundas amabilidad con amistad.
—Pero...
—¿Pero qué? ¿Te acompaño a la enfermería para que te curen y de repente ya vamos a marcarnos?—dio un paso atrás y se cruzó de brazos
—Harry...—dijo en tono de súplica
Hubo un momento en donde Louis se vio como un cachorro herido y la conversación que tuvo con Niall sobre Mark, días atrás, le llegó de repente; así como el leve sentimiento de culpa que ignoró.
—Adiós.
Nos vemos, nos vemos. No lo rechaces.
El Alfa de repente hizo lo que Harry menos se esperaba. Sonrió divertido.
—Tu boca dice una cosa pero tu omega te está traicionando.—la expresión en el rostro de Harry debió de ser de horror porque el castaño luego añadió:— Si en serio no quieres saber nada de mí, dilo ahora—Louis dio un paso al frente y Harry se vio envuelto en la esencia del Alfa.— Quiero escucharte decirlo.
Tragó en seco y dejó caer la pared imaginaria que había construido. Joder ¿por qué se sentía así? Maldijo a Louis en su mente y suspiró derrotado.
—Eres un idiota—murmuró.
—Lo sé—sonrió complacido y dio varios hacia atrás. Se despidió de Niall con la mano y se dirigió a su auto.
Maldito, Alfa.
Viendo a Louis partió se dio cuenta de repente que había caído en el juego del castaño. Louis nunca mostraría una faceta tan débil ¿cómo pudo ser tan estúpido y crédulo? En realidad no estaba molesto, solo confundido con el efecto que el chico de ojos azules tenía en él.