Nunca me dejes | Finge ser mi...

By prettyyywomann

189K 17.6K 5.8K

*ACTUALMENTE EN EDICIÓN* "No prometas algo que nunca vas a cumplir" Secuela de finge ser mi novia. Fecha de... More

Prólogo
Capitulo 2
Capitulo 3
Capitulo 4
Capitulo 5
Capitulo 6
Capitulo 7
Capitulo 8
Capitulo 9
Capitulo 10
Capitulo 11
Capitulo 12
Capitulo 13
Capitulo 14
Capitulo 15
Capitulo 16
Capitulo 17
Book trailer
Capitulo 18
Capitulo 19
Capitulo 20
Capitulo 21
Capitulo 22
Capitulo 23
Capitulo 24
Capitulo 25
Capitulo 26
Capitulo 27
Capitulo 28
Capitulo 29
Capitulo 30
Aviso
Capitulo 31
Capitulo 32
Capitulo 33
Capitulo 34
Capitulo 35
Capitulo 36
Capitulo 37
Capitulo 38
Capitulo 39
Capitulo 40
Capitulo 41
Capitulo 42
Capitulo 43
Capitulo 44
Capitulo 45
Capitulo 46
Capitulo 47
Capitulo 48
Capitulo 49
Capitulo 50
Capitulo 51
Capitulo 52
Capitulo 53
Capitulo 54
Capitulo 55
Capitulo 56
Capitulo 57
Capitulo 58
Capitulo 59
Capitulo 60
Capitulo 61
Capitulo 62
Capitulo 63
Capitulo 64
Capitulo 65
Capitulo 66
No es un cap
Capitulo 67
Capitulo 68
Capitulo 69
Capitulo 70
No es un cap
Capitulo 71
Capitulo 72
Capitulo 73
Capitulo 74
Capitulo 75
Capitulo 76 | Final
Epílogo
Agradecimientos + tercer libro

Capitulo 1

6.3K 235 31
By prettyyywomann



SERINA

23 de agosto.

Mientras golpeaba el saco de boxeo, Charlie gritaba a todo pulmón para alentarme a seguirle pegándole al saco más y más fuerte.

Desde que cumplí los 7 años, mis padres, a mi hermano mayor y a mi nos exigían asistir a clases de defensa personal, pero por alguna u otra razón cualquier entrenador terminaba renunciando, hasta hace dos años que Charlie decidió que me entrenaría y mi madre con gusto aceptó.

— Para, para, para. — Me ordenó Charlie.

A Charlie lo conocí desde pequeña, su padre es uno de los mejores amigos de mi mamá, el tío James. Desde que era pequeño mi tío James le decía a Charlie que cuidara de mi. A donde sea que yo iba él me acompañaba, hasta ahora ha sido así.

Él ha sido mi mejor amigo, y mi amor no correspondido.

Él a pesar de tener 18 años es muy bueno en esto de las clases de boxeo y defensa personal, por él es que yo he aprendido bastante.

— ¿Por que pides que pare? — pregunté mientras jadeaba y tomaba la toalla del suelo para secarme el sudor.

— ¿Hay algo que te tenga agobiada? — preguntó curioso. — ¿Algún chico? — Yo reí con extrañeza y negué.

— No, ¿por que?

—Te noto muy... ¿tensa?.  — yo fruncí mi ceño y él se acercó a mi tomándome de los hombros.— vamos, cuéntame.

— No es nada, estoy bien. — Sonreí, él entrecerró sus ojos con duda. — ¡es enserio!

— Bien... tienes 15 años ¿ y ya sufriendo por amor? — yo rodé los ojos con una sonrisa. — Se supone que soy tu mejor amigo, debo ser el único en tu vida. — Sonrió.

Oh Dios.

¿Oyeron eso? Es mi corazón latiendo a mil por hora.

— Tonto. — dije dándole un leve golpe con la toalla. — y porque eres mi mejor amigo deberías saber que no hay ningún chico en mi vida.

Él hizo una mueca.

— Bueno. — sonrió y se agachó un poco para levantar una botella de agua que se encontraba en el suelo. Me la lanzó y yo la atrapé con facilidad. — Vamos a caminar un rato.

***

— Ya casi son las 6 y pronto oscurecerá.

Nos encontrábamos en el parque que estaba cerca de mi casa, Charlie estaba sentado en el pasto y yo tenía mi cabeza en sus piernas mientras veía el cielo que poco a poco se oscurecía.

— No importa, no me pasará nada si estoy a tu lado. — le contesté sin mirarlo.

— ¿Y si yo llego a faltarte algún día? ¿Qué harás?

Y ahí regresé a verlo. Yo fruncí mi ceño.

— ¿De que hablas tonto? ¿Cómo está eso de que si algún día llegas a faltarme?. ¿Que acaso no sabes qué yo — me señalé y él me miró con curiosidad. — te seguiré a donde tú vayas?

Él me mostró una de esas sonrisas tan perfectas y negó levemente con la cabeza.

— ¿Que? — le pregunté con confusión.

— Nada. — contestó de inmediato y suspiró — es sólo que... — hizo una pausa, una pausa muy larga que me inquietó. Yo hice un movimiento con la cabeza para que él siguiera, pero él simplemente se quedó callado un buen rato. Su silencio era muy desesperante.

— ¿¡Que?!. — grité con desesperación y él no dijo nada.— ¡Oh! ¡Vamos Charlie! ¡dime!

—¡Ok, ok! — dijo rápidamente alzando su brazos en modo de rendición. Después exhaló. — Probablemente me vaya de la ciudad cuando termine la preparatoria. — mi ceño se frunció y rápidamente me senté para verlo mejor. —  No es seguro... pero quiero entrar a una universidad en Chicago... — me miró. — pero tampoco quiero dejarte sola, ni quiero separarme de los demás...

— No.— lo interrumpí de inmediato. — si tanto deseas irte a Chicago. — sonreí y tomé una de sus manos. — hazlo, no te detengas.

Claramente no quería que él se fuera, lo amaba tanto que dolía.

— Si llego a irme prometo visitarte cada fin, trabajaré y así tendré dinero para los viajes. Hablaremos por Face Time...— lo prometo.

Yo asentí con una sonrisa apretada.

— ¿Tus padres saben de esto? — pregunté con curiosidad.

— No. — negó desviando la mirada. — Eres la única.

— ¿Cuando piensas decírselos? — Él se encogió de hombros.

— No lo sé, no estoy muy seguro de eso, ademas, todo puede pasar en unos meses.

Yo asentí en modo de comprensión.

— Eso es cierto. — dije yo y él tomó una de mis manos.

— Eres la mejor amiga del mundo.

— Lo sé. — dije orgullosa.

***

15 minutos después ya estaba en casa, cerré la puerta detrás de mi y sonreí al ver a mi hermano en la sala.

— Holi. — saludé tomando asiento a un lado de él.

— Hola. — Contestó sonriente sin siquiera mirarme pues estaba atento jugando Mario. Yo me recargué en su hombro. — ¿en donde andabas? — preguntó intrigado.

— Estaba con Charlie. — le respondí mirando la pantalla. ¿Como es que puede jugar tan bien? — ojalá así de bueno fueras en matemáticas. — le dije para molestarlo. Él hizo una mueca de disgusto cuando en la pantalla salió "game over".

— Eso lo dice mamá siempre, calla. — yo reí y él dejó la consola a un lado. Yo dejé de recargarme en su hombro y él me miró con picardía. — Así que con Charlie.

Yo asentí con una sonrisa y él negó divertido

— Ay hermanita, te brillan los ojitos cada vez que hablas de él.  — yo rodé los ojos avergonzada y me levanté del sillón tomando una almohada para darle un buen golpe pero el rápidamente lo esquivó.

— Tonto.

— Tinti. — Me arremedó. — Anda ve a dormir que mañana hay clases. — tomó la almohada del suelo para después acomodarla en su lugar. Yo asentí sonriente.

— Ok, buenas noches.

— Buenas noches.

***

Abrí mi boca dispuesta a bostezar, pero la puerta abriéndose me lo espantó.

— ¡SERINA!

Abrí mis ojos con asombro y alcé rápidamente mi cabeza como si hubiese visto la muerte pasar. Dios mío este hombre me va a matar en cualquier momento.

— ¿¡Que te sucede!? ¡Animal!

— Despierta. — dijo con calma. — Ya es tarde. —finalizó con una sonrisa de malicia en su rostro.

— Si no estuviera despierta ni siquiera te hubiera hablado.

Él rió burlón y yo bufé dejando caer mi cabeza en la cama y tallé mi rostro con enfado.

Odio la escuela.

Literalmente solo dormí tres horas, no pude dormir pensando que hoy sería mi primer día en la preparatoria.

— Tienes 15 minutos. — informó y después cerró la puerta.

—Sí, sí, lo que digas.

La relación con mi hermano mayor es como de amor y odio, cuando nos odiamos es en las mañanas pues siempre entra a mi cuarto, grita como loco, yo le grito devuelta. En fin, lo bueno de esto es que los amigos de mis papás y sus hijos son mis vecinos y ya están acostumbrados a todo esto, si no fuera así, ya nos hubieran sacado a patadas.

En verdad, si no me muero atropellada o por la vejez, moriré por culpa de un paro cardíaco debido a los gritos de mi hermano.

Los 15 min pasaron, me di una ultima mirada en el espejo y cuando me sentí satisfecha, tomé mi mochila y la coloqué en mi hombro derecho, dispuesta a salir de mi habitación para dirigirme a la sala. Cuando llegué ahí, mamá y mi papá se encontraban en la cocina haciendo hot cakes

— Buenos días. — saludé con entusiasmo dejando caer mi mochila en el suelo para sentarme en las sillas del comedor.

— Buenos días cielo. — Contestó mi padre.

— Buenos días cariño. — Contestó mi madre entregándome el plato con hotcakes, yo pasé mi lengua por mis labios saboreandolos.

— Tienes 5 minutos niña. — anunció Oliver. Yo rodé los ojos.

— Lo sé.

— Bueno, me voy. — Dijo mi papá dándole un beso a mi mamá.— Serina cariño— lo miré. — te esperamos a fuera. — yo asentí, luego miró a mi hermano e hizo un movimiento con la cabeza — Vamos campeón.

Oliver lo siguió por detrás.

— ¡4 minutos! — gritó detrás mío, yo volví a rodar mis ojos.

Cuando terminé de comer, dejé el plato vacío en el fregadero y me acerqué a mamá.

Cuando yo estaba apunto de abrir la boca para despedirme de mamá, la voz de Oliver me interrumpió.

— ¡SERINA!

Respiré profundamente para calmarme.

Dios mío, dame paciencia por favor.

— Ya cielo, adiós. — dijo mamá. Yo me acerqué a ella y ella dejó un beso en mi frente. — suerte en tu primer día. — yo asentí sonriente, pero esa sonrisa se esfumó cuando se escuchó el claxon retumbar por toda la maldita zona residencial.

— ¡QUE YA VOY! — grité con todas mis fuerzas, ya estaba enfadada. — ushhh, lo mataré. — murmuré y mamá comenzó a reír negando con la cabeza como si Oli y yo no tuviéramos remedio. — Adiós mamá.

— Adiós cariño.

Dicho esto, yo caminé regañadientes hacia la salida, cuando llegué a la camioneta en donde todos estaban, yo bufé.

— Ya estoy aquí, animal. — le dije a mi hermano que estaba en el asiento del copiloto.

— Que bueno, ya estaba apunto de traerte de las greñas.

— Ja, que chistoso.

— Primero que nada buenos días. — dijo Gabriela hija de mi tío Jack. — ¿amanecimos bravos?

— Buenos días a todos. — dije yo y me crucé de brazos regresándola a ver. — Nah, todo bien.

Ella rió.

— Jojojola a todos buenos días. — Dijo Charlie llamando nuestra atención, yo sonreí como tonta y él entró a la camioneta.

— Otro que llega tarde. — Canturreó Samantha, hija de mi tía Lluvia y mi tío Ethan.

— Lo siento, mi despertador no sonó. — se disculpó Charlie.

— ¿Están todos? — preguntó papá regresándonos a ver para verificar si todos estábamos.

Yo asentí.

Éramos 7 en esta camioneta.

Y sí, mi familia es grande.

Cuando mis padres eran más jóvenes, con sus amigos y los hermanos de mamá tomaron la decisión de ser vecinos.

¿Ven por qué digo que ninguno se molesta cuando Oliver grita? Es como el despertador de todos.

En fin. Volviendo al tema, cada uno de los amigos de mi mamá tuvo su pareja, sus hijos, y aunque no todos tengamos la misma sangre, todos somos una familia.

Cuando llegamos a la escuela todos bajaron, y yo me quedé con papá para despedirme de él.

Mi papá es policía, así que cada día que me despido de él le doy mucho amor y miles de bendiciones, pues siendo policía pueden pasarle muchas cosas.

Después de despedirme de papá adecuadamente corrí para estar a la par de los demás.

— Este semestre vengo a sacar todo mi encanto para conseguir a un bombón. — Dijo Gabriela cuando yo llegué a su lado. Oliver rió.

— Si, claro, si es que llegan a hacerte caso. — le dijo Oliver con burla. Gabriela rodó los ojos y todos nos dirigimos a nuestros casilleros.

Los casilleros eran los mismos que habíamos ocupado en la secundaria, así que comencé a meter todos mis libros en él, al igual que metí unas cosas de cuidado personal, ya saben, cosas de chicas.

De pronto, yo fruncí el ceño y arrugué la nariz cuando un olor a descompuesto llegó a mis fosas nasales.

Yo me giré para ver de donde venía ese olor, también quería saber si los otros olían lo mismo o sólo yo. Y bueno, así fue, todos tenían una mueca de asco en sus caras y todos miraban a Gabriel, el hijo de mi tío Dustin.

— ¡Guácala Gabriel! ¿¡que es eso?!

Gabriel comenzó a reír con leve nerviosismo.

— Es... — alzó la bolsa para mirarla detenidamente mientras la tomaba con la punta de sus dedos.— creo que es un sándwich de jamón.

— ¿Pero por qué está en tu casillero?

— Es que no hice la limpieza de mi casillero cuando terminamos la secundaria. — yo hice una mueca de asco y todos negaron con la cabeza.

— Que asco, tíralo, de seguro eso tiene gusanos... — Sam hizo una mueca.— ...o algo...

— Si... eso haré... — se giró rápidamente sobre sus talones y yo suspiré para seguir acomodando mis libros. Cuando terminé, cerré mis casillero.

— Hey Serina.— regresé a ver a Charlie que me llamaba. — ¿me abrazas?

— ¿Y eso? — pregunté sorprendida.

— Sólo abrázame. — dijo sin más.

Yo sonreí y él me envolvió entre sus brazos.

— Ya, ya, ya. Vámonos Serina.— reclamó Sandra separándome de los brazos de Charlie.

— Llegaremos tarde. — dijo ahora Sam tomándome del brazo para dirigirnos a nuestro salón.

Samantha y Sandra son hermanas, hijas de mi tía Lluvia y mi tío Ethan, así que son mis primas y las tres tenemos la misma edad.

— ¿Sam, Serina?

— ¿Si? — preguntamos las dos al mismo tiempo con curiosidad. Sandra suspiró y yo la miré.

— ¿Creen que ahora sí consigamos novio?.

— No lo sé. — Suspiré.

— Bueno... — comenzó a decir Sandra. — yo creo tú — me señaló — ya deberías estar sacando de tu cabeza a Charlie. — yo negué con una sonrisa.— ¿es que acaso no has visto los chicos guapísimos qué hay al rededor.

— El único chico guapo qué hay en esta escuela es Charlie. — recalqué.— no me interesa nadie mas que él.

— Bueno. Eso ya lo veremos.— Dijo Sam con firmeza. Las tres no dijimos más mientras caminábamos y mirábamos los letreros de las puertas. De pronto nos detuvimos en una. — ¿es aquí?

Yo asentí entre un suspiro.

Aquí vamos otra vez.

El salón estaba algo vacío, había muy pocas caras conocidas. A decir verdad, nunca me tomé el tiempo de hablar con alguien más que no fuera, Sam, Sandra o los demás. No es como si quisiera tener más amigos, con ellos para mi era suficiente.

Las mesas eran compartidas, así que Sam y Sandra se sentaron juntas a un lado de mi mesa, mi asiento de a un lado estaba vacío, así que rogué para que mi asiento así se quedara siempre.

Expulsé todo el aire que tenía en mis pulmones y miré a las chicas, ellas se encontraban algo emocionadas por el regreso a clases, yo no deseaba crecer más.

— Chicas. — las llamé. Las dos me miraron. — Me voy a dormir mientras llega el profesor. — Tenía un poco de sueño ya que no había dormido casi nada y bueno, los profesores en esta escuela siempre llegan tarde la primera hora del primer día de clases ya que por las mañanas tienen junta. Ellas asintieron y yo recargué mi cabeza en el pupitre, y cerré los ojos.

***

No supe cuántos minutos pasaron, pero alguien me picaba las costillas.

— Oye. — era una voz de un chico.

— ¿Mmm?

— Oye... — volvió a decir aquella voz. Yo fruncí mi ceño para intentar abrir mis ojos. — el profesor ya entró.

Levanté mi cabeza levemente. Hice una mueca de dolor ya que por la posición en la que me había dormido el cuello me comenzó a doler.

Aún con la vista borrosa regresé a ver a un lado mío para ver a la persona que hace un momento me estaba llamando, era un chico.

— Gracias por avisarme. — le agradecí regresando a ver al frente.

— De nada. — respondió él.

— Buenos días, soy su profesor de biología, me llamo Daniel para los nuevos.— el profesor se presentó y sonrió mirándonos a todos.
— Veo qué hay varias caritas conocidas de la secundaria. Bueno todos nos vamos a presentar ¿de acuerdo? Empezamos por... — comenzó a vernos a todos y entonces su vista se detuvo en mi. — el final con la señorita... Serina. Por favor, dinos tu nombre completo y tu edad. — yo apreté mis labios y asentí levantándome de mi asiento.

— Hola.— comencé.— mi nombre es Serina Clayton y tengo 15 años — Sonreí levemente y volví a sentarme.

El chico de a lado se levantó segundos después de que yo me sentara.

Dios mío.

Me quedé helada al verlo.

Hace un rato no me di cuenta porque no veía bien, pero ahora...

Su aspecto era muy hipnotizante.

Era alto, su cabello era algo largo, rubio y algunos cabellos caían en su frente.

— Me llamo Thiago Jones y tengo 17 años.

En ese momento todos, absolutamente todos lo miraron.

— Y no, no reprobé solo dejé de estudiar porque se me dio la gana.

Soltó de golpe, como si estuviese irritado, enfadado.

Yo alcé mis cejas ante lo firme que había sido. Él después tomó asiento.

Yo sólo me di cuenta de que las chicas habían quedado hipnotizadas. Estaban viéndolo con lujuria como si fuese no sé, Zac Efron, Brad Pitt, Harry Styles o Zayn. Que se yo.

Yo rodé los ojos y me dispuse a dormir de nuevo por mientras los demás se presentaban, la verdad es que no me interesaba saber los nombres de los demás.

Continue Reading

You'll Also Like

5.2M 453K 83
Nunca debí caer por él. Sin embargo, tampoco detuve mi descenso. Nada logró apaciguar las maliciosas llamas de deseo que se prendieron dentro de mí. ...
629 46 17
He leído muchos libros donde la protagonista y un famoso se enamoran y, aunque no estaban etiquetados como fantasía, a mi me lo parecían porque vamos...
606K 47.2K 130
Continuación de Un Omega Con Mala Suerte ❤️ || Nomin || Jeno ♡ Jaemin || Omegavers Capítulos cortos No adaptaciones Todos los derechos reservados
5.1K 213 13
Un joven sacerdote debe cumplir su misión en la tierra después de que los ángeles caídos han regresado al mundo para destruírlo. ¿Podrá encontrar a l...